Kafka, ante el petr¨®leo

"Admito todos mis errores, aunque todav¨ªa no s¨¦ cu¨¢les han sido", dice alguien que ocupa cargo de responsabilidad: como un personaje de Kafka en El proceso, o en El castillo. Aznar se acost¨® con todos los honores de su cargo y se despert¨® convertido en insecto: metamorfoseado, como Gregorio Samsa. Un ort¨®ptero que apenas ha podido sobrevolar la mancha gallega. No supo Samsa por qu¨¦ le persegu¨ªan con zapatillas. Ahora sabemos que Kafka era jud¨ªo, que se sent¨ªa cucaracha cuando iba a la escuela alemana de Praga porque le despreciaban los arios; y ¨¦l muri¨® antes que sus compa?eros, que ir¨ªan a los campos de exterminio a?os despu¨¦s. Entonces, la maldad era de los otros, los asesinos. Aznar podr¨ªa saber cu¨¢les son sus delitos reales: le bastar¨ªa con leer a Ram¨ªrez, a Zarzalejos: a los suyos. Umbral le ayuda transido sin duda de compasi¨®n de hombre bueno, pero no es tiempo de umbrales: estamos al otro lado de la puerta. El vuelo de insecto torpe es otro error: pero los humanos llegamos a situaciones en las que todo lo que se haga est¨¢ mal. Es la imagen ag¨®nica del personaje que tropieza en el primer escal¨®n de la larga escalera que ha de bajar y va trastabillando, agarr¨¢ndose el aire con brazos que se descoyuntan y al suelo con piernas que se arquean y estiran: al final se rompen la cara. Aznar y sus kafkianos tropezaron en el primer escal¨®n y nunca m¨¢s consiguieron el equilibrio. Aznar culp¨® a Gibraltar, porque no era bueno que aludiera a Satan¨¢s, al naviero, al ¨²ltimo pa¨ªs que toc¨® el barco y al primero que se hizo la "foto demag¨®gica"; mand¨® a su Primer Ciudadano mientras hablaba tambi¨¦n contra las fotos demag¨®gicas. Como Fraga, como ?lvarez Monocascos, y Rajoy (pobre, qu¨¦ sucesi¨®n se ha perdido, no sabe por qu¨¦) o Rato; y el propio Fraga, que trastabilla por la escalinata de las palabras incomprensibles.

Mal asunto. "Perd¨®nales, Se?or; no saben lo que hacen", dijo su se?or refiri¨¦ndose a los que le mataban con crueldad y vileza. En este caso, el que no sabe lo que hace es el Se?or sin anillos, y sus personajes que ya no son m¨¢s que de pel¨ªculas de dibujos. Mientras en mar y tierra se desarrolla la tragedia que, cabeza bajo el ala, no pudieron ver.