Por las dehesas de Sierra Morena

Los especiales valores de la dehesa fueron reconocidos por la Unesco en noviembre del a?o pasado al crear la primera reserva de la biosfera con este ecosistema como protagonista. Los parques naturales de la sierra de Hornachuelos, en C¨®rdoba; sierra Norte de Sevilla, y sierra de Aracena y picos de Aroche, en Huelva -cuajados de montes aclarados de encina, alcornoque y quejigo-, han visto incrementado con esta declaraci¨®n el reconocimiento a su riqueza ecol¨®gica. Espa?a posee 24 reservas de la biosfera, cuyo principal objetivo es hacer compatible la preservaci¨®n del medio natural con el crecimiento econ¨®mico. La Unesco ha otorgado esta distinci¨®n a casi 500 espacios del mundo, a trav¨¦s del Programa Hombre y Biosfera (MAB), que recibi¨® el Premio Pr¨ªncipe de Asturias de la Concordia en 2001.

Tres parques unen sus montes en un corredor verde protegido por la Unesco desde noviembre. Rutas primaverales llenas de flores por las sierras de Hornachuelos, Aracena y picos de Aroche.

Visitas de primavera

. Aunque las dehesas muestran una cara amable en cualquier ¨¦poca, ahora es el tiempo de su mayor belleza: cuando las encinas y alcornoques cuelgan sus floreados racimos amarillos, los jarales nevados de p¨¦talos blancos endulzan el aire y el morado de los cantuesos alfombra los suelos. La nueva estaci¨®n revienta de vida en las dehesas de Sierra Morena, y ¨¦ste es el mejor momento para descubrir el corredor verde que forman, donde medran a sus anchas rapaces como las ¨¢guilas imperial, culebrera y perdicera, o los buitres negro y leonado, junto a mam¨ªferos como el lince, el meloncillo o el lir¨®n careto.

Sierra de Hornachuelos.

Entre las humedades fluviales de los r¨ªos Bemb¨¦zar y Guadalora se aloman y quiebran en vertiginosos barrancos los montes pespunteados de la Sierra Morena occidental cordobesa. M¨¢s del 90% del territorio de este parque natural pertenece a fincas privadas, por lo que los posibles recorridos se limitan a caminos vecinales, cursos de r¨ªos o carreteras. En los centros de informaci¨®n del parque en Hornachuelos y Las Navas de la Concepci¨®n, o en el centro de visitantes de Huerta del Rey, se pueden obtener los mapas para algunas excursiones. Una de las m¨¢s interesantes es la que recorre el sendero de las Herrer¨ªas, que parte de la aldea de Huerta del Rey por el arroyo de la Rabilarga entre encinas, alcornoques, madro?os y acebuches; pasa por el descansadero de la Fuente del Valle y regresa al punto de partida a la sombra de la centenaria encina de Los Arrieros. Otra cara diferente muestra la vereda que desciende por el r¨ªo Bemb¨¦zar desde el poblado del embalse hasta el pueblo de Hornachuelos, rodeando el viejo santuario de Nuestra Se?ora de los ?ngeles.

Sierra Norte de Sevilla.

La actividad humana ligada a la ganader¨ªa extensiva, la extracci¨®n de corcho, la caza e incluso la miner¨ªa han moldeado la silueta de estos parajes sevillanos. Los r¨ªos Viar, Retortillo y Hu¨¦znar, y las lluvias abundantes, convierten el enclave en un vergel. En Constantina se sit¨²a el centro de visitantes, donde informarse sobre las mejores rutas.

Existe un itinerario circular de unos 12 kil¨®metros, a trav¨¦s de algunas de las dehesas m¨¢s bellas de la sierra, que parte de San Nicol¨¢s del Puerto. Luego contin¨²a por el sendero de los Cuartejones, cruza la v¨ªa pecuaria de Fuente del Robledo, sigue por la vereda de las Navas y regresa junto al arroyo Tiri?uelo por el camino de San Ambrosio, hasta dar vistas de nuevo al pueblito de salida.

Sierra de Aracena y picos de Aroche.

En esta comarca serrana, la cr¨ªa de cerdos negros ib¨¦ricos en montanera se ha convertido en la principal actividad agropecuaria. Un perfil de media monta?a de formas suaves con altitudes que no superan los mil metros, un clima muy benigno y unas precipitaciones abundantes conforman un espacio natural que mezcla la vegetaci¨®n mediterr¨¢nea de la dehesa con extensos casta?ares y sabugeras afines a los bosques atl¨¢nticos. Existe una red de senderos que supera los 600 kil¨®metros para conocer estos pagos, de la que se puede destacar el camino del Rebollar, que parte de Aracena con direcci¨®n al embalse del mismo nombre por un recorrido se?alizado entre grandes fincas ganaderas cuajadas de encinas y cerdos.