M¨¦xico y Estados Unidos intentan limar asperezas en sus relaciones
El secretario de Estado, Colin Powell, llega hoy a la capital mexicana

M¨¦xico y EE UU comienzan hoy dos d¨ªas de conversaciones sobre emigraci¨®n, agua, comercio, aranceles, narcotr¨¢fico y pol¨ªtica exterior, y tambi¨¦n sobre el chusco patriotismo de gente como el editor de un peri¨®dico de Arizona, que anunci¨® una "milicia de ciudadanos" contra la invasi¨®n de inmigrantes. Algunos rancheros ya los persiguen a lazo. M¨¦xico pide protecci¨®n, un acuerdo migratorio y m¨¢s visados.
Estados Unidos, por su parte, pide el pago de un viejo adeudo en agua del r¨ªo Bravo, y reforzar la vigilancia de una divisoria com¨²n de 3.200 kil¨®metros, cruzada anualmente por 1,5 millones de mexicanos indocumentados.
Los secretarios de Estado, Colin Powell, que encabeza la delegaci¨®n norteamericana, y de Justicia, Interior, Educaci¨®n, Vivienda, Transporte y Trabajo, tratar¨¢n de acercar posiciones sobre aranceles agr¨ªcolas, contratos de trabajo, asistencia consular, y desarrollar varios marcos legales; abordar¨¢n, asimismo, las asperezas surgidas a partir del rechazo mexicano a un ataque unilateral a Irak y del tibio p¨¦same de algunos sectores de su administraci¨®n con motivo del 11-S. El canciller mexicano, Jorge Casta?eda, intentar¨¢ retomar la agenda migratoria, condenada al olvido desde entonces. Pero las prioridades impuestas por la seguridad nacional en EE UU y la campa?a hacia las presidenciales de 2004 pueden acabar enterr¨¢ndola.
La ampliaci¨®n del cupo de temporeros es el objetivo m¨¢s factible, al ser imposible, a corto plazo, la pretendida regularizaci¨®n de los casi cuatro millones de indocumentados mexicanos en Estados Unidos. La Casa Blanca descarta grandes avances en el tema migratorio, porque, seg¨²n justifican sus portavoces, el Congreso, controlado por los republicanos, es definitivamente contrario a las concesiones. "No tiene mucho sentido exagerar lo que podemos lograr", anticip¨® un funcionario. "Es m¨¢s una negociaci¨®n entre el Gobierno (de Bush) y el Congreso (de EE UU) que entre M¨¦xico y Estados Unidos".
Pese a todo, los temas a tratar son muchos. M¨¦xico exporta a EE UU m¨¢s del 85% de sus mercanc¨ªas, recibe del norte el grueso de sus turistas y m¨¢s de 8.000 millones de d¨®lares anuales en las remesas familiares enviadas por los 20 millones de compatriotas con ciudadan¨ªa norteamericana o tratando de obtenerla. La multiplicidad de intereses, coincidencias y divergencias en diversos campos hace que la relaci¨®n sea estrat¨¦gica para las dos naciones. La delegaci¨®n norteamericana pedir¨¢ un calendario de pago escalonado de la deuda derivada del incumplimiento del Tratado de Aguas de 1944, que obliga a Estados Unidos a entregar a M¨¦xico anualmente 1. 850 millones de metros c¨²bicos del r¨ªo Colorado, y a M¨¦xico a corresponder con 432 millones de metros c¨²bicos del r¨ªo Bravo.
Sequ¨ªa
El pasado 2 de octubre el departamento de Estado acus¨® a M¨¦xico de una morosidad de 10 a?os. La sequ¨ªa que afecta al norte desde hace un decenio, seg¨²n fuentes mexicanas, explica el incumplimiento. M¨¦xico y EE UU evaluar¨¢n, adem¨¢s, los efectos de la eliminaci¨®n de los aranceles mexicanos, en torno al 2% actualmente, en enero de 2003, a las importaciones de productos agr¨ªcolas estadounidenses. Esa eliminaci¨®n qued¨® establecida en el Tratado de Libre Comercio de Am¨¦rica del Norte (TLC entre EE UU, Canad¨¢ y M¨¦xico), en vigor desde enero de 1994.
El campo mexicano, del que dependen 25 millones de personas (la cuarta parte de la poblaci¨®n), pide amparo ante la previsible irrupci¨®n de mercanc¨ªas, subsidiadas, con precios imposibles de igualar. M¨¦xico argumentar¨¢ que los subsidios agr¨ªcolas norteamericanos llevan a la competencia desleal, y Washington responder¨¢, seg¨²n fuentes oficiales, que la discusi¨®n sobre los subsidios debe ser abordada en la Organizaci¨®n Mundial de Comercio (OMC). El Gobierno de Fox anunci¨® recientemente cerca de 3.000 millones de d¨®lares en subsidios agr¨ªcolas para garantizar la competitividad del ma¨ªz, trigo, sorgo, cardamomo, semillas de colza, algod¨®n, arroz y soya.
"No son suficientes, pero me parece que es una buena propuesta", reaccion¨® Alfonso S¨¢nchez Anaya, gobernador del sure?o Estado de Tlaxcala y miembro del izquierdista Partido de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica (PRD). Los 3.000 millones proceden de un fondo r¨¦cord de 10.000 millones de d¨®lares, en recursos directos e indirectos, destinados al depauperado campo mexicano para el a?o que viene. Las tarifas arancelarias, pactadas en el TLC han ido bajando gradualmente, pero los 51.700 millones en subsidios aprobados por Estados Unidos, a principios de a?o, da?a la equidad de los intercambios, seg¨²n los analistas.
La reuni¨®n entre los dos pa¨ªses concluir¨¢, previsiblemente, con acuerdos menores: una carta de intenci¨®n que compromete 25 millones de d¨®lares para acelerar el transporte de personas y mercanc¨ªas en la frontera, y otras de entendimiento en las ¨¢reas de vivienda, cooperaci¨®n en incendios forestales, trabajo infantil y calidad del aire en la frontera.

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.