"Si hay una pol¨ªtica europea com¨²n, EE UU la respetar¨¢"

El presidente de la Comisi¨®n Europea, Romano Prodi (Scandiano, 1939), se encuentra estos d¨ªas en el ojo del hurac¨¢n. De un lado, porque las graves divisiones internas en la UE salpican la labor diaria del Ejecutivo comunitario y las relaciones entre Europa y Estados Unidos. De otro, por los intentos de algunos grandes pa¨ªses para debilitar el papel de la Comisi¨®n a trav¨¦s de la futura Constituci¨®n europea.

Pregunta. ?Cree que se puede hacer una primera Constituci¨®n para Europa cuando la UE est¨¢ dividida?

Respuesta. ?Por qu¨¦ no? La Constituci¨®n est¨¢ planteada para el futuro, no para el pasado. Durante la cumbre de Niza (diciembre de 2000), por ejemplo, hubo una grave crisis y, sin embargo, all¨ª se plantaron las bases para redactar una Constituci¨®n.

"La prioridad en Irak es la reconstrucci¨®n de las instituciones con presencia de la ONU"

"No hay oposici¨®n entre intereses europeos y americanos. Europa es d¨¦bil por su divisi¨®n"

P. Las ¨²ltimas propuestas del presidente de la Convenci¨®n, Valery Giscard d'Estaing, le han molestado mucho porque debilitaban el papel de la Comisi¨®n.

R. Yo no lo dir¨ªa en esos t¨¦rminos. Mantenemos nuestra perplejidad sobre la propuesta de una presidencia estable en la UE. En el fondo, parece que pretenden crear un doble poder ejecutivo, en la Comisi¨®n y en el Consejo. Con competencias similares, habr¨¢ riesgo de enfrentamientos y conflictos entre las dos instituciones, as¨ª como de duplicaci¨®n de administraciones. Lo importante para nosotros es preservar la unidad de acci¨®n de las instituciones manteniendo el modelo comunitario. Adem¨¢s, nosotros defendemos que en la Comisi¨®n haya representantes de todos los pa¨ªses, de forma igualitaria, con respeto al principio de que la UE es una uni¨®n de pueblos y de naciones. Por eso, los pa¨ªses peque?os deben ser respetados y tienen que estar representados.

P. ?Sospecha que hay un intento claro para debilitar la Comisi¨®n?

R. Quiz¨¢ algunos, aunque todas las declaraciones van en sentido contrario. Y sabemos que no es ¨¦sa la voluntad de la mayor¨ªa del Presidium de la Convenci¨®n. Son las tres instituciones (Parlamento Europeo, Consejo y Comisi¨®n) las que deben salir reforzadas.

P. La divisi¨®n en Europa parece beneficiar s¨®lo a EE UU.

R. No hay oposici¨®n entre intereses americanos y europeos. Europa es d¨¦bil s¨®lo porque est¨¢ dividida. Por ejemplo: los ciudadanos europeos est¨¢n totalmente a favor de que exista una verdadera pol¨ªtica exterior y de defensa en la UE, pero no existen las instituciones adecuadas para hacerlo porque hay divisiones.

P. La minicumbre sobre defensa (Francia, Alemania, B¨¦lgica y Luxemburgo) que usted ha apoyado ha sido un intento, pero sus promotores han dejado fuera a Reino Unido, Espa?a o Italia.

R. Los problemas son diferentes. En pol¨ªtica exterior hay diferencias para definir qu¨¦ papel y funciones tendr¨ªa un ministro europeo de Asuntos Exteriores. En defensa, sin embargo, apoyo que haya un n¨²cleo de pa¨ªses que quieran avanzar m¨¢s r¨¢pido, como ya aprobaron en 1998 Francia y Reino Unido. Fue sobre esa semilla sobre la que se cre¨® la Fuerza de Reacci¨®n R¨¢pida, una iniciativa que qued¨® abierta a todos. Y ahora la minicumbre tambi¨¦n ser¨¢ ¨²til si, como se afirma en la declaraci¨®n final, las puertas se quedan abiertas a los dem¨¢s y se mantiene el esp¨ªritu de coordinaci¨®n con la OTAN. Si hay una segunda intenci¨®n y las puertas est¨¢n cerradas, entonces la minicumbre ser¨¢ muy negativa.

