Los ind¨ªgenas de Ecuador se preparan para gobernar

El movimiento ind¨ªgena de Ecuador se prepara para entrar por primera vez en el Gobierno, "510 a?os despu¨¦s de la conquista de Am¨¦rica". "Son los nuevos tiempos del nuevo milenio", dice Nina Pacari, 42 a?os, diputada de Pachakutik, ¨²nica mujer ind¨ªgena en el Parlamento. "Los ind¨ªgenas hemos demostrado que estamos en igualdad de condiciones para debatir y proponer. Hemos roto el estereotipo de que s¨®lo podemos hablar de ind¨ªgenas, y hemos dado la lecci¨®n de que estamos preparados para otros muchos temas". Esta semana, el presidente electo, Lucio Guti¨¦rrez, empieza a discutir con los distintos sectores que le han aupado al poder la composici¨®n del pr¨®ximo Gabinete.

En Ecuador hay doce nacionalidades ind¨ªgenas, cada una con su propio idioma. La m¨¢s numerosa es la quichua, que re¨²ne 11 pueblos distintos. Representan el 45% de la poblaci¨®n ecuatoriana, seg¨²n las organizaciones, aunque el Gobierno asegura que no son m¨¢s del 25%. La Confederaci¨®n de Nacionalidades Ind¨ªgenas de Ecuador (CONAIE) y su brazo pol¨ªtico, el movimiento Pachakutik, son la base de apoyo m¨¢s organizada con que cont¨® el coronel Guti¨¦rrez durante la campa?a electoral. Las otras dos son el Partido Sociedad Patri¨®tica 21 de Enero, constituido por militares y diversas fuerzas sociales, y el Movimiento Popular Democr¨¢tico (MPD), que agrupa a los sectores m¨¢s radicales de la izquierda ecuatoriana. Contentar a todos los que le respaldaron sin inquietar a la comunidad financiera es el desaf¨ªo que tiene por delante el presidente electo.

"El Ej¨¦rcito respaldar¨¢ la Constituci¨®n, y al presidente, en la medida que la respete"

Ama Quiya, Ama Yuya, Ama Chuya (en quichua, "no ser ocioso, no ser mentiroso y no ser ladr¨®n") son los principios milenarios de los pueblos ind¨ªgenas para el ejercicio del buen gobierno. Bajo esta premisa, Pachakutik gobierna en 27 municipios de 17 provincias de la Amazonia y la sierra, y en cinco prefecturas, lo que significa una poblaci¨®n aproximada de un mill¨®n de habitantes. Asimismo, ha logrado 11 diputados en las ¨²ltimas elecciones, que, junto a los seis de Sociedad Patri¨®tica, coloca a la alianza gubernamental como segunda fuerza en el nuevo Congreso.

Los ind¨ªgenas est¨¢n convencidos de su potencial humano, organizativo e intelectual, probado en la lucha reivindicativa por el acceso a la educaci¨®n y a la tierra desde la d¨¦cada de los setenta, y en la elaboraci¨®n de una propuesta de car¨¢cter nacional en los a?os noventa. "Confiamos en que nuestra participaci¨®n no ser¨¢ relegada a un segundo plano", dice Auki Titua?a, el primer alcalde ind¨ªgena de Ecuador, que administra con ¨¦xito el municipio de Cotacachi, de 37.000 habitantes, desde 1996. Titua?a, de 37 a?os, es catedr¨¢tico de Econom¨ªa y fue la punta de lanza del programa de la CONAIE.

"Sabemos que el grupo que ha concentrado el poder econ¨®mico y pol¨ªtico no va a renunciar f¨¢cilmente a su situaci¨®n. Intentar¨¢ excluirnos o marginarnos, intentar¨¢n cercar a Lucio Guti¨¦rrez. Ya ha ocurrido durante la campa?a, pero hemos reaccionado firmemente", se?ala Nina Pacari. Los ind¨ªgenas no est¨¢n dispuestos a jugar el papel de comparsas en el futuro Gobierno. " Para nosotros esta etapa de cuatro a?os ser¨¢ un gobierno en transici¨®n que permitir¨¢ generar condiciones para que en el pr¨®ximo periodo podamos presentar un candidato presidencial propio".

Pacari y Auki Titua?a son dos de los nombres que suenan con m¨¢s insistencia como candidatos ind¨ªgenas a integrar el nuevo Ejecutivo. La primera es doctora en Derecho por la Universidad Central de Quito, especializada en temas agrarios, integra el comit¨¦ ejecutivo de Pachakutik y ha sido vicepresidenta del Congreso, donde ha librado duras batallas. "Batirse en un marco general de 123 legisladores, siendo mujer e india, requiere mucho esfuerzo".

