El argelino Yasmina Khadra trata de Afganist¨¢n en su nueva novela

Yasmina Khadra, seud¨®nimo literario del escritor y ex comandante del Ej¨¦rcito argelino Mohamed Moulessesul, abordar¨¢ la realidad afgana en su pr¨®xima novela, que estar¨¢ lista el mes pr¨®ximo, y en la que pretende ofrecer 'una visi¨®n musulmana' de un pa¨ªs que se ha convertido 'en el centro del universo' despu¨¦s del 11 de septiembre y sobre el que la percepci¨®n occidental es 'demasiado superficial', asegura.

Khadra, que ha combatido el fundamentalismo isl¨¢mico con las armas y con las letras y que se ha erigido en una de las voces literarias m¨¢s potentes del mundo ¨¢rabe, vuelve con ello a lo que denomina la 'literatura cl¨¢sica' tras su exitosa incursi¨®n en el g¨¦nero negro. Pero no abandona la literatura policiaca. En la Semana Negra de Gij¨®n anunci¨® tambi¨¦n su inminente regreso a este g¨¦nero, para lo que ha decidido 'resucitar' en 2003 al inspector Llob, al que hab¨ªa dado por muerto en el ¨²ltimo libro de su Trilog¨ªa de Argel (Morituri, Doble blanco y El oto?o de las quimeras, publicadas en Espa?a por Zoela).

Mohamed Moulessehoul (Or¨¢n, 1955) estuvo 36 a?os en el Ej¨¦rcito argelino. La traum¨¢tica experiencia de las masacres perpetradas en Argelia por el fundamentalismo, que vivi¨® y conoci¨® como testigo y como combatiente durante ocho a?os, le decidieron a abandonar su pa¨ªs y le catapultaron a la literatura con el prop¨®sito de conjurar el olvido, en la creencia de que 'si desaparece la memoria, la experiencia puede volver a reproducirse'. 'Argelia vive hoy en la violencia', asegura, 'porque nunca reflexion¨® sobre su propia existencia'. Y en ese esfuerzo para que nadie olvide, Moulessehoul Moulessesul, que firma con seud¨®nimo femenino (el nombre de su mujer), tiene fe en la literatura: 'Un libro puede salvar m¨¢s que la medicina, porque se dirige al esp¨ªritu y a la conciencia', asegura.

Explicar la tragedia

'La novela negra me permiti¨® alcanzar el objetivo que me hab¨ªa propuesto: explicar la tragedia sin brutalizarla, manteniendo al lector un tanto alejado de las masacres, pero haci¨¦ndole reflexionar e investigar al mismo tiempo sobre lo que se oculta tras el fundamentalismo, que no es otra cosa que las mafias pol¨ªticas, financieras y administrativas. Si hubi¨¦ramos tenido dirigentes capaces, hoy los argelinos no estar¨ªamos mat¨¢ndonos', se?al¨® Khadra en Gij¨®n.

Mucho antes que los talibanes destruyeran los gigantescos budas milenarios tallados en las monta?as de Afganist¨¢n, Yasmina Khadra ya hab¨ªa advertido de los riesgos del integrismo en Los corderos del se?or (Alianza Editorial). Ahora est¨¢ acabando una novela ambientada en aquel pa¨ªs y en aquellas asfixiantes y totalitarias circunstancias para expresar una 'visi¨®n musulmana', y 'no superficial' -como cree que es la que difunde Occidente-, sobre aquel pa¨ªs, en el que 'no todo' cabe ser visto como fundamentalismo. La historia de amor que ambientar¨¢ en ese lugar y en este tiempo ser¨¢ la expresi¨®n de la 'esperanza y convicci¨®n' de Khadra en Afganist¨¢n y en sus gentes, seg¨²n explic¨® en la Semana Negra.

El siguiente proyecto del autor argelino ser¨¢ su retorno a la novela negra, para lo que el a?o pr¨®ximo devolver¨¢ la vida a su personaje el inspector Llob, al que dio por muerto en El oto?o de las quimeras. 'En la vida, la gente muere para siempre, pero los escritores tenemos la capacidad de resucitar a los muertos', se?al¨® el escritor magreb¨ª, quien ha accedido a recuperar al protagonista de sus novelas policiacas atendiendo a la reclamaci¨®n de sus lectores franceses y alemanes. Para hacerlo posible se servir¨¢ de una argucia: 'Explicar¨¦ que tuvo que aparentar su muerte para salvarse de los integristas'. 'Este personaje', afirm¨®, 'tiene por delante a¨²n una larga vida'.