Todo gris y de escaso eco
Sigue la feria en un tono gris y mediocre. Para suerte del respetable, el encierro de Hermanos Peralta pudo aguantar en pie, aliviado en su totalidad al no pasar examen en los caballos. Toros anovillados, nobles en general, aunque de desigual comportamiento en la muleta. Escaso el nivel t¨¦cnico de los toreros, con la salvedad de Rivera Ord¨®?ez que no tuvo oponentes para demostrarlo. El Fandi, hu¨¦rfano de argumentos y falto de temple. Y El Cordob¨¦s haciendo uso permanente de las ventajas. Todo gris en una tarde que pod¨ªa haber dejado m¨¢s eco.
Manuel D¨ªaz tuvo una actuaci¨®n con muchos altibajos. Emple¨® lo mejor de su clasicismo en sus dos faenas, m¨¢s art¨ªstica la segunda ante un toro de dulce embestida por el pit¨®n izquierdo. El Cordob¨¦s se acopl¨® a su oponente, cuajando con la mano zurda dos tandas con empaque. Por unos instantes olvid¨® las ventajas, carg¨® la suerte y con notable temple lig¨® los muletazos. El toreo en redondo no fue tan espectacular para el tendido. La faena no queda redonda, a lo que se sum¨® el mal empleo de los aceros. Vulgar y ventajista en el que abri¨® plaza ante un toro sin trap¨ªo y de limitada fuerza. D¨ªaz estuvo siempre fuera de cacho, y sin estar convencido de c¨®mo hab¨ªa gestado la faena.
Rivera Ord¨®?ez top¨® con el lote m¨¢s desabor¨ªo de la tarde. Lo intent¨® con su primero, un toro de embestida descompuesta, rematando arriba por los dos pitones. Tanta defensa termin¨® por incomodar al torero, que lo pasaport¨® de una gran estocada. A base de porfiar, cambiarle los terrenos y las distancias, Rivera Ord¨®?ez cincel¨® una faena de tono menor a su segundo. El toro de Peralta result¨® muy deslucido y no colabor¨® con el matador que apenas dej¨® detalles en los remates de las tandas. Sobresaliente estocada. Seguro, el mejor detalle de la tarde.
Muchas lagunas dej¨® la actuaci¨®n de El Fandi en el tercero. Plet¨®rico en banderillas, firm¨® una faena de escasa dote t¨¦cnica. Se dej¨® tocar mucho la muleta, abus¨® del pico y, poco a poco, fue dinamitando una embestida que naci¨® brusca y que fue incapaz de atemperar. Le faltaron argumentos para el toreo de verdad. Apoteosis con las banderillas en el que cerr¨® plaza para encajar una faena pobre, casi toda con la mano zurda. Mat¨® a ley.
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