La guerra 'llega' a la Asamblea

Fue tarde de guerra. Tarde terrible la de ayer. Fernando Mar¨ªn, de IU, pregunt¨® al presidente del Gobierno regional, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, su opini¨®n sobre la probable guerra contra Irak. Lat¨ªa el horror en la voz del diputado. Suave, con tono ahogado casi, iba desgranando las razones de su rechazo. Y preguntaba: "?Usted cree que un pueblo desolado, hambriento, bombardeado hasta la aniquilaci¨®n, supone un peligro para el mundo?". Y recordaba que el asesino y dictador Sadam Husein hab¨ªa atacado al Ir¨¢n de Jomeini con ayuda de la CIA; con ayuda de la CIA y de EE UU acab¨® con los comunistas; con el silencio de Estados Unidos gase¨® a los kurdos. Y habl¨® de su hijo de 16 a?os para decir que hasta un ni?o puede presentar, a trav¨¦s de Internet, las mismas pruebas que Colin Powell, secretario de Estado norteamericano, hab¨ªa ense?ado a la ONU.

Fue una tarde terrible. Porque ni siquiera Ruiz-Gallard¨®n intent¨® justificar la guerra. Si bien dijo que ese hombre era un tirano, un asesino que hab¨ªa gaseado a ni?os. "?Es a ese hombre al que usted defiende? Por su hijo y por los m¨ªos hemos de pararle", vino a decir el presidente, que se apoy¨® en unas declaraciones de Javier Solana, responsable de Pol¨ªtica Exterior de la UE, que hab¨ªa calificado de "irrefutables e innegables" las pruebas presentadas por EE UU. Minutos despu¨¦s, Solana, en un despacho de agencia, lo negaba. Alguien dijo: "La t¨¦cnica de Occidente, y con ella su cultura harto din¨¢mica, yo dir¨ªa -mejor- cin¨¦tica, est¨¢ obrando horrores fuera y dentro de su casa. Se est¨¢ ensayando con el m¨¢s vil asesinato de un pueblo que registran los siglos, la reducci¨®n al absurdo y al suicidio, m¨¢s o menos totalitario, de la cultura occidental". Fue don Antonio Machado. Hace casi 60 a?os. Hablaba de otra guerra, si es que hay guerras diferentes.

Ni una broma

Llevaban muchos diputados, prendida en el pecho, la pegatina de "No a la guerra". Y ni siquiera, en otros temas, se permiti¨® nadie ni una broma. Aire funeral. S¨®lo alg¨²n atisbo de iron¨ªa, cuando, por ejemplo, Franco Gonz¨¢lez, de IU, al preguntar a la consejera de Justicia, dijo: "Palabrita del Ni?o Jes¨²s que soy de izquierdas, as¨ª que no me mande el cuestionario". Se refer¨ªa el diputado a la encuesta que entre los trabajadores de Justicia est¨¢ haciendo la consejer¨ªa y en la que se les pregunta por su ideolog¨ªa. Y el socialista Eduardo Tamayo insisti¨® tambi¨¦n en lo del sondeo, hasta que el presidente le cort¨®. "Ha terminado su tiempo".

Y s¨®lo con iron¨ªa replic¨® Ruiz-Gallard¨®n al portavoz socialista, Pedro Sabando, que le preguntaba c¨®mo la candidata del PP a presidir la Comunidad, Esperanza Aguirre, promet¨ªa los hospitales que el Gobierno regional hab¨ªa negado a la izquierda. El presidente se sali¨® por la tangente y m¨¢s all¨¢ cuando, sin contestarle, le dijo: "Yo cre¨ª que el candidato socialista era Rafael Simancas. ?Es que se f¨ªa usted tan poco de ¨¦l que tiene que venir a preguntar aqu¨ª lo que ¨¦l debe hacer fuera? D¨¦jele que hable ¨¦l, hombre". Pero no le contest¨®.