"El paisaje se maltrata a niveles incre¨ªbles"
Pregunta. ?El arquitecto paisajista todav¨ªa es un bicho raro en Espa?a?
Respuesta. Es una profesi¨®n que se instaur¨® hace un siglo en los Estados Unidos. En Espa?a no existe como profesi¨®n por lo que hay un inter¨¦s reciente por parte de distintas carreras de apropiarse de una disciplina que tiene mucho futuro.
P. ?Qu¨¦ la llev¨® a usted hasta ah¨ª?
R. La primera vez que o¨ª hablar de la disciplina del paisaje fue en Finlandia, donde estuve trabajando en 1987, y empec¨¦ a interesarme. En Espa?a paisaje s¨®lo se asociaba con jardiner¨ªa. De hecho fui la primera espa?ola que ha hecho el m¨¢ster en Harvard.
P. ?El paisaje es la imagen del territorio?
R. Para m¨ª, paisaje es sin¨®nimo de medio ambiente. Me gusta la definici¨®n de un paisajista americano, Garret Eckbo, que dice que paisaje es todo lo que vemos y sentimos a nuestro alrededor, y que el arquitecto de paisaje es aqu¨¦l que da forma al paisaje que debe ser cambiado. Pero es una disciplina en la que hay sitio para muchas carreras. Lo primero ser¨ªa aclarar la confusi¨®n que existe en el significado de la palabra paisaje.
P. ?Lo que hace el arquitecto paisajista es una intervenci¨®n est¨¦tica o tambi¨¦n ¨¦tica?
R. Distinguir¨ªa dos grandes grupos: el que da forma al territorio con un objetivo principal art¨ªstico o de dise?o, y el que tambi¨¦n busca un alcance social, cultural, ecol¨®gico... Tal vez yo estoy m¨¢s en el segundo grupo, aunque tambi¨¦n es una cuesti¨®n de escala. Me gusta resolver problemas espec¨ªficos en relaci¨®n a condiciones locales espec¨ªficas.
P. ?El paisaje es para mirarlo o para usarlo?
R. Para las dos cosas. Me gustan mucho las actuaciones en las que hay que compatibilizar la protecci¨®n con el uso p¨²blico.
P. ?Qu¨¦ est¨¢ haciendo el hombre con el paisaje?
R. En la Comunidad Valenciana, maltrat¨¢ndolo hasta niveles incre¨ªbles. Especialmente en la costa, donde las implicaciones econ¨®micas llevan a transformar todo de forma muy r¨¢pida sin tener en cuenta el territorio. Aparte de ser un espacio muy fr¨¢gil, ha influido mucho la b¨²squeda de riqueza a muy corto plazo sin tener una visi¨®n global y futura del territorio.
P. ?Es un proceso irreversible?
R. S¨ª, y seg¨²n los planes el litoral se va a edificar casi el doble de lo que lo est¨¢ ahora. Esa modificaci¨®n es imparable, pero estamos a tiempo de hacerlo mejor de lo que se ha hecho.
P. ?C¨®mo se puede hacer mejor?
R. Teniendo un modelo concertado del futuro que queremos de la costa. Eso incluir¨ªa la restauraci¨®n de los paisajes degradados, aunque es m¨¢s caro que prever la degradaci¨®n.
P. Usted ha restaurado varios.
R. La mayor¨ªa de proyectos que he hecho son territorios muy degradados por la mano del hombre. Algunos se pueden recuperar, pero cuando la degradaci¨®n es enorme hay que reinventar.
P. ?No es jugar a dios?
R. Es intentar enmendar los errores pasados, como lo estamos haciendo en el Parque de Cabecera, que era la escombrera de Valencia y hemos creado un bosque de ribera. Es verdad que hemos hecho un paisaje reinventado, pero con el objetivo de que la gente rememore lo que hab¨ªa all¨ª y aprenda a disfrutarlo y cuidarlo. Creo que ayudar¨¢ a valorar y a preservar otros bosques de ribera.
EN DOS TRAZOS
Arancha Mu?oz (Valencia, 1962) es la primera mujer espa?ola especializada en arquitectura del paisaje con el sello de Harvard, y su trabajo ha sido distinguido con varios premios. Implicada en equipos multidisciplinares, ha hecho proyectos muy realistas de restauraci¨®n de paisaje como el Parque de Cabecera de Valencia o el Parque Litoral de la playa del Pinar de Castell¨®n, as¨ª como los estudios previos de la Devesa del Saler y las bah¨ªas norte y sur de Alicante. Conoce el litoral en todos su registros, y, a pesar de su imparable modificaci¨®n, cree que se puede resolver mejor.
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