Orlando Villas-B?as, defensor de los ind¨ªgenas

Orlando Villas-B?as, ¨²ltimo superviviente de los tres hermanos que exploraron la Amazonia en los a?os cuarenta y dedicaron su vida a la defensa de los derechos de los ind¨ªgenas brasile?os, falleci¨® el pasado jueves, tras una larga enfermedad, a la edad de 88 a?os.

Villas naci¨® el 12 de enero de 1914, en Santa Cruz do R¨ªo Pardo, al noroeste de S?o Paulo, en la plantaci¨®n de caf¨¦ de su padre, y era conocido como el amigo de los indios, por su empe?o en la creaci¨®n del Parque Nacional de Xingu, una reserva de 12.000 hect¨¢reas, que se convirti¨® en sin¨®nimo de los esfuerzos de Brasil para proteger a la poblaci¨®n ind¨ªgena.

En 1943, al cumplir los 29 a?os, Orlando se enrol¨® con sus hermanos Claudio y Leonardo en la expedici¨®n Roncador-Xingu, organizada por el Gobierno brasile?o. La expedici¨®n se prolong¨® durante 17 a?os en los que se estableci¨® contacto con m¨¢s de cien tribus de la Amazonia, se localizaron seis r¨ªos hasta entonces desconocidos y se descubrieron 18 ciudades indias. Por orden expresa del presidente Getulio Vargas se construyeron varias pistas de aterrizaje para poder controlar el vasto territorio conocido como El Sertao.

Al principio fueron rechazados por los organizadores de la expedici¨®n debido a su escasa fortaleza f¨ªsica, pero ellos les acompa?aron hasta hacerse indispensables. "En aquellos tiempos, la idea de que los indios eran como animales era bastante com¨²n", declaraba Orlando Villas-B?as en una entrevista desde su casa de S?o Paulo el a?o pasado. "Pero nosotros demostramos a la sociedad brasile?a que hab¨ªamos establecido contacto con comunidades que viv¨ªan felices y en paz". En 1960, al finalizar la expedici¨®n, los tres hermanos presionaron al Gobierno y lograron que les permitiera crear una reserva donde los ind¨ªgenas pudieran vivir y defender sus tradiciones frente a la invasi¨®n del Brasil moderno. Construyeron un peque?o aeropuerto y un ambulatorio de atenci¨®n m¨¦dica para los indios.

Los hermanos Villas-B?as establecieron una serie de normas de obligado cumplimiento en la reserva: vivir apartados del resto de los brasile?os y de los turistas; no imponer la l¨®gica del hombre blanco; no inmiscuirse en los asuntos del poblado y, m¨¢s recientemente, mantener los conocimientos m¨¦dicos de los curanderos fuera del alcance de los llamados piratas de la biotecnolog¨ªa, que pretend¨ªan vender las recetas a las compa?¨ªas farmac¨¦uticas.

Tras la muerte de Leonardo, los dos hermanos supervivientes fueron nominados en dos ocasiones -en 1971 y en 1975- para el Premio Nobel de la Paz. Claudio falleci¨® en 1988 y dos a?os despu¨¦s, Orlando se retir¨® a escribir sus memorias, que se sumaron a la serie de libros que los tres hermanos hab¨ªan ido publicando sobre las tradiciones de los indios.

El a?o pasado, Orlando Villas-B?as perdi¨® frente al escritor Paulo Coelho el ingreso en la Academia de las Artes y las Letras de Brasil. A lo largo de su vida en la Amazonia estuvo enfermo de malaria en 287 ocasiones y hace unos a?os tuvo un infarto, pero su salud no se resinti¨® hasta que sufri¨® una ca¨ªda en su casa el a?o 2000. El pasado 14 de noviembre fue ingresado por una infecci¨®n gastrointestinal en el hospital Albert Einstein de S?o Paulo, donde ha fallecido a causa de un fallo multiorg¨¢nico.