Fotograf¨ªas con sentimiento

'Mi fotograf¨ªa se mueve dentro de la paradoja. Cuando trabajo en un pa¨ªs que no es el m¨ªo necesito cierto contacto con la gente, pero a la vez no puedo implicarme demasiado con ella', dice Harry Gruyaert (Amberes, B¨¦lgica, 1941) autor de las fotograf¨ªas que componen la exposici¨®n Marroc, que ma?ana se inaugura en el Palau de la Virreina. La exhibici¨®n, organizada por el Instituto de Cultura de Barcelona, el Instituto Europeo del Mediterr¨¢neo y la Fundaci¨®n Tres Culturas del Mediterr¨¢neo, podr¨¢ contemplarse en el Espai Miserachs de este centro art¨ªstico hasta el 12 de enero.

Gruyaert prefiere no implicarse demasiado con la gente para que sus fotograf¨ªas expresen el sentimiento que le provoca aquello que tiene frente a la c¨¢mara. Esta subjetividad le llev¨® en sus inicios, en 1986, como colaborador de Magnum a ser considerado dentro de la agencia un fot¨®grafo at¨ªpico. 'Nunca he hecho guerras ni he fotografiado manifestaciones, ni actos pol¨ªticos. Lo m¨ªo no pretende la objetividad period¨ªstica', explica. Sus trabajos suelen ser de larga duraci¨®n en pa¨ªses como India, Nepal, la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica o Ir¨¢n, entre otros. 'Yo vivo en Par¨ªs y para poder hacer un reportaje sobre esta ciudad tendr¨ªa primero que viajar al extranjero, regresar e instalarme en un hotel donde no tuviera contacto con mi mundo cotidiano', explica. Esta distancia de la realidad otorga un car¨¢cter de obra pict¨®rica a sus trabajos, un aspecto que a¨²n se destaca m¨¢s debido al tratamiento del color durante el revelado. 'Para m¨ª, es fundamental el control del color', explica el autor, que considera un hallazgo el tratamiento inform¨¢tico del color, aunque todas las fotograf¨ªas que presenta han sido reveladas qu¨ªmicamente. 'Me paso muchas horas en el laboratorio. Es la parte m¨¢s larga del proceso, le dedico mucho m¨¢s tiempo que al hecho concreto de tomar una fotograf¨ªa'.

Los trabajos que presenta en el Espai Miserachs son fotograf¨ªas realizadas en diferentes momentos. Algunas tienen 15 a?os. 'Creo en la necesidad que tienen las fotograf¨ªas de madurar por s¨ª mismas', dice Gruyaert. Su m¨¦todo de trabajo consiste en utilizar tiempo. 'Cuando viajo a cualquier lugar me paso desde el amanecer hasta que anochece caminando y observando c¨®mo ilumina la luz cada espacio'.