El detalle de Scolari
Felipao Scolari tiene el aspecto de un gaucho de Rio Grande do Sul, un tipo curtido que prefiere dejarse llevar por sus ideas antes que por sus emociones, desbordantes durante la final. En los instantes en que Brasil se aproximaba a la victoria, tras los dos goles de Ronaldo, Scolari hizo dos cambios que revelaron su capacidad para atender a los detalles y dar satisfacci¨®n a los jugadores que perdieron el pasado Mundial. Muchos, como Denilson y Juninho, han atravesado periodos muy dif¨ªciles en los ¨²ltimos cuatro a?os. Sobre ellos pesaba la losa de su fracaso y la duda de que tuvieran el talento necesario para defender la casaca amarilla.
Ellos, y todos los dem¨¢s jugadores que participaron en Francia 98, tuvieron la ocasi¨®n de redimirse en la final. Scolari les dio la oportunidad bien como titulares, bien como sustitutos. En la alineaci¨®n figuraban cuatro supervivientes del anterior Mundial: Caf¨², Roberto Carlos, Rivaldo y Ronaldo. Sobre ellos ha descansado la selecci¨®n brasile?a en los ¨²ltimos a?os, en tiempos de tormenta generalmente. A Juninho le consider¨® Scolari b¨¢sico en los primeros partidos -'le puse como titular para que las dem¨¢s selecciones supieran que ¨ªbamos a jugar al ataque y que deb¨ªan respetarnos'-, pero estuvo en el banquillo en los dos ¨²ltimos encuentros. Tras el segundo gol de Ronaldo, sustituy¨® a Ronaldinho. Luego, lleg¨® el momento de Denilson, que entr¨® por Ronaldo, aclamado por el p¨²blico como quer¨ªa Scolari, atento a que todos sus jugadores saldaran una deuda con el pasado. El Mundial de Francia era historia. Ahora los protagonistas de aquella decepci¨®n pod¨ªan celebrar la conquista de una nueva Copa del Mundo.
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