Detectadas graves irregularidades contables en las empresas p¨²blicas

El Tribunal de Cuentas hizo p¨²blico ayer un informe demoledor sobre las cuentas estatales del a?o 1999, hasta el punto de considerarlas poco representativas de la situaci¨®n real. El problema es 'muy relevante' en las empresas p¨²blicas, ya que la contabilidad es incompleta, no est¨¢ consolidada -en el caso de la SEPI- y la memoria que acompa?a esas cuentas incumple la legislaci¨®n. En cuanto al Estado, el informe detecta 3.006 millones de euros pendientes de contabilizar. El PP sostiene que se trata de una nueva contabilidad.

A diferencia de informes anteriores, el Tribunal de Cuentas considera que la representatividad de las cuentas p¨²blicas del a?o 1999 'est¨¢ limitada' por una serie de 'salvedades', reflejo de importantes deficiencias contables. Tambi¨¦n a diferencia de otros a?os, el informe agrupa todo el sector p¨²blico, que abarca la Administraci¨®n central, las empresas y las fundaciones adscritas.

El presidente del Tribunal de Cuentas, Ubaldo Nieto, compareci¨® ayer en el Congreso para explicar los resultados de este informe, donde los principales problemas son los siguientes:

- Empresas p¨²blicas. La contabilidad aportada por las empresas para la funci¨®n fiscalizadora del Tribunal de Cuentas es incompleta, ya que hay hasta 40 sociedades, sobre un total de 242, que no han entregado sus cuentas o lo han hecho con retraso. La contabilidad se limita en unos casos a aplicar el criterio de 'simple agregaci¨®n'; es decir, no se presenta balance consolidado en grupos como el de la Sociedad Estatatal de Participaciones Industriales (SEPI). Esta presentaci¨®n deficiente vulnera el art¨ªculo 42 y siguientes del C¨®digo de Comercio, seg¨²n el Tribunal de Cuentas. Tampoco las memorias aportadas se ajustan al contenido y estructura que exige el Plan General Contable. Todas estas deficiencias suponen 'una dificultad muy relevante' a la hora de valorar la realidad de la situaci¨®n financiera y patrimonial del sector p¨²blico empresarial, dice el informe.

La diputada socialista Maite Costa anunci¨® ayer que pedir¨¢ aclaraciones en el Congreso sobre dos operaciones concretas de la SEPI y que figuran en el informe. Se trata de la compra por parte de la SEPI de Astilleros Espa?oles (AESA) por 60 millones de euros por encima de su valor contable. Tambi¨¦n, sobre la venta de Astander por 1,8 millones de euros, despu¨¦s de haber 'inyectado' 24 millones de euros en la empresa 'para sanearla'. Costa dijo que el informe revela las 'trampas contables' del Gobierno, afirmaci¨®n que fue rechazada por el diputado del PP Juan Manuel Albendea. 'No hay desmanes ni irregularidades', afirm¨® Albendea. Las 'disfunciones' responden, seg¨²n ¨¦l, a que en 1999 se aplic¨® por primera vez un nuevo sistema de contabilidad.

- Gastos no contabilizados. El Tribunal de Cuentas detecta 3.006 millones de euros (500.173 millones de pesetas) de gastos pendientes de contabilizar a finales de 1999. Se trata de una cantidad similar a la del a?o anterior y responde a partidas como el seguro de cambio de autopistas, aportaciones a la Uni¨®n Europea (UE) en concepto de multas por exceso de producci¨®n l¨¢ctea, gastos de defensa por operaciones de ayuda humanitaria, apoyo a viviendas sociales, cr¨¦ditos a pa¨ªses como Marruecos, etc¨¦tera. El aplazamiento de gastos de un a?o a otro es relativamente habitual, pero el Gobierno del PP lo utiliz¨® cuando gan¨® las elecciones de 1996 para denunciar que hab¨ªa heredado del PSOE un agujero de 721.170 millones de pesetas de entonces.

- Exceso de modificaciones. Otra de las cr¨ªticas del Tribunal de Cuentas es que el Gobierno abusa de las modificaciones presupuestarias; es decir, de su discrecionalidad para aumentar los gastos sin respetar lo aprobado inicialmente por el Parlamento. En 1999, el informe resalta que esas modificaciones han supuesto aumentar un 12% las partidas iniciales en el caso del Estado.