Un actor burla los controles de seguridad de la familia real brit¨¢nica
El intruso, disfrazado de Bin Laden, irrumpe en el 21? cumplea?os del pr¨ªncipe Guillermo
Un hombre grotescamente disfrazado con la cara de Osama Bin Laden y ropas de mujer provoc¨® la alarma el s¨¢bado por la noche cuando consigui¨® irrumpir en una fiesta de la familia real brit¨¢nica en el castillo de Windsor. Los Windsor festejaban junto a 300 invitados el 21? cumplea?os del pr¨ªncipe Guillermo, hijo de Carlos y Diana y segundo en la l¨ªnea de sucesi¨®n. El incidente dej¨® en evidencia las deficiencias de los ya cuestionados servicios de seguridad de la realeza.
El pr¨ªncipe Guillermo estaba dirigiendo unas palabras desde un estrado cuando el intruso se acerc¨® a ¨¦l y le quit¨® el micr¨®fono. Los invitados creyeron que se trataba de una broma de la fiesta, en la que estaban Isabel II, el pr¨ªncipe de Gales y el resto de la familia real. Pero, aunque el intruso no iba armado ni ten¨ªa intenciones violentas, su irrupci¨®n no fue una broma, sino la constataci¨®n de que cualquiera puede acercarse impunemente a los Windsor sin que nadie se percate de si lleva o no bombas en la cintura.
En estos tiempos de terroristas suicidas, el incidente del s¨¢bado constituye el mayor problema de seguridad vivido por la familia real desde que en 1982 la reina se despert¨® sobresaltada por la presencia de un extra?o en su dormitorio del palacio de Buckingham. Isabel estuvo conversando durante media hora con Michael Fagan, de 30 a?os, hasta que por fin los servicios de seguridad se percataron de que su majestad estaba pidiendo auxilio sin que nadie atendiera sus timbrazos.
El s¨¢bado por la noche, el actor Aaron Barschak, de 36 a?os, lleg¨® a los aleda?os del castillo de Windsor, al oeste de Londres, se pase¨® disfrazado de mujer barbuda con el rostro de Bin Laden, se levant¨® las faldas varias veces mostrando una larga barba a modo de calzoncillos mientras gritaba: "Este es el verdadero heredero al trono", haciendo un juego de palabras con hair (por heredero y por pelo) y real (por realeza y por verdadero).
A¨²n no se sabe c¨®mo, pero tres horas despu¨¦s, tan llamativa persona estaba mezclada entre los 300 invitados que, disfrazados con motivos africanos, celebraban los 21 a?os de Guillermo. Cuando pasaban 20 minutos de las once de la noche y el pr¨ªncipe pronunciaba unas palabras de agradecimiento, se acerc¨® a ¨¦l, le arrebat¨® el micr¨®fono y empez¨® a gritar proclamas sobre Bin Laden. Muchos invitados no se percataron de que estaban ante una peligrosa quiebra de la seguridad de la familia real hasta que vieron c¨®mo el hombre era esposado y retirado a la fuerza.
Fred Barschak, un constructor del norte de Londres, asegur¨® ayer que el detenido es su hijo Aaron, de 36 a?os, a quien defini¨® como "un actor en busca de fama". Siempre vestido como ayer, este actor especializado en aguar fiestas e interrumpir ceremonias ya realiz¨® un n¨²mero semejante meses atr¨¢s, cuando el alcalde de Londres, Ken Livingstone, se dirig¨ªa en Hyde Park a miles de manifestantes que protestaban por la guerra en Irak. Tambi¨¦n ha interrumpido a varios colegas del escenario. Seg¨²n su padre, "es un comediante muy serio, nada antimon¨¢rquico, que necesita publicidad".
El actor fue puesto ayer en libertad bajo fianza, acusado de haber entrado de manera ilegal en el castillo de Windsor. El ministro del Interior, David Blunkett, orden¨® de inmediato una investigaci¨®n ante el m¨¢s grave, pero no el ¨²nico, incidente de seguridad de los ¨²ltimos 20 a?os. Los intentos de entrar en el palacio de Buckingham son habituales y destaca el de un americano que se lanz¨® desnudo en parapente en 1994. Otro hombre fue sorprendido bebiendo whisky en el palacio de Saint James en 1992. Otro, completamente ebrio, llam¨® a la puerta de la residencia de la princesa Ana el a?o pasado preguntando c¨®mo se llegaba a la estaci¨®n Victoria.
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