Desencuentro entre solidarios

Las desavenencias en la c¨²pula de Alicante Acoge amenaza la continuidad del proyecto

La dimisi¨®n del director t¨¦cnico de la organizaci¨®n humanitaria Alicante Acoge, Carlos G¨®mez, ha abierto una grave crisis en el seno de la asociaci¨®n m¨¢s relevante en la atenci¨®n y asistencia a la poblaci¨®n inmigrante en la ciudad. El desencuentro personal entre los miembros de la fundaci¨®n y los propios trabajadores desde hace a?os ha acabado por afectar al organigrama y funcionamiento de esta entidad, implantada en la capital desde hace once a?os. A pesar de la crisis, la fundaci¨®n, a trav¨¦s de un comunicado, garantiz¨® la continuidad del trabajo con los extranjeros, aunque abre una "reflexi¨®n interna" para planificar la nueva etapa.

Instituciones p¨²blicas y otros colectivos solidarios se han interesado por el conflicto interno que sufre la ONG, conscientes de que su desaparici¨®n dejar¨ªa al borde del abismo a los miles de inmigrantes a los que anualmente apoya. La estad¨ªstica no deja dudas sobre la importancia de su funci¨®n. S¨®lo el pasado a?o, la entidad humanitaria asesor¨® y atendi¨® a 16.000 personas. Alicante Acoge es hoy una de las entidades de la Red Acoge m¨¢s importante de Espa?a, despu¨¦s de Sevilla y Ceuta, por el volumen de inmigrantes a los que atiende.

La organizaci¨®n humanitaria alicantina naci¨® en 1991 a propuesta del Secretariado Diocesano de Migraciones, dependiente del obispado. El actual presidente, Miguel Rom¨¢, y el vicepresidente, Nicandro P¨¦rez, por entonces grandes amigos, decidieron poner en marcha un proyecto que asumiera el vac¨ªo institucional en la tutela de la poblaci¨®n inmigrante en la ciudad, en constante crecimiento. En 1997, los fundadores, que comenzaban a tener diferentes puntos de vista, optaron por modificar la estructura jur¨ªdica de la organizaci¨®n, pasando de asociaci¨®n a fundaci¨®n. La diferencia radica en los ¨®rganos de funcionamiento de la entidad, los miembros no son socios sino patronos. Adem¨¢s, las fundaciones no pueden variar los fines para las que fueron creadas sin el consentimiento del protectorado, ¨®rgano dependiente de la Generalitat Valenciana.

Fue precisamente ese mismo a?o, cuando Carlos G¨®mez, soci¨®logo y profesor asociado de la Universidad de Alicante, fue llamado para tomar las riendas de la organizaci¨®n y rescatarla del "descr¨¦dito, la corrupci¨®n, la ineficacia y la dejadez", seg¨²n el propio G¨®mez, hasta ahora director t¨¦cnico. La entidad continu¨® presidida por Miguel Rom¨¢, y Nicandro P¨¦rez ocupaba la vicepresidencia. El patronato pas¨® a estar integrado por nueve personas a t¨ªtulo particular, a excepci¨®n de dos representantes de C¨¢ritas y del Secretariado Diocesano de Migraciones. Entre la mayor¨ªa de los patronos exist¨ªan fuertes lazos de amistad, seg¨²n fuentes consultadas.

Las cifras acreditan la creciente implantaci¨®n de la ONG en el ¨¢mbito de la inmigraci¨®n. De los 27 millones de pesetas que sumaba el presupuesto de 1997 se ha pasado a los 65 millones de pesetas actuales. La plantilla de trabajadores est¨¢ integrada por 14 personas y apoyada por cerca de 40 voluntarios.

Pero desde hace a?os, las relaciones personales entre los patronos comenzaron a deteriorarse, una situaci¨®n que se reflejaba en el funcionamiento de la organizaci¨®n. Las luchas "de poder" han supuesto la marcha del director t¨¦cnico Carlos G¨®mez, m¨¢ximo responsable de funcionamiento de la entidad, y la dimisi¨®n en cascada del presidente y vicepresidente, si bien ¨¦stos ¨²ltimos reconsideraron su postura y contin¨²an al frente de la entidad.

Per¨ªodo de reflexi¨®n

Los diferentes testimonios recabados apuntan ¨²nicamente a fricciones personales, sobre todo entre el presidente y el vicepresidente, como la causa exclusiva de la crisis, que ha reventado con la marcha del m¨¢ximo responsable de su funcionamiento. Las desavenencias personales, seg¨²n G¨®mez, se han trasladado tambi¨¦n a los trabajadores. "La profunda divisi¨®n que vive el patronato de la fundaci¨®n hace imposible mantener un trabajo que necesita del m¨¢ximo apoyo dentro de la asociaci¨®n", se?ala G¨®mez.

El desencuentro entre los primitivos patronos de Alicante Acoge ha sido la espoleta de una crisis que, en principio, s¨®lo afecta al organigrama de la entidad aunque sus consecuencias podr¨ªan ser imprevisibles. Sin embargo, y de acuerdo a un escueto comunicado del patronato de la fundaci¨®n, Alicante Acoge garantiza su labor "prestando como ahora un servicio cualificado a la poblaci¨®n inmigrante". La nota tambi¨¦n revela un debate sobre el futuro del proyecto solidario: "El patronato abre un periodo de reflexi¨®n para iniciar una nueva etapa, mientras tanto va a seguir adelante haciendo frente a todas su obligaciones", dice textualmente el escrito.