Olivas presidir¨¢ la Generalitat, pero Camps ser¨¢ el candidato de los populares en 2003

El PP celebr¨® ayer en un hotel de Valencia una multitudinaria junta directiva regional para conocer de primera mano la renuncia de Eduardo Zaplana al cargo de presidente de la Generalitat 'por razones personales' que formul¨® ante la Mesa de las Cortes reunida de urgencia en la tarde de ayer. Zaplana eludi¨® todo tipo de declaraciones y evit¨® comentar su nombramiento como ministro de Trabajo y Asuntos Sociales en el remodelado Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, que ser¨¢ oficial hoy.

Pero antes de marcharse de la Comunidad Valenciana, Zaplana quiso dejar su sucesi¨®n bien atada. El PP design¨® como candidato a la presidencia de la Generalitat al actual vicepresidente primero del Consell y secretario general del partido, Jos¨¦ Luis Olivas.

La elecci¨®n de Olivas debe ser refrendada por los ¨®rganos correspondientes del partido y por las Cortes Valencianas. Los partidos con representaci¨®n parlamentaria disponen de un plazo de d¨ªas para presentar sus respectivos candidatos al cargo, pero los tr¨¢mites se pueden abreviar si hay acuerdo. El PP conf¨ªa en celebrar el pleno de investidura los pr¨®ximos 18 y 19 de julio, inmediatamente despu¨¦s del debate sobre el Estado de la Nacion.

El propio Olivas renunci¨® a su cargo org¨¢nico como secretario general del PP de la Comunidad Valenciana ante la junta directiva regional, que acept¨® por unanimidad la propuesta de elevar a Francisco Camps, actual delegado del Gobierno, a esa responsabilidad. El nombramiento de Camps debe refrendarlo un comit¨¦ ejecutivo del PP que se celebrar¨¢ esta misma semana.

La junta tambi¨¦n acept¨® por unanimidad la propuesta de Zaplana para aclamar a Camps como candidato a la presidencia de la Generalitat en las pr¨®ximas elecciones auton¨®micas, previstas para el ¨²ltimo domingo de mayo de 2003.

Zaplana anunci¨® su intenci¨®n de mantener la presidencia regional del partido y avanz¨® que se presentar¨¢ al cargo de nuevo en el congreso regional previsto para finales de septiembre.

Juan Manuel Cabot, vicesecretario general, compareci¨® ante los periodistas para explicar los acuerdos de la junta directiva. Ni Olivas, ni Camps quisieron hacer comentarios.

Seg¨²n la versi¨®n ofrecida por Cabot, intervinieron ante la junta los tres presidentes de las diputaciones provinciales, Fernando Giner (Valencia), Julio de Espa?a (Alicante) y Carlos Fabra (Castell¨®n); la presidenta de la Federaci¨®n Valenciana de Municipios, Enma Iranzo; y la alcaldesa de Valencia, Rita Barber¨¢.

Todos ellos celebraron el nombramiento de Zaplana como ministro de Trabajo y Seguridad Social como un reconocimiento de la labor desarrollada por el PP en la Comunidad Valenciana desde su llegada al poder en julio de 1995 y subrayaron que tanto Olivas como Camps encarnan una apuesta continuista.

Pero lo cierto es que la decisi¨®n de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar de precipitar una remodelaci¨®n del Gobierno d¨ªas antes del debate sobre el Estado de la Naci¨®n sorprendi¨® a todos.

El ¨²nico movimiento en el seno del Consell previsto de momento es el ascenso de Olivas desde la vicepresidencia primera a la presidencia, pero los ajustes son inevitables a corto plazo.

La posibilidad de situar a Camps como vicepresidente primero fue descartada, seg¨²n fuentes coincidentes, debido a su reciente nombramiento como delegado del Gobierno.

Pero el cambio se hace inevitable. La delegaci¨®n del Gobierno no es la plataforma m¨¢s indicada para afrontar una campa?a electoral, puesto que la responsabilidad sobre ¨¢reas de seguridad ciudadana distorsiona cualquier discurso.

Todo indica que Camps se incorporar¨¢ al Consell el pr¨®ximo mes de septiembre en paralelo al congreso regional del PP que debe aclamarle como candidato a la presidencia de la Generalitat.

Olivas asumir¨¢ la presidencia con un plazo definido de antemano y cede todas sus responsabilidades org¨¢nicas. Pero su nombramiento tranquiliz¨® a buen n¨²mero de altos cargos y representantes institucionales que tem¨ªan un posible ascenso de Rita Barber¨¢. Varias fuentes sugirieron que Zaplana tuvo que hacer valer toda su fuerza ante la direcci¨®n nacional del PP para elevar a Olivas a la presidencia de la Generalitat en detrimento de la alcaldesa de Valencia.