Informaci¨®n voto a voto

Hace dos a?os, el mundo descubri¨® que el inquilino de la Casa Blanca depende de un pu?ado de votos mal contados. Aunque ahora se contempla con cierto humor aquel recuento de las papeletas mariposa de Florida, las televisiones de Estados Unidos no olvidar¨¢n nunca los patinazos de aquella noche electoral. Las grandes cadenas saben que ma?ana, cuando se cierren las urnas, no s¨®lo est¨¢ en juego el control pol¨ªtico del Capitolio sino tambi¨¦n su propia credibilidad. Por eso prometen un despliegue moderado y, sobre todo, cautela y rigor a la hora de anunciar vencedores y vencidos. En las ¨²ltimas elecciones presidenciales, las cadenas de EE UU dieron a Al Gore por ganador en cuanto tuvieron encuestas a pie de urna en colegios de Florida. Luego corrigieron en favor de George W. Bush, para reconocer horas despu¨¦s la triste realidad: no habr¨ªa nuevo presidente hasta que no acabara el recuento en ese Estado.

En los dos a?os posteriores, los ejecutivos de las cadenas de televisi¨®n han redactado normas internas que impedir¨¢n usar alegremente los datos de las encuestas. Tambi¨¦n han modificado la estructura y el funcionamiento del Servicio de Informaci¨®n de Votos (VNS), el consorcio sociol¨®gico encargado de hacer los sondeos financiado conjuntamente por las networks. Todas las cadenas van recibiendo los mismos datos simult¨¢neamente y cada una los completa con sus propias encuestas, lo que hace dos a?os condujo a errores imperdonables, aunque sumamente entretenidos.

'Si nos equivocamos en algo ser¨¢ en un exceso de precauci¨®n', avisa el jefe de informativos de la CBS, Al Ortiz. Su colega en la NBC, Bill Wheatley, coincide: 'Las elecciones de 2000 fueron un verdadero golpe a nuestra credibilidad. Seremos extremadamente precavidos en ¨¦stas'. Mark Halperin, de la ABC, cree que esa precauci¨®n ser¨¢ positiva porque les permitir¨¢ olvidarse de las angustiosas encuestas para hacer 'periodismo pol¨ªtico a la vieja usanza'.

De hecho, todas las cadenas asumen que posiblemente habr¨¢ que esperar hasta ¨²ltima hora del mi¨¦rcoles para saber qu¨¦ partido tendr¨¢ el control del Senado y la C¨¢mara de Representantes en los pr¨®ximos dos a?os. Alg¨²n Estado, como Minnesota, ya ha anunciado que el recuento de los casi tres millones de votos se har¨¢ a mano. Peor a¨²n: las leyes electorales de Luisiana pueden obligar a una nueva ronda en diciembre si la victoria de ma?ana no es suficientemente holgada. Si el Senado depende de ese esca?o para determinar su mayor¨ªa, el suspense quedar¨ªa mantenido hasta mediados de diciembre.

Hasta ahora, las cadenas de televisi¨®n presum¨ªan cuando eran las primeras en anunciar el ganador; ahora esperan no haberse equivocado. Y, por descontado, nadie dar¨¢ el resultado de Florida hasta que no lleve estampado alg¨²n sello oficial.

CNN +, en directo

Por su parte, CNN + (CSD) ha preparado una amplia cobertura de las legislativas en Estados Unidos, que arranca el martes con conexiones continuas y un reportaje elaborado por los servicios informativos del canal donde se explican los cambios introducidos en el sistema electoral desde las presidenciales de 2000.