Dios los cr¨ªa
Las noticias que cito a continuaci¨®n son del 15 de enero. En Santiago de Chile, el hombre de paja Jos¨¦ Luis Olivas, presidente provisional de la Comunidad Valenciana, se reuni¨® con Ricardo Lagos, actual jefe del Estado del pa¨ªs andino, y luego confes¨® a la prensa que Chile cumple todas las condiciones para ser la plataforma de los empresarios valencianos hacia otros pa¨ªses de la zona.
Entretanto, en la misma ciudad, la Corte Suprema de Chile quit¨® el fuero parlamentario a cinco diputados de todo el abanico gobernante -dos democristianos, uno del Partido por la Democracia, un socialista y un radical-, para poder juzgarlos por cohecho y soborno.
Con unas horas de diferencia y en este lado del charco, el presidente de la patronal textil valenciana, Manuel Taberner, declar¨® que algunas empresas del sector est¨¢n dispuestas a montar centros propios de producci¨®n en pa¨ªses asi¨¢ticos. Esta medida -la denominada externalizaci¨®n- busca contrarrestar la desigual concurrencia entre los bajos costos de producci¨®n en aquella parte del planeta y los muy elevados de aqu¨ª.
Por ¨²ltimo, en la orilla atl¨¢ntica del continente sudamericano, el peri¨®dico intern¨¦tico uruguayo Brecha dio a conocer un demoledor an¨¢lisis del soci¨®logo Tom¨¢s Moulian sobre la situaci¨®n pol¨ªtica chilena a partir del pinochetismo, en el que tras recordar que fueron los militares quienes impusieron la transici¨®n y el nuevo texto constitucional, se?ala que las instituciones b¨¢sicas creadas a sangre y fuego todav¨ªa perduran, y ello a pesar del retorno de los socialistas, que han sacrificado cualquier medida de progreso en aras de la gobernabilidad y en contubernio econ¨®mico con la derecha.
Estas noticias, en apariencia dispares, tienen un denominador com¨²n, la globalizaci¨®n neoliberal. En efecto, puesto que el mundo es ahora un inmenso mercado que sigue los preceptos del capitalismo ortodoxo, no cambia nada si en un pa¨ªs gobierna un socialista, en otro un generalote y en el de m¨¢s all¨¢ un cacique, ya que todos ellos dirigen sus feudos como lo har¨ªa un hombre de negocios, con un ojo en los beneficios y el otro en los recortes del presupuesto.
Los empresarios valencianos deseosos de invertir en ultramar cumplen id¨¦ntica funci¨®n que los conquistadores del siglo XVI: el expolio legal, ayer consistente en robar sin tapujos y hoy en ganar m¨¢s dinero con pocos gastos, todo ello al amparo de pol¨ªticos tradicionales como Olivas y Lagos. Por su parte, los diputados corruptos de Chile, que presuntamente utilizaron el poder para sobornar, son los hijos naturales de un r¨¦gimen que cambi¨® s¨®lo en apariencia. ?Y qu¨¦ decir del patr¨®n textil Taberner? Se estar¨¢ frotando las manos al pensar en lo barato que sale un obrero de raza amarilla.
Antes de hacer una cr¨ªtica responsable de cualquier acto lo mejor es determinar su naturaleza: la externalizaci¨®n, t¨¦rmino que suena bastante as¨¦ptico en los labios medi¨¢ticos de falsos profetas, es una indignidad que se aprovecha del hambre para pagar jornales miserables a poblaciones tan desesperadas que aceptan trabajar de sol a sol por un plato de arroz. De manera que ya sabe el lector de qu¨¦ pie cojean algunos pol¨ªticos y empresarios, que son las dos caras de una misma moneda. Dios los cr¨ªa y ellos se juntan.
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