Los empresarios tildan de 'electoralistas' las previsiones de crecimiento del Gobierno

El secretario general de la patronal alavesa, Jos¨¦ Manuel Farto, cree que las previsiones de crecimiento presentadas por el Gobierno vasco para este a?o y para el pr¨®ximo son 'una opci¨®n pol¨ªtica que conviene ante el panorama electoral'. SEA Empresarios de ?lava tach¨® de manipulaci¨®n rebajar la cifra de crecimiento este a?o al 1,8%, tal y como ha establecido el Ejecutivo, para asegurar que en 2003 habr¨¢ una mejora y pronosticar un crecimiento de la econom¨ªa del 2,2%. As¨ª, cree imposible que este a?o se crezca menos que el pr¨®ximo si se analizan seriamente los mercados.

'Lo probable es que 2003 se cierre con un crecimiento m¨¢s bajo que el de este a?o. Estamos en una fase descendente del ciclo', asegur¨® Farto para defender su tesis, despu¨¦s de presentar ayer en Vitoria el Informe de Coyuntura Econ¨®mica de oto?o de SEA. A la patronal alavesa le gustar¨ªa poder hacer otro pron¨®stico, pero desde 'un punto de visto t¨¦cnico no es posible hacer una previsi¨®n mejor sin que la econom¨ªa se recupere'. Preguntado sobre si la actual situaci¨®n econ¨®mica responde a la situaci¨®n pol¨ªtica, Farto dijo que no, que las 'fuerzas econ¨®micas que influyen en esta coyuntura son internacionales'.

El director adjunto de SEA, Aitor Otaola, mostr¨® los n¨²meros que marcan el actual 'estancamiento sin s¨ªntomas de recuperaci¨®n'. Las exportaciones, cayeron un 5,5% durante el primer semestre de 2002, 'un descenso de 325 millones de euros en seis meses'. Las importaciones han ca¨ªdo un 3,1%, lo que significa una disminuci¨®n de 154,6 millones de euros. Pese a que en el conjunto del a?o el paro se redujo en 16.000 personas, a lo largo de los tres ¨²ltimos meses el desempleo ha subido en 7.300 personas, un dato que marca la tendencia negativa.

En este coyuntura, desde SEA se advirti¨® ayer a las empresas del riesgo de 'no mantener inversiones estrat¨¦gicas' en un momento de 'estancamiento'. As¨ª, Farto dijo que es esencial que no se produzcan grandes ajustes de plantillas ya que en el momento de la recuperaci¨®n, en 2004 o 2005, habr¨¢ una escasez de mano de obra. Tambi¨¦n pidi¨® a las empresas que inviertan en formaci¨®n. Ambos aspectos los lig¨® a la 'competitividad' en el futuro.

A las administraciones p¨²blicas les sugiri¨® que tengan 'un comportamiento racional' de contenci¨®n de gasto, con el fin de dedicar recursos a las 'inversi¨®n real' y dar as¨ª un relevo en este momento a las empresas en el impulso de la econom¨ªa.

Arzalluz no es 'referente'

Farto, quien asegur¨® que las patronales mantienen una relaci¨®n fluida con el Gobierno, descart¨® cualquier riesgo de divisi¨®n en el seno de la patronal vasca. Asegur¨® que la situaci¨®n de unidad quedar¨¢ demostrada en breve. En todo caso, respecto a las cr¨ªticas realizadas al plan soberanista del lehendakari, Juan Jos¨¦ Ibarretxe, por parte de Confebask, afirm¨® que se refer¨ªan contenido del proyecto y no a la persona ni a otros proyectos o planes futuros.

El secretario general de SEA quit¨® tambi¨¦n trascendencia a las palabras del presidente del PNV, Xabier Arzalluz, en las que aseguraba que exist¨ªan presiones pol¨ªticas sobre los empresarios alaveses para irse de Confebak y unirse al empresariado navarro. En este sentido, dijo que Arzalluz 'no es un referente de ning¨²n tipo' en el mundo empresarial, 'como se ha demostrado'. Consider¨® que sus manifestaciones son las de alguien que no conoce c¨®mo funciona la econom¨ªa y precis¨® que la cosa hubiera sido distinta si las palabras procedieran del consejero de Industria, Josu Jon Imaz, que nunca se ha pronunciado en este sentido.

Los empresarios alaveses est¨¢n tambi¨¦n preocupados por 'la burbuja' del mercado de la vivienda. Farto cree que los efectos burbujas no solo se producen en los mercados de valores y se?al¨® que existe el temor de que se produzca un pinchazo en este sector que pille a muchos ciudadanos con una deuda superior al valor de la vivienda que est¨¢n pagando. Reclam¨® por ello una pol¨ªtica de precios razonables y que las administraciones frenen la especulaci¨®n.