Cacer¨ªa doble
Estudio de L. Kubbel. 1940.
A partir de la posici¨®n inicial no es sorprendente que las blancas puedan ganar de manera forzosa; el rey negro se encuentra rodeado de fuerzas enemigas y su compa?era se halla fuera de juego. Sin embargo, es necesario encontrar una serie de exactos movimientos para lograr el ¨¦xito, y esa serie s¨®lo puede encontrarse si se descubren dos sutil¨ªsimas claves, que constituyen el m¨¦rito y el atractivo de este formidable estudio. La primera jugada es 1 Ch2, que amenaza 2 Cg4 mate, por lo cual la respuesta es forzada: 1... Re3. Despu¨¦s de 2 Cg4 j. el rey negro dispone de dos casillas: e4 y f4. Esta ¨²ltima posibilidad lleva a una definici¨®n r¨¢pida y espectacular: 3 Cf6 j.!, Rf5 -o 3... Rf4 / 4 C - d5 j.; o 3... Re3 / 4 C - d5 j.- / 4 Cd7! amenazando la dama y 5 Dg4 mate. De modo que la jugada es 2... Rf4, a lo que sigue 3 Df1 j.! Ahora 3... Re4 es forzada, ya que si 3... Rg5 / 4 Df6 j. y mate; sigue 4 Cf6 j. y la posibilidad del doble en d5 obliga a jugar 4... Rd4. La persecuci¨®n contin¨²a con 5 Dd1 j., Rc4 (cualquier otra retirada pierde la dama) / 6 D - d5 j.! y se alcanza aqu¨ª el momento culminante del estudio. Las negras est¨¢n perdidas, s¨®lo que es muy dif¨ªcil encontrar los dos detalles que abren el sendero de la victoria. Si 6... Rb4 las blancas ganan con 7 Da2!!, que amenaza mate en d5; como adem¨¢s hay un doble, las negras pierden la dama. La otra posibilidad es 6... Rc3, y en ese caso gana 7 Da8!! Ahora la amenaza en d5 no es mate, y puede jugarse, por ejemplo, 7... Rb2. Pero con 8 Cd5 la que recibe jaque mate es la dama. La doble cacer¨ªa ha resultado exitosa.
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