Cabo Verde y Almod¨®var
Como ya viene siendo habitual de un tiempo a esta parte, Pedro Almod¨®var tambi¨¦n goza de gran ascendente en materia mel¨®mana. El m¨¢s reciente compositor en beneficiarse del m¨¢gico influjo del realizador manchego es un caboverdiano, Bau, al que hasta ahora no se conoc¨ªa demasiado en los circuitos internacionales. Rufino Almeida, que tal es su nombre de pila (lo de Bau es un apodo que en portugu¨¦s significa caja), permaneci¨® durante cinco a?os en la banda de su paisana m¨¢s ilustre, Cesaria Evora, pero ha bastado que su bonita canci¨®n Raquel apareciese en la banda sonora de Hable con ella para que su popularidad se dispare. Aprovechando la tesitura, Bau triunfa ahora con Cape Verdean melancholy, un recopilatorio con Raquel y otras doce melod¨ªas de sus cuatro ¨¢lbumes solistas, en los que interpreta una colecci¨®n de guitarras, cavaquinhos y violines que ¨¦l mismo se ha construido. Curiosamente, a Almeida tambi¨¦n se le puede escuchar en Cesaria Evora L'Olympia, una grabaci¨®n en el m¨ªtico teatro parisino que la Diva de los pies descalzos ha decidido publicar diez a?os despu¨¦s de aquellos conciertos del 12 y el 13 de junio de 1993.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.