Un yacimiento ¨²nico en el mundo

Desde el primer momento, los paleoantrop¨®logos se dieron cuenta de que Excalibur era un hito de esta excavaci¨®n de Atapuerca. "Hay cuatro momentos estelares de la Sima de los Huesos: 1990, cuando encontramos el primer f¨®sil humano grande in situ, un f¨¦mur; 1992, cuando sacamos los primeros cr¨¢neos; 1994, cuando sali¨® la pelvis que llamamos Elvis; y 1998, con Excalibur", explica Ignacio Mart¨ªnez. "Pero con este bifaz... est¨¢bamos tan alucinados... era incluso m¨¢s inesperado que los cr¨¢neos".

Para que los miembros del equipo de la Sima se sorprendan con un hallazgo la cosa tiene que ser realmente excepcional, por el volumen y la calidad del tesoro que cada temporada extraen del suelo de la cueva. Ese mismo a?o, 1998, en el mes de excavaci¨®n (s¨®lo uno al a?o dado que el resto del tiempo los cient¨ªficos se dedican a analizar las piezas y a prepararlas para su conservaci¨®n), salieron de esa arcilla h¨²meda 377 f¨®siles humanos y 319 de oso, comprueba Ana Gracia en el archivo del proyecto. "Entre los 377 humanos hab¨ªa fragmentos de cr¨¢neo, 76 fragmentos de v¨¦rtebras y muchas falanges".

En total Arsuaga y su equipo han recuperado hasta ahora 4.000 huesos humanos en una excavaci¨®n a la que saben que dedicar¨¢n toda su vida como investigadores, dada la riqueza explorada.

La sima es una cueva con forma de calcet¨ªn, en cuya planta, de unos 14 metros cuadrados, est¨¢n mezclados con arcilla y restos de oso los f¨®siles de aquellos hombres de hace 400.000 a?os. Este tesoro no tiene parang¨®n en el mundo, no hay ning¨²n otro yacimiento con tal abundancia y variedad de huesos de antiguos hombres, representando todas las piezas del cuerpo, ambos sexos y todas las edades, aunque predominan los adolescentes.