Las ni?as y la bomba

Sale la bomba gigante, elegante; la llaman "la madre de todas las bombas", y puede producir tanto da?o como la de Hiroshima. Alterna la imagen: un colegio de ni?as, en Irak: la belleza mesopot¨¢mica de ojos enormes. La maestra les ense?a a tumbarse y abrir la boca para aguantar la onda expansiva. La bomba es de aire. Especial para que la onda lo destruya todo. Cambio de emisora: veo la bomba madre en el mar donde se prueba: no calculo, en esa inmensidad, qu¨¦ superficie cubre. Quieren verla trabajar en vivo, o en el tr¨¢nsito de lo vivo a lo muerto que facilita. La segunda va a caer all¨ª. Contraplano: unos refugios dom¨¦sticos que manda hacer el Gobierno de Sadam: excavan en la tierra agujeros cubiertos de ramas, tierra, chapas. Sonrientes con sus palas pat¨¦ticas: van a morir.

Representan a Sadam, y Bush dice que es un peligro para la Humanidad, con may¨²sculas. Lo dice Aznar. Aznar no pudo derrotar al terrorismo vasco, ni Felipe ni Franco: no han sabido, no han podido. Pero Aznar invent¨® "el entorno del terrorismo": cierra peri¨®dicos, proh¨ªbe partidos, cerca un gobierno aut¨®nomo, manda decir insultos: ampliando el entorno del terrorismo, llega a Sadam. Cree que matando iraqu¨ªes se acabaron los etarras. Una persona que pudiera salirse de este ciclo sem¨¢ntico asesino pensar¨ªa que est¨¢ loco y pierde el tiempo en esta pelea con Sadam: no lo est¨¢. La Virgen de F¨¢tima predijo la ca¨ªda del comunismo sovi¨¦tico, como Serrano Su?er, y se cumpli¨®. Pienso que las pastorcillas hab¨ªan tomado hongos alucin¨®genos que las histerizaron; y el cura de aldea, y las vecindonas.

No cre¨ª nunca que el Papa, y sus sucesores, estuvieran locos: sab¨ªan lo que hac¨ªan al predecir el final del comunismo. Y uno de ellos, polaco, lo trabaj¨® mejor. No veo a Aznar como loco: es un pol¨ªtico de la vena de Bush y sus protestantes. No son formas de locura: ni la del islamismo de los que corren en torno a una piedra en La Meca. Loco estar¨ªa yo si creyera seriamente la palabra de Aznar. Sobre todo en Espa?a, donde la religi¨®n no existe mas que en forma de negocio y de p¨¢nico.

Veo las ni?as de ojos mesopot¨¢micos, que van a vivir no s¨¦ cu¨¢ntos d¨ªas, porque Bush no ha decidido el plazo. Siempre estuve de parte de David hasta que comprend¨ª que no hab¨ªa existido. Pero si aplico la met¨¢fora b¨¢rbara, s¨¦ que ahora la honda es de Goliat. La t¨¦cnica est¨¢ de parte del gigante.