El fin de la aventura de 'CQC'
El simb¨®lico programa de Tele 5 desaparece tras siete a?os de cr¨ªtica sat¨ªrica al poder pol¨ªtico
Globo Media, la productora que preside Emilio Arag¨®n, descubri¨® en la televisi¨®n argentina un informativo sat¨ªrico y especialmente demoledor hacia la clase pol¨ªtica. Jos¨¦ Mar¨ªa Irisarri, socio consejero del Grupo ?rbol y de Globo Media, lo vio claro desde el principio. Era el a?o 1995 y se encontraba en Buenos Aires en uno de esos viajes para captar ideas de otras televisiones. Mientras zapeaba con el mando a distancia se top¨® con unos pintorescos hombres vestidos de negro que incordiaban micr¨®fono en mano a pol¨ªticos, escritores, actores o deportistas. "Me enganch¨® el programa", recuerda.
Al d¨ªa siguiente entr¨® en contacto con Cuatro Cabezas, la productora de CQC, y con los creadores del informativo, Mario Pergolini y Diego Gebbel. "Tuve una reuni¨®n con ellos y les dije que estaba dispuesto a comprar el formato. No lo cre¨ªan, porque ese concepto no exist¨ªa en Argentina". Ambas partes redactaron un contrato y el directivo de Globo Media aterriz¨® en Espa?a con un nuevo formato bajo el brazo que, en su opini¨®n, es "una aut¨¦ntica bomba".
El espaldarazo definitivo corri¨® a cargo del entonces responsable de contenidos de Tele 5, Mikel Lejarza. "Enseguida se dio cuenta de que era diferente, novedoso e innovador. Y apost¨® por ¨¦l", cuenta Irisarri. De aquel formato se hizo cargo Montse Fern¨¢ndez Villa, que por entonces dirig¨ªa el programa de cr¨®nica social ?Qu¨¦ me dices!
Caiga quien caiga ech¨® a rodar el 10 de mayo de 1996, poco despu¨¦s de las elecciones generales. Hasta el pr¨®ximo domingo. La cadena privada elimina uno de los pocos espacios de cr¨ªtica pol¨ªtica y humor inteligente de la televisi¨®n espa?ola. En los ¨²ltimos siete a?os ha sido la ense?a de Tele 5.
"El arranque fue una pesadilla", afirma Fern¨¢ndez Villa, directora durante los tres primeros a?os de vida de CQC. "Ten¨ªamos much¨ªsimo miedo. Hacer gestiones para acreditar a alguien era una tortura porque al principio inspiramos desconfianza. Algunos programas hab¨ªan comenzado a frivolizar las noticias del coraz¨®n, pero intentarlo con la pol¨ªtica era m¨¢s dif¨ªcil".
Tampoco fue sencilla la selecci¨®n de los presentadores. Al margen de El Gran Wyoming, por el casting pasaron m¨¢s de sesenta aspirantes a reporteros. Se buscaba gente que, seg¨²n Fern¨¢ndez Villa, se complementara: "Uno, serio, mayor, solvente, con cultura y credibilidad (Juanjo de la Iglesia); otro, joven para atraer al p¨²blico m¨¢s menudo (Javi Mart¨ªn); dos perif¨¦ricos (el andaluz Pablo Carbonell y el gallego Sergio Pazos); un periodista al uso (Mario Caballero), y un personaje inclasificable (Tonino)". M¨¢s tarde se incorpor¨® Arturo Valls.
En estos siete a?os, el programa ha luchado contra la actitud hosca de una parte de la clase pol¨ªtica. Desde hace meses, los dirigentes vinculados al partido en el Gobierno vienen haciendo gala de una huidiza actitud ante los osados reporteros. Paralelamente, los l¨ªderes de la oposici¨®n les han prestado un incondicional apoyo.
En este ambiente, la guinda la ha puesto, indirectamente, Ana Botella y la nueva secci¨®n -inaugurada hace dos semanas- en la que CQC recupera del archivo de la cadena privada los comentarios que la esposa del presidente del Gobierno realiz¨® a mediados de los noventa -con el PP en la oposici¨®n- en las noticias de Tele 5. Pero la cadena privada se ha esforzado en desvincular el nacimiento de esta secci¨®n y la supresi¨®n definitiva de CQC. Alegan sus directivos que el cierre obedece a "criterios de rentabilidad" y niegan cualquier tipo de "censura pol¨ªtica".
Durante su larga trayectoria, el deslenguado espacio ha tenido una audiencia fiel. Irisarri reconoce que la buena prensa que siempre tuvo el programa ayud¨® a mantenerlo vivo. Tambi¨¦n contribuy¨® el golpe de efecto que supuso, en el especial de Nochevieja de 1996, que el Rey aceptase las famosas gafas negras. Ese momento signific¨® "la consagraci¨®n de CQC", en opini¨®n de Irisarri. Ahora est¨¢ convencido de que su fin no obedece a razones pol¨ªticas, sino a motivos empresariales. "Con su desaparici¨®n se pierde no s¨®lo un programa, sino una marca, la m¨¢s consolidada, prestigiosa y de calidad de la televisi¨®n". Pero admite que desde hace dos a?os viv¨ªan "un aut¨¦ntico calvario a la hora de la renovaci¨®n del contrato, porque ya amenazaban motivos econ¨®micos". La novedad es que "este a?o no hemos superado la rev¨¢lida".
Con el tiempo, CQC ha recibido m¨¢s de 40 premios. regal¨® un Kamasutra a Clinton, una rama de olivo a Arafat, una orqu¨ªdea al Dalai Lama, un oscar de pl¨¢stico a Woody Allen y una rana al pr¨ªncipe Felipe. En la lista de personajes que han lucido las emblem¨¢ticas gafas negras figuran Fidel Castro, Michael Jordan, Lech Walesa, Al Pacino, Muammar el Gaddafi, Camilo Jos¨¦ Cela, Bill Gates, Madonna, Lou Reed, Keith Richards, Rigoberta Mench¨² y Kofi Annan.
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