El consumo de coca¨ªna puede alterar las neuronas del placer y conducir a la depresi¨®n
El uso habitual de la droga reduce los niveles de dopamina y causa cambios en el cerebro
Un estudio patrocinado por el Instituto Nacional sobre Abuso de Drogas (NIAD) de EE UU ha puesto de relieve que el consumo habitual y prolongado de coca¨ªna puede causar cambios en el cerebro que implican que la persona tenga una menor capacidad de sentir placer. Esta alteraci¨®n podr¨ªa contribuir, en parte, a las elevadas tasas de depresi¨®n observadas entre las personas adictas a la coca¨ªna.
Por investigaciones previas se sab¨ªa ya que la coca¨ªna incrementa los niveles de dopamina en el cerebro y causa el subid¨®n que experimentan los consumidores de esta droga. El uso prolongado, sin embargo, puede reducir los niveles de dopamina y hacer que los cocain¨®manos tengan m¨¢s dificultades para experimentar sentimientos positivos y placenteros que la poblaci¨®n no consumidora.
El 7% de los j¨®venes espa?oles de entre 15 y 29 a?os consumi¨® coca¨ªna durante 2001
El estudio mencionado, publicado en el American Journal of Psychiatry, se basa en el an¨¢lisis comparado de las muestras de cerebro, obtenidas en autopsias, de 35 cocain¨®manos y otras 35 personas no consumidoras de esta droga. La investigaci¨®n incluy¨® el rastreo de drogas en sus respectivas muestras de suero y orina. Los investigadores, dirigidos por Karley Little, de la Universidad de Michigan, encontraron menores concentraciones de dopamina y de la prote¨ªna VMAT2 (implicada en el transporte de esta droga en la sangre) entre los consumidores de coca¨ªna que entre los no consumidores. Adem¨¢s, el estudio revel¨® que los cocain¨®manos que sufr¨ªan depresi¨®n ten¨ªan menores niveles de VMAT2 que los que no estaban deprimidos.
Lo que no aclara el estudio del equipo de Karley Little es si las c¨¦lulas cerebrales productoras de dopamina hab¨ªan quedado destruidas por el consumo de esta droga o simplemente se hab¨ªan desregulado, por lo que se ignora si estos cambios cerebrales ser¨ªan permanentes o podr¨ªan ser reversibles.
El consumo de coca¨ªna se ha incrementado en Espa?a en los ¨²ltimos a?os, seg¨²n datos del Plan Nacional sobre Drogas. As¨ª, mientras que en 1995 el 0,4% de la poblaci¨®n espa?ola reconoc¨ªa haber consumido coca¨ªna en el ¨²ltimo mes (un dato que se equipara con el del consumidor habitual), en 2001 este porcentaje se elevaba hasta el 1,4%. Este porcentaje representa que en Espa?a hay unos 384.000 consumidores habituales, 274.000 m¨¢s de los que hab¨ªa seis a?os antes.
El aumento se atribuye principalmente a los j¨®venes, y sobre todo a los varones. Seg¨²n datos del Plan Nacional sobre Drogas, el 7% de los j¨®venes de entre 15 y 29 a?os consumi¨® coca¨ªna en 2001, mientras que en el conjunto de la poblaci¨®n este porcentaje es del 2,6%. El grupo de edad m¨¢s consumidor es de 20 a 24 a?os, y el grupo de entre 15 y 19 a?os es el principal consumidor de ¨¦xtasis.
En 1995, las personas que recibieron en Espa?a tratamiento por dependencia de coca¨ªna fueron 2.031; en 2000 el n¨²mero se hab¨ªa cuadruplicado, con un total de 8.274 cocain¨®manos tratados en los servicios sanitarios. Seg¨²n datos del Plan Nacional sobre Drogas, desde que un adicto comienza el consumo de coca¨ªna hasta que accede a un tratamiento deshabituador pasan unos siete a?os.
En el a?o 2000, la coca¨ªna caus¨® en Espa?a el 40,5% de las urgencias motivadas por el consumo de drogas.
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