Su nombre se ha mencionado para el Ministerio de Exteriores, y Nina Pacari admite que ser¨ªa "un desaf¨ªo enorme". "Nunca ha habido una pol¨ªtica exterior que sea intercultural, que desarrolle la econom¨ªa pluricultural". La diputada ind¨ªgena se?ala que en el d¨ªa a d¨ªa, el 80% de la poblaci¨®n ecuatoriana hace econom¨ªa, y el 64% del mercado interno, abastecido por productos agr¨ªcolas, est¨¢ cubierto por los pueblos ind¨ªgenas. "Hay posibilidades de hacer muchas cosas con una pol¨ªtica exterior que sea pluri¨¦tnica. Creo que hay que pensar en el potencial de los pueblos ind¨ªgenas no s¨®lo en beneficio propio, sino en beneficio de todo el pa¨ªs".

No han sentado nada bien en el movimiento ind¨ªgena las primeras declaraciones del presidente Guti¨¦rrez en las que dijo que el ¨¢rea econ¨®mica del nuevo Gobierno estar¨ªa reservada a empresarios y banqueros "honestos", y el ¨¢rea social, a los movimientos sociales. "No compartimos el criterio tradicional de que la econom¨ªa va por un lado y lo social por otro. Nuestra intenci¨®n es que se den la mano", replica Nina Pacari. "Queremos que no s¨®lo pongan los pelos de punta los malos indicadores econ¨®micos, sino tambi¨¦n los malos indicadores sociales. Los pueblos ind¨ªgenas no s¨®lo somos sector social, somos sector econ¨®mico".

Para los aliados de Guti¨¦rrez, el proceso que comenzar¨¢ el 15 de enero, d¨ªa de la investidura presidencial, no concluir¨¢ en los pr¨®ximos cuatro a?os. "Es un proceso a largo plazo. Pachakutik significa cambio, transformaci¨®n y nuevos tiempos", dice Pacari. Los ind¨ªgenas no temen quemarse por formar parte de un Gobierno que no presidir¨¢n. "Asumimos alcald¨ªas, fuimos al Parlamento y nos dec¨ªan que nos ¨ªbamos a quemar. Hemos asumido el reto de cruzar el r¨ªo".

Los ind¨ªgenas tendr¨¢n que guardar una de sus mejores armas, la movilizaci¨®n, que, seg¨²n sus intenciones, tiene que ser sustituida por la participaci¨®n ciudadana. "Una poblaci¨®n informada no seguir¨¢ exigiendo a ciegas. La ciudadan¨ªa tiene que adentrarse en temas como el endeudamiento p¨²blico, para mejorar los t¨¦rminos de negociaci¨®n, o el canje de la deuda o la reestructuraci¨®n".

Cuesta entender la alianza de militares e ind¨ªgenas, que naci¨® con la revuelta de enero del 2000, que acab¨® con el derrocamiento del presidente Jamil Mahuad. Para la dirigente de Pachakutik, "lo importante es que los militares tengan la oportunidad de conocer y desenvolverse en la sociedad civil, valorarla y no imponer el punto de vista castrense, que a veces es demasiado cerrado".

La explicaci¨®n de la confluencia entre lo ind¨ªgena, lo social y lo militar tiene que ver con el car¨¢cter espec¨ªfico del Ej¨¦rcito ecuatoriano, seg¨²n el coronel retirado Edie S¨¢nchez, director de la campa?a electoral de Lucio Guti¨¦rrez, que tambi¨¦n intervino en la rebeli¨®n que derroc¨® a Mahuad. Este militar de 42 a?os, con muchas posibilidades de ser ministro, recuerda que en los a?os setenta naci¨® un sector progresista en las Fuerzas Armadas, "fruto de una estrategia dise?ada por EE UU para contener el comunismo. Buscaba un mayor contacto del Ej¨¦rcito con la poblaci¨®n, para evitar la penetraci¨®n de movimientos subversivos".

Parad¨®jicamente, parte de aquella estrategia de contenci¨®n del comunismo en los a?os cincuenta y sesenta, sirvi¨® para que el Ej¨¦rcito desarrollara esa conciencia social.Seg¨²n el coronel S¨¢nchez, la clave est¨¢ en la educaci¨®n y formaci¨®n de los militares. "Si los colegios militares y las escuelas navales se abren y establecen pol¨ªticas que permitan el acceso de j¨®venes de los estratos populares, tendremos a la larga un Ej¨¦rcito m¨¢s progresista y m¨¢s vinculado con la poblaci¨®n". S¨¢nchez dice que el Ej¨¦rcito apoya al nuevo presidente, que ha salido de sus filas. "Hay una afinidad, simpat¨ªa y hay alegr¨ªa en la tropa, en la oficialidad joven y media. No s¨¦ si hay alegr¨ªa en los generales". Y afirma con rotundidad: "El Ej¨¦rcito respaldar¨¢ la Constituci¨®n, y al presidente, en la medida que la respete".

Junto a ind¨ªgenas y militares, la tercera base de apoyo de la candidatura de Guti¨¦rrez ha sido el Movimiento Popular Democr¨¢tico (MPD), el partido que agrupa a los sectores m¨¢s radicales de la izquierda ecuatoriana. Su discurso es el m¨¢s intransigente, lo que le sit¨²a como el aliado m¨¢s inc¨®modo del presidente electo.