A tiros por Londres

Si a uno le matan a la mujer y le secuestran al hijo es probable que el prop¨®sito de enmienda para abandonar el mundo del crimen quede en entredicho. Mas cuando el secuestrador, un ex compa?ero de los de "Dios me guarde de mis amigos que de mis enemigos ya me cuido yo", amenaza con matar al cr¨ªo si no se hacen una serie de trabajitos para ¨¦l. De esta forma, Mark Hammond, el protagonista de The Getaway que controlar¨¢ el jugador, vuelve a las andadas por su Londres natal obligado a dejar un rastro de sangre y cad¨¢veres en contra de su voluntad.

Los jugadores est¨¢n asistiendo a la floraci¨®n de un nuevo g¨¦nero cuya explotaci¨®n empieza a ser exhaustiva. Es este tipo de juegos que inaugur¨® Grand Theft Auto 3, en el que el protagonista dispone de libertad casi total para realizar las misiones. En The Getaway la ciudad es Londres, que se ha representado fielmente dentro de las posibilidades de la Play Station 2. El Big Ben, el nov¨ªsimo London Eye, las majestuosa torre de Londres, el cl¨¢sico London Bridge, todos est¨¢n ah¨ª. En este nuevo estilo de juego, la acci¨®n no salta de un lugar a otro autom¨¢ticamente, sino que el jugador debe desplazarse hasta su objetivo, ya sea a pie o robando uno de los m¨¢s de 80 modelos de coches. Conducir por Londres tiene sus peculiaridades. Adem¨¢s de circular por la izquierda, la ciudad es especialmente bulliciosa, y as¨ª est¨¢ representado en The Getaway. Este y otros detalles dotan de realismo al juego, donde los peatones reaccionan con pavor al ver un arma.

La forma en que Hammond es capaz de afrontar una situaci¨®n de peligro permite sentirse como el actor principal de una pel¨ªcula. Mediante una tecla, el personaje se pega a la pared y se puede deslizar hasta el marco de la puerta sin exponer su cuerpo a las balas enemigas. La misma tecla le permite parapetarse.

The Getaway goza de una excelente traducci¨®n al castellano y un mejor doblaje, que le convierte en referente para que en el futuro dejen de aparecer t¨ªtulos s¨®lo en ingl¨¦s o con voces mediocres. Son di¨¢logos ¨¢giles e inteligentes que ayudan a entrar en la trama. Si lo ¨²nico que se desea es conocer Londres como conductor de los cl¨¢sicos taxis negros, existe esta relajada opci¨®n que puede llegar a ser incluso ¨²til en caso de viajar a la capital inglesa.