Detenido el antiguo enlace militar de Irak con los inspectores de armas de la ONU

Estados Unidos anunci¨® ayer la detenci¨®n del teniente general iraqu¨ª Husam Muhamad Amin, antiguo jefe del comit¨¦ de relaciones con los inspectores de armas de la ONU. Amin, que figuraba en el puesto 49 en la lista de las 55 personas m¨¢s buscadas por las autoridades de ocupaci¨®n, era considerado uno de los escasos dirigentes del r¨¦gimen de Sadam Husein con conocimiento completo sobre los a¨²n no encontrados, y quiz¨¢ destruidos hace tiempo, arsenales de armamento qu¨ªmico y biol¨®gico. Con Amin, son ya 13 los detenidos de la lista de los 55. Todos ellos permanec¨ªan bajo custodia militar estadounidense en lugares no revelados y, por el momento, en un limbo legal.

Nadie se atreve a pronosticar qu¨¦ ocurrir¨ªa si fueran detenidos Sadam Husein o sus hijos

Pierre Richard Prosper, asesor especial del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, para cr¨ªmenes de guerra, afirm¨® la semana pasada que s¨®lo en casos muy excepcionales los detenidos iraqu¨ªes ser¨ªan juzgados por tribunales estadounidenses instalados en Irak. En principio, la justicia militar de Estados Unidos se har¨ªa cargo de quienes hubieran cometido cr¨ªmenes de guerra contra ciudadanos o soldados de ese pa¨ªs. ?se podr¨ªa ser el caso de los iraqu¨ªes que durante el conflicto simularon rendirse para atacar a miembros de la fuerza expedicionaria. De ser hallados culpables, ser¨ªan ejecutados.

El secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, descart¨® la posibilidad de enviar iraqu¨ªes a la base militar de Guant¨¢namo, donde permanecen, sin abogados ni expectativa de juicio, unos 600 detenidos en la guerra de Afganist¨¢n. Rumsfeld inici¨® ayer una gira por la zona de Oriente Pr¨®ximo para evaluar los pasos a dar en la posguerra iraqu¨ª.

Varios juristas militares estadounidenses se ocupaban ya de revisar los casos de los casi 7.000 prisioneros de guerra iraqu¨ªes. Hasta ahora, m¨¢s de un millar han sido puestos en libertad y cuatro mil son retenidos a la espera de que un tribunal formule acusaciones concretas contra ellos.

Los 55 m¨¢s buscados, todos ellos altos cargos del r¨¦gimen depuesto, son caso aparte. La idea del Pent¨¢gono, a¨²n no formulada oficialmente, consist¨ªa en entregar a los futuros tribunales de Irak a los acusados de cometer cr¨ªmenes contra ciudadanos iraqu¨ªes. En esa situaci¨®n estar¨ªa la gran mayor¨ªa de los 55. Otros ser¨ªan muy probablemente enviados a Kuwait, para responder de presuntos delitos cometidos durante la invasi¨®n del emirato en 1991.

Debido al colapso administrativo en Irak y a la incertidumbre sobre el proceso de reconstrucci¨®n institucional, el Gobierno de Washington no hab¨ªa adoptado a¨²n decisiones formales. Grupos de juristas estadounidenses e iraqu¨ªes procedentes del exilio esperaban constituir los primeros tribunales del nuevo r¨¦gimen en un plazo de varios meses y sopesaban la idea de incluir en ellos, provisionalmente, a jueces y abogados de pa¨ªses vecinos, como Kuwait, Arabia Saud¨ª y Jordania.

Fuentes de la Casa Blanca y del Pent¨¢gono suger¨ªan que no todos los detenidos en la lista de 55 acabar¨ªan sent¨¢ndose en el banquillo. Bastantes de ellos, especialmente los cient¨ªficos y los militares vinculados a los programas de fabricaci¨®n de armas qu¨ªmicas o biol¨®gicas, tendr¨ªan la posibilidad de quedar libres si aceptaran actuar como testigos contra los acusados de mayor peso pol¨ªtico. El teniente general Husam Muhamad Amin, que durante a?os despach¨® personalmente con Sadam Husein y conoci¨® a la perfecci¨®n los arsenales del pa¨ªs, podr¨ªa entrar en esa categor¨ªa de testigos privilegiados.

Nadie se hab¨ªa atrevido a pronosticar qu¨¦ ocurrir¨ªa si fueran detenidos Sadam Husein o sus hijos, Uday y Qusay. Muchos gobiernos preferir¨ªan que esas tres personas, en la c¨²spide del r¨¦gimen ca¨ªdo, fueran entregadas al tribunal de La Haya o alg¨²n otro tipo de jurisdicci¨®n especial supervisada por la Organizaci¨®n de las Naciones Unidas (ONU). El Gobierno de Estados Unidos mantiene una absoluta discreci¨®n sobre sus intenciones.