Una carrera contra la ceguera
Un fil¨®sofo logra ser el primer invidente profesor titular de universidad
Perdi¨® la vista por culpa de una meningitis a los nueve a?os y 35 a?os despu¨¦s ha conseguido ser el primer ciego espa?ol profesor titular de universidad, seg¨²n la ONCE. Imparte Filosof¨ªa, en la especialidad de Metaf¨ªsica, en la Complutense de Madrid.
Ismael Mart¨ªnez Li¨¦bana, (Fuentes de Ropel, Zamora, 1958) fue siempre un alumno brillante. Antes y despu¨¦s de la ceguera. Acab¨® la carrera en 1982 con el Primer Premio Nacional de Terminaci¨®n de los Estudios de Filosof¨ªa al obtener el mejor expediente: practicamente, todas las asignaturas con matr¨ªcula de honor.
Cuando se licenci¨®, el Ministerio de Educaci¨®n le concedi¨® una beca de investigaci¨®n en el departamento de Metaf¨ªsica. Y en 1989 ley¨® su tesis sobre algo que no le resulta ajeno, Tacto y constituci¨®n del mundo, seg¨²n lo que dice el fil¨®sofo Etienne Bonnot de Condillac (1715-1780): el tacto es el sentido que m¨¢s propicia el conocimiento de lo externo. "Incluso m¨¢s que la vista. Y eso, me llam¨® la atenci¨®n", dice.
Acab¨® la carrera con el mejor expediente de todos los alumnos espa?oles de Filosof¨ªa de ese a?o
Despu¨¦s, como ayudante o de profesor asociado, se qued¨® vinculado a la Universidad durante estos a?os. En este tiempo su reto ha sido conseguir una plaza de titular en la especialidad de Metaf¨ªsica. As¨ª, esper¨® a que se convocasen las oposiciones, se present¨® junto a diez personas m¨¢s y, finalmente, fu¨¦ ¨¦l el que consigui¨® la plaza el pasado octubre. "No ha sido una sorpresa pero tampoco lo hubiera sido que no me la hubiesen dado".
Llegar hasta aqu¨ª no ha sido f¨¢cil. "La peor etapa de mi vida fue cuando ingres¨¦ con 11 a?os en el centro de la ONCE que hay en Pontevedra despu¨¦s de dos a?os visitando m¨¦dicos de toda Espa?a para ver si se pod¨ªa curar mi ceguera. En el centro me encontr¨¦ sin mi familia, con ni?os con las mismas limitaciones que yo pero distintos a mis amigos del pueblo con los que me hab¨ªa subido a los ¨¢rboles y jugado al bal¨®n". Cuando volvi¨® aquellas primeras Navidades a casa ya se sent¨ªa identificado con una realidad diferente: "Era otro ni?o".
En en el centro de la ONCE tuvo que empezar a estudiar de cero: en braille y con instrumentos apropiados para acceder a la informaci¨®n. El primer a?o hizo tres cursos en uno. El segundo, un s¨®lo curso, pero otra vez en el tercer a?o consigui¨® hacer dos cursos de bachillerato seguidos. Pas¨® el tiempo y s¨®lo dos alumnos de los veintitantos de su promoci¨®n se matricularon en la Universidad. Dud¨® entre estudiar Historia, como hizo su hermano mayor, o Filosof¨ªa. Finalmente, es decant¨® por esto ¨²ltimo. "Me parec¨ªa un saber m¨¢s riguroso, que aspira a encontrar la ra¨ªz ¨²ltima de las cosas. Y pens¨¦: 'esto es lo m¨ªo".Ahora, mirando atr¨¢s, dice que le debe todo a su voluntad y la ayuda que le prest¨® la ONCE. Y por supuesto, a su padre. "Sin ¨¦l no hubiese alcanzado nada. Desde el primer momento asumi¨® una responsabilidad exagerada. Siempre estaba pendiente de m¨ª, incluso me le¨ªa libros de l¨®gica matem¨¢tica repleto de f¨®rmulas que ¨¦l no entend¨ªa nada". Con 88 a?os, todav¨ªa sigue asumiendo esa responsabilidad.
Reconoce que como profesor tiene fama entre los estudiantes de explicar bien. "Las personas ciegas solemos ser muy did¨¢cticas, porque la palabra es nuestro principal instrumento de comunicaci¨®n". Tambi¨¦n asegura que tiene genio y que a veces se enfada cuando sus alumnos no saben algo.
Por el edificio de la Facultad de Filosof¨ªa se maneja con bast¨®n y acompa?ado de un colaborador de su departamento. En clase le pide a alg¨²n estudiante que escriba por ¨¦l en la pizarra. Y a la hora de corregir los ex¨¢menes, la mayor¨ªa de sus alumnos le lee el suyo propio en voz alta.
Mart¨ªnez Li¨¦bana vive s¨®lo y va al trabajo en metro. Todav¨ªa recuerda los colores, su pueblo y lo "guap¨ªsima" que era la cantante Marisol. Le hubiese gustado aprender a bailar el rock and roll en su juventud. Ahora tiene claro cu¨¢l es su pr¨®xima meta: llegar a ser alg¨²n d¨ªa catedr¨¢tico.
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