P. Los ciudadanos apoyan una pol¨ªtica europea de defensa, pero no quieren que aumenten los gastos militares.

R. Soy un economista y s¨¦ los problemas que plantea el presupuesto de defensa. Pero el nivel actual de gasto en defensa no es desde?able. Los americanos dicen que el gasto militar europeo equivale al 60% del suyo, y que nuestra capacidad de defensa es el 10% de la suya. Si actu¨¢ramos coordinadamente, por ejemplo en la pol¨ªtica de compra de material militar o en la industrial de defensa, podr¨ªamos multiplicar por seis nuestra capacidad en defensa con el mismo gasto. Tenemos cuatro o cinco a?os para racionalizar las fuerzas y crear una industria europea. Podemos hacer mucho sin grandes incrementos en los presupuestos de defensa.

P. ?Habr¨¢ en el futuro un Ej¨¦rcito europeo?

R. Depende de qu¨¦ entendemos por futuro. En el futuro pr¨®ximo, no. Pero en una perspectiva m¨¢s lejana lo habr¨¢, seguro.

P. Tony Blair, el primer ministro brit¨¢nico, sostiene que esa opci¨®n puede desembocar en un enfrentamiento con EE UU.

R. No lo creo. La OTAN es nuestra fuerza y ser¨¢ m¨¢s fuerte si tiene dos puntos de apoyo. Nosotros somos el segundo.

P. Pero la OTAN no ha jugado ning¨²n papel ni en Irak ni antes en Afganist¨¢n.

R. Debido a nuestra debilidad, a nuestra divisi¨®n y a la falta de coordinaci¨®n entre Europa y EE UU. Una Europa fuerte no va contra EE UU ni contra la OTAN, sino a favor de una mejor coordinaci¨®n en la Alianza.

P. ?Pero usted cree que EE UU quiere una Europa fuerte?

R. Creo que va en su propio inter¨¦s.

P. ?Tambi¨¦n en la defensa?

R. Tambi¨¦n. No creo que piensen que son ellos solos los que pueden arreglar el mundo. Europa desarrolla un buen papel de enlace con pa¨ªses del Mediterr¨¢neo, Latinoam¨¦rica u Oriente Pr¨®ximo. La acci¨®n conjunta tambi¨¦n es muy ¨²til para EE UU.

P. La minicumbre de Defensa es una prueba m¨¢s de la reactivaci¨®n del eje Par¨ªs-Berl¨ªn que algunos pa¨ªses ven con recelo porque temen que les impongan criterios desde esas dos capitales.

R. La cooperaci¨®n entre Francia y Alemania es siempre positiva. El problema no es el entendimiento entre los dos, sino la gran divisi¨®n en Europa por la guerra de Irak. La estrategia del Reino Unido y Espa?a era totalmente diferente a la de Francia y Alemania. Falt¨® una posici¨®n pol¨ªtica com¨²n, y la grave y profunda divisi¨®n que se produjo ha creado problemas con EE UU, cuando nuestra relaci¨®n con Washington es important¨ªsima para la paz y la seguridad. Sin la cooperaci¨®n entre las dos orillas del Atl¨¢ntico, la paz es mucho m¨¢s dif¨ªcil. Pero a la vez tiene que ser una cooperaci¨®n entre pares y, una vez m¨¢s, la ¨²nica opci¨®n es tener una Europa unida.

