Estrategia antisindical

Intolerable. No se puede calificar de otro modo la actitud del gerente del Hospital Donostia, Eduardo Maiz, durante las jornadas de huelga de enfermer¨ªa de los d¨ªas 4 y 5 de febrero, pretendiendo desprestigiar al colectivo. Ha dedicado su tiempo a intentar boicotear y vulnerar los derechos de los trabajadores, haciendo lo imposible para que no se realizase la huelga, empezando por imponer, en algunos casos, servicios m¨ªnimos de hasta el 100%. Pero lo peor ha sido el trato dado a los pacientes, con quienes se ha jugado para perjudicar a los huelguistas. Consider¨® las intervenciones "programadas" como "urgentes y no demorables" para no tener que suspenderlas, a pesar de que en el parte de quir¨®fano no estaban contempladas. Pero lo m¨¢s grave que sucedi¨® es que, con los partes de quir¨®fano en mano desde hace d¨ªas, se llam¨® a los enfermos que no constaban en ellos para operar, y horas m¨¢s tarde se les mand¨® a casa sin ninguna clase de explicaci¨®n. Entre ellos, seis ni?os obligados a estar en ayunas, pasando hambre y nervios, para avisarles a mediod¨ªa de la imposibilidad de su intervenci¨®n. Y pas¨® lo mismo con personas que iban a ser operados de cataratas. Por el contrario, nueve de las 51 intervenciones programadas como "urgentes y no demorables" no se realizaron por inexplicables motivos personales de los m¨¦dicos.

Se demuestra as¨ª que la ¨²nica pretensi¨®n de Osakidetza es enfrentar al usuario con la enfermer¨ªa en lucha por un complemento espec¨ªfico justo. Esperamos que no ocurra los mismo en las pr¨®ximas jornadas de huelga, los d¨ªas 18 y 19, en el Hospital del Alto Deba de Mondrag¨®n.