Un auto audaz

La hip¨®tesis desarrollada en su ¨²ltimo auto sobre Batasuna por el juez Garz¨®n es audaz, pero probablemente excesiva. Sostiene, llevando hasta el final la l¨®gica de resoluciones anteriores, que el entramado al que pertenece Batasuna y dirige ETA practica una forma de 'limpieza ¨¦tnica' destinada a alterar a su favor el censo a fin de asegurarse el triunfo para su opci¨®n en un eventual refer¨¦ndum. Garz¨®n se basa en hechos de los que hay constancia p¨²blica, pero, al intentar encajarlos en los preceptos legales, fuerza la realidad y comete errores. Ello no cuestiona lo esencial de su argumentaci¨®n, pero podr¨ªa tener efectos negativos sobre la eficacia de la instrucci¨®n.

Que existe persecuci¨®n por parte del entorno de ETA contra personas a causa de sus ideas pol¨ªticas es algo evidente; tambi¨¦n que la inmensa mayor¨ªa de los perseguidos tienen en com¨²n su condici¨®n de no nacionalistas, y que esa persecuci¨®n ha sido motivo del ¨¦xodo de muchos vascos. Existen fuertes indicios de que todo ello forma parte de un designio sobre la depuraci¨®n del censo. Tambi¨¦n aparece la idea de censo por adscripci¨®n voluntaria, del que la ulterior campa?a por el DNI vasco se consider¨® una derivaci¨®n.

Garz¨®n admite que ser¨¢ 'complejo' establecer los medios a trav¨¦s de los cuales ETA y Batasuna han 'propiciado la depuraci¨®n del censo', pero adelanta que la creaci¨®n de un 'clima de presi¨®n e intimidaci¨®n' forma parte de ese objetivo, y cataloga algunas de las formas de presi¨®n utilizadas para empujar a personas de diferentes colectivos (jueces, profesores, ertzainas, periodistas) a abandonar el Pa¨ªs Vasco o a fijar la residencia en localidades de las provincias lim¨ªtrofes. El instructor adelanta que en la causa se 'demostrar¨¢' que los m¨¦todos empleados son similares a los de la Mafia en Sicilia o a los de los nazis en Alemania.

Alguno de los indicios se?alados por el juez desenfoca el problema, como la referencia a la inscripci¨®n en el Registro Civil de Bilbao de muchos beb¨¦s nacidos en el hospital de Cruces-Barakaldo como si ello fuera fruto de un designio pol¨ªtico. Y es incoherente sostener que incluso sin ETA y sin kale borroka ser¨ªa delictiva Batasuna: el propio auto establece que es la presencia de ETA como ¨²ltima ratio lo que da credibilidad a las pr¨¢cticas coactivas de su entorno, y ello es fundamental en la identificaci¨®n que Garz¨®n viene estableciendo entre el brazo pol¨ªtico y el militar.

Los delitos difusos que configuran esa coacci¨®n se proyectan sobre un colectivo -los no nacionalistas- tambi¨¦n difuso, dif¨ªcilmente encajable en el concepto de 'limpieza ¨¦tnica' con el que Garz¨®n parece intentar encuadrar la persecuci¨®n ideol¨®gica en el delito de genocidio del art¨ªculo 607 del C¨®digo Penal o en los de lesa humanidad de la legislaci¨®n internacional.

Establecer las motivaciones, muchas veces complejas, por las que muchos ciudadanos han abandonado el Pa¨ªs Vasco no parece tarea propia de un sumario judicial. Los desplazamientos masivos de poblaci¨®n que ha conocido la historia y que justificar¨ªan hablar de genocidio o limpieza ¨¦tnica no son comparables al caso vasco. Esas expresiones pueden emplearse en el lenguaje pol¨ªtico para llamar la atenci¨®n de la opini¨®n internacional frente a la ignorante tolerancia de la que sigue benefici¨¢ndose ETA; pero, como concepto jur¨ªdico en el marco de un sumario que trata de establecer la relaci¨®n entre Batasuna y ETA, confunden m¨¢s que aclaran. Determinar en qu¨¦ porcentaje se ha reducido el PIB vasco por efecto de la violencia ser¨ªa interesante, pero tampoco tiene que ver con el objeto de la instrucci¨®n.

La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional acaba de avalar la l¨ªnea investigadora seguida por Garz¨®n, incluyendo las derivaciones en que se ha apoyado el Gobierno vasco para plantear una querella por prevaricaci¨®n. Y la Ley de Partidos recoge entre los motivos de ilegalizaci¨®n la 'exclusi¨®n o persecuci¨®n de personas por raz¨®n de su ideolog¨ªa', que encaja con los comportamientos ahora incluidos por Garz¨®n en su sumario. La demanda de ilegalizaci¨®n de Batasuna ser¨ªa ocasi¨®n de plantear si realiza actividades conducentes a este fin. El objetivo com¨²n de acabar con la impunidad perseguido por ambas v¨ªas parece alcanzable. Quiz¨¢s ser¨ªa conveniente una mayor sobriedad en lo que es razonable intentar probar por la v¨ªa penal para evitar pol¨¦micas y desenfoques que podr¨ªan perjudicar ese objetivo.