P. Lo contrario de lo ocurrido a ra¨ªz de la guerra de Irak.

R. ?Por qu¨¦ hay divisiones en pol¨ªtica exterior? Porque est¨¢ totalmente definida por las iniciativas individuales de los Estados miembros. Si tuvi¨¦ramos reglas claras para adoptar decisiones comunes, ¨¦stas ser¨ªan respetadas. Por eso somos partidarios de que haya un ¨²nico responsable de la pol¨ªtica exterior europea que sea miembro de la Comisi¨®n y responda tambi¨¦n ante los Estados.

P. Una vez terminada la guerra, ?qu¨¦ conclusi¨®n puede sacar la UE?

R. Las divisiones han demostrado que es necesaria m¨¢s unidad y el ciudadano europeo lo ha entendido as¨ª. Es la ¨²nica conclusi¨®n positiva, adem¨¢s de haber visto eliminar una dictadura horrible.

P. Pero no era ¨¦se el objetivo de la ONU.

R. La dictadura se ha terminado y eso es algo beneficioso para todos. Ahora, y en beneficio del orden internacional, es prioritario restablecer la autoridad de Naciones Unidas.

P. ?Est¨¢ de acuerdo con el deseo de EE UU de levantar las sanciones a Irak?

R. Ahora hay que dar un papel claro a las Naciones Unidas en aspectos clave como la ayuda humanitaria y la reconstrucci¨®n del pa¨ªs.

P. ?Qu¨¦ entiende por "reconstrucci¨®n del pa¨ªs"?

R. Sobre todo reconstrucci¨®n pol¨ªtica. La material, tambi¨¦n, pero la prioridad es la reconstrucci¨®n de las instituciones iraqu¨ªes con presencia y vigilancia de la ONU, con un arbitraje de la comunidad internacional.

P. Washington prefiere dirigir todo el proceso y que la ONU se limite a la ayuda humanitaria.

R. Yo he dicho lo que pienso al respecto.

P. ?Cree que con esta Administraci¨®n estadounidense se podr¨ªa reforzar el v¨ªnculo trasatl¨¢ntico?

R. Yo trabajo en esa direcci¨®n, de forma que la cumbre UE-EE UU del 25 de junio sea un ¨¦xito. Hay asuntos delicados, como el comercio o la energ¨ªa, pero no podemos olvidar que, desde el 11-S, hemos colaborado en campos mucho m¨¢s dif¨ªciles, como la lucha contra el terrorismo. Tenemos que acercarnos, pero sin que nosotros renunciemos a tener una pol¨ªtica europea. La amistad ser¨¢ fuerte si cada uno respeta la dignidad del otro. Y si hay una pol¨ªtica europea compartida, com¨²n, Estados Unidos la respetar¨¢. Pero para eso hay que estar unidos.

P. ?Qu¨¦ se puede esperar de la presidencia italiana de la UE el pr¨®ximo semestre?

R. Comparto sus dos prioridades: Mediterr¨¢neo y Balcanes. Hay que definir una pol¨ªtica clara y abierta para el Mediterr¨¢neo y preparar ya la futura adhesi¨®n de los Balcanes a la UE. Y adem¨¢s compartimos el objetivo de que la Convenci¨®n concluya con ¨¦xito. Tenemos razones de peso para que la Comisi¨®n y el Gobierno italiano mantengamos buenas relaciones y cooperemos estrechamente.

P. El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, presidir¨¢ la UE mientras sigue teniendo problemas con la justicia.

R. La pol¨ªtica del Gobierno italiano es clara y trabajaremos juntos. Es lo ¨²nico que puedo decir.

P. ?Volver¨¢ usted a la pol¨ªtica italiana o seguir¨¢ en la Comisi¨®n si se lo piden?

R. Nunca he dicho que me reincorporar¨ªa a la pol¨ªtica italiana, ni me lo planteo ahora. S¨®lo pienso en cumplir los objetivos que defin¨ª para mi mandato en la Comisi¨®n.Hemos alcanzado ya enormes progresos. Aqu¨ª me queda a?o y medio, y eso, en pol¨ªtica, es un siglo.