Garc¨ªa se pierde en la maleza
Els se impone al espa?ol, que perdi¨® sus posibilidades al mandar la bola a una zona boscosa
Gan¨® Ernie Els (Johannesburgo, 1969), el rubicundo surafricano que pisa los talones de los estadounidenses Tiger Woods y Phil Mickelson en la lista de los mejores profesionales del golf del mundo. La ruleta no se detuvo en el n¨²mero de Sergio Garc¨ªa y, esta vez, la fortuna del azaroso golf tuvo que plegarse a la fr¨ªa l¨®gica, a lo racional. Y lo l¨®gico, lo racional, era que el surafricano Ernie Els venciera el Match Play de Wentworth ante Garc¨ªa (10 hoyos ganados a 8 en 35), por la sencilla raz¨®n de que, hoy por hoy, el surafricano es un jugador de m¨¢s peso y m¨¢s s¨®lido que el espa?ol.
Este campeonato, instaurado en 1964, se disputa a dos vueltas al campo y vence quien se apunta m¨¢s hoyos. Este sistema favorece el triunfo de los favoritos y resta posibilidades a la sorpresa, puesto que el sistema de puntuaci¨®n permite jugar sin excesivos riesgos.
Sergio Garc¨ªa, esta vez con una peque?a perilla bajo la enorme gorra gris, lleg¨® a ir perdiendo por una diferencia de cinco hoyos cuando s¨®lo se hab¨ªan disputado los 14 primeros. Despu¨¦s, comenz¨® la tradicional remontada, que le aproxim¨® hasta rozar el empate a falta de cinco hoyos (ya super¨® en el ¨²ltimo tramo en semifinales a Michael Campbell y en cuartos al irland¨¦s Padraig Harrington). Pero en su precipitada subida a la superficie, cuando ya cercaba a Ernie Els, acab¨® regalando dos puntos consecutivos al mandar la bola a la poblada zona boscosa, m¨¢s all¨¢ de la calle.
En el momento de la verdad, a falta de cuatro hoyos para cumplir los 36, el histri¨®nico Garc¨ªa, todo muecas y gesticulaci¨®n de manos, se equivoc¨® de palo y envi¨® la bola a una tupida mara?a de ¨¢rboles, arbustos y enredaderas. Garc¨ªa, perdido, concedi¨® el hoyo a Els sin disputarlo. El surafricano acumulaba as¨ª una ventaja de dos puntos. El siguiente, el 35, era la ¨²ltima oportunidad de remontada para el castellonense. Pero lejos de cercar la ventaja de Els, Sergio volvi¨® a mandar la pelota a un lugar inaccesible. El Ni?o, a pesar de saber que estaba ya todo perdido, insisti¨® en buscar la bola y se despidi¨® del p¨²blico del condado de Exeter con un golpe magistral que, gracias a un retruque prodigioso, le dej¨® a un metro de la bandera. No sirvi¨® de nada, pero permiti¨® a Garc¨ªa esbozar otra vez su infantil sonrisa de j¨²bilo.
El espa?ol, con caballerosidad, entreg¨® el hoyo y el campeonato cuando Els necesitaba embocar en dos golpes un putt de unos cuatro metros. La cortes¨ªa no permiti¨® a Garc¨ªa dudar de que Els lo conseguir¨ªa sin problemas y entreg¨® el campeonato estrechando la mano de su rival. Durante todo el partido, Els mostr¨® la diferencia que atesora su segur¨ªsimo juego sobre el de Garc¨ªa. Tan s¨®lo los arranques de genialidad del castellonense y algunas lagunas del surafricano en el juego largo (en el recorrido vespertino apenas consigui¨® meter la bola en la calle desde el tee de salida), permitieron que Garc¨ªa llegase con posibilidades casi hasta el ¨²ltimo hoyo.
Garc¨ªa perdi¨® el campeonato, entre otras cosas, por dos nefastas salidas con el driver, su palo favorito, el que le ha permitido estar arriba en casi todos los partidos de la temporada a pesar de sus dificultades en los greens. El surafricano, que se embolsar¨¢ 398.000 euros por su victoria, se convierte en el segundo jugador que m¨¢s veces ha ganado, con cuatro, este campeonato. S¨®lo le superan su compatriota Gary Player, que inaugur¨® la n¨®mina de vencedores y Severiano Ballesteros, ambos con cinco t¨ªtulos. Els elimin¨® en cuartos a Montgomery y en semifinales al fiyano Singh. Garc¨ªa acumul¨® la mitad de la ganancia del vencedor por haber llegado a la final, 194.000 euros.
El campeonato lo disputaron 12 jugadores por invitaci¨®n de los patrocinadores del torneo. Ninguno de los golfistas de ¨¦lite estadounidense compiti¨®.
Ernie Els ya se impuso este a?o en el Open Brit¨¢nico en Muirfield al vencer en el desempate al franc¨¦s Levett y a los australianos Apleby y Elkington. El surafricano, metido en un peque?o bache las ¨²ltimas temporadas por lo que su psicoanalista defini¨® como 'tigeritis', ha recuperado la estela fulgurante que auguraba que ser¨ªa el mejor jugador del mundo. Hace ya doce a?os que Els venci¨® el Mundial juvenil junto a Retief Goosen. Entonces, todos los especialistas predijeron que Els ser¨ªa el dominador del circuito durante muchos a?os. S¨®lo la brutal irrupci¨®n del californiano Tiger Woods hab¨ªa frenado ese reinado que, poco a poco, Els va recuperando. Su terapeuta personal ya lo predijo: 'Ernie tiene que quitarse de la cabeza a Woods y volver¨¢ a ser el mejor'. En Wentworth, desde luego, fue el mejor.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.