Un conservador releva al cardenal Martini como arzobispo de Mil¨¢n

La di¨®cesis de Mil¨¢n, una de las m¨¢s grandes de Europa, ser¨¢ gobernada a partir de septiembre por el cardenal Dionigi Tettamanzi, que sustituir¨¢ al cardenal Carlo Maria Martini, que en febrero present¨® su renuncia al cumplir los 75 a?os. Martini, jesuita y una de las figuras m¨¢s sobresalientes y liberales de la Iglesia europea, ser¨¢ sustituido, parad¨®jicamente, por uno de sus grandes adversarios ideol¨®gicos.En el S¨ªnodo de Obispos europeos celebrado en el Vaticano hace tres a?os, Tettamanzi, de 68 a?os, declar¨® sin ambages que la posici¨®n del cardenal Martini, favorable a la convocatoria de un concilio para abordar cuestiones como la mayor colegialidad en la toma de decisiones y la incorporaci¨®n de las mujeres al sacerdocio, hab¨ªa tenido 'escaso eco'.

El nombramiento de Tettamanzi, actual arzobispo de G¨¦nova, era un secreto a voces en el Vaticano, pese a que comporta un desplazamiento de cargos, poco habitual en la Iglesia ya que rara vez se cambia de una di¨®cesis a otra a un obispo. Tettamanzi, considerado como un claro papable, representa la l¨ªnea tradicional de la curia, obediente al cien por cien al Papa y a su equipo de colaboradores.

El cardenal jesuita

El nuevo arzobispo de Mil¨¢n, ordenado sacerdote en 1957, no posee una biograf¨ªa particularmente brillante, aunque la noticia de su nombramiento, aparecida ayer en el bolet¨ªn de la Santa Sede, habla en t¨¦rminos desusadamente elogiosos de sus dotes magistrales. 'La ense?anza teol¨®gica y moral del cardenal Dionigi Tettamanzi llama la atenci¨®n por la limpieza y profundidad de su pensamiento, la simplicidad de la exposici¨®n, siempre incisiva, la fidelidad gozosa y convencida al Magisterio de la Iglesia', se?ala.

El cardenal Martini no hizo declaraciones respecto a la persona de su sustituto y ha anunciado ya su deseo de trasladarse a Jerusal¨¦n para continuar los estudios b¨ªblicos a los que ha dedicado buena parte de su vida. A¨²n as¨ª, el cardenal, del que se dice que ha llegado a comprar una tumba en el valle de Josafat, permanecer¨¢ en Tierra Santa s¨®lo durante algunos periodos, ya que piensa fijar su residencia estable en Ariccia, en una casa para ejercicios espirituales que posee la Compa?¨ªa de Jes¨²s en las afueras de Roma.