Mujeres y c¨®mplices

Independientemente de compartir programaci¨®n en el festival Photoespa?a 2002, cuyo nexo es el tema Femeninos. La identidad desde la perspectiva del g¨¦nero, hay tres exposiciones que participan de una serie de denominadores comunes: Ricas y famosas, de Daniela Rossell; ?lbum, de Ana Casas Broda, y Chicas vs Abuelas, de Nobuyoshi Araki, Hellen van Meene, Miwa Yanagi y Manabu Yamanaka. As¨ª, desde el retrato dirigido, forzado, teatralizado, donde el fot¨®grafo tiene una participaci¨®n y una complicidad con el sujeto fotografiado que hace de la instant¨¢nea una puesta en escena previa, o bien, la reconstrucci¨®n narrativa -en el sentido literario- del universo m¨¢s personal.

Este ¨²ltimo es el caso de la colecci¨®n de Ana Casas Broda (Granada, 1965) -de ?lbum ya sab¨ªamos por la exposici¨®n Miradas y visiones, Canal de Isabel II, Madrid, 1994- donde reconstruye en un bello relato su intrahistoria estructurada bas¨¢ndose en autorretratos, documentos diversos como p¨¢ginas de diarios familiares y fotos de los que les son gen¨¦ticamente m¨¢s pr¨®ximos, especialmente las de su abuela (las m¨¢s impactantes son las que Casas posa junto a ella, ambas desnudas). Y aqu¨ª -con estos desnudos- coincide tem¨¢ticamente con la obra de Manabu Yamanaka (Hyogo, Jap¨®n, 1959), contenida en la exposici¨®n Chicas vs Abuelas, concretamente los de la serie Gyahtel -t¨¦rmino japon¨¦s asimilado a 'edad', uno de los cuatro dolores budistas junto con nacimiento, enfermedad y muerte-.

Sus modelos son mujeres desnudas cuyas edades oscilan entre 89 y 102 a?os; una vieja amistad con ellas le posibilita realizar este trabajo, resuelto con una gran pulcritud t¨¦cnica sobre fondo blanco a tama?o natural. Noriko Fuku, comisaria de la exposici¨®n, escribe que 'hemos visto montones de fotograf¨ªas de j¨®venes desnudas, pero ?cu¨¢ntos de nosotros hemos visto a ancianas desnudas? Estas fotograf¨ªas pertenecen a un tipo de fotograf¨ªas que son consideradas repugnantes, feas y tab¨²es. Sin embargo, yo las encuentro bellas'. Lo cual es cierto, porque se trata de im¨¢genes 'emp¨¢ticas pero no sentimentales'.

Ricas y famosas le ha llevado a Daniela Rossell (Ciudad de M¨¦xico, 1973) a desarrollar un proyecto en el que ha documentado la vida y el entorno de los espec¨ªmenes m¨¢s representativos de la clase multimillonaria mexicana. Es un retablo de las maravillas del mal gusto, de la pasi¨®n por lo kitsch; una suerte de culebr¨®n televisivo que adquiere carta de naturaleza fotogr¨¢fica. Rossell realiza una precisa construcci¨®n narrativa en clave del 'nuevo documentalismo' que nos recuerda por su car¨¢cter de intrusi¨®n en las vidas ajenas, entre otros, los registros de referentes de la especialidad como Tina Barney, s¨®lo que aqu¨ª, a diferencia de la obra de ¨¦sta, huelga por completo el factor de la espontaneidad. Posiblemente esta colecci¨®n adquiera una dimensi¨®n antropol¨®gica con el paso del tiempo al convertirse en una s¨ªntesis visual de modas y artefactos propios de un estrato social amante de leones de peluche, muebles dorados, casas repletas de manadas de animales disecados y cantidad de r¨¦plicas de cabezas olmecas de fibra de vidrio esparcidas por los jardines.