Despotismo ilustrado
En su ¨²ltima columna F¨¦lix Bay¨®n lamenta que la legislaci¨®n urban¨ªstica no venga impuesta desde Bruselas. Si as¨ª fuera, piensa Bay¨®n, los alcaldes y concejales no estar¨ªan sujetos a las presiones de constructores desaprensivos y se evitar¨ªa que el urbanismo estuviera dominado por los intereses inmediatos de unos pol¨ªticos locales sin m¨¢s horizonte que los cuatro a?os que median entre elecciones.
El comentario del novelista surge a ra¨ªz de la queja expresada por el presidente del Partido Popular de M¨¢laga, Joaqu¨ªn Ram¨ªrez, que censura a quienes se creen con derecho a suplantar a los malague?os para decidir sobre la buena gesti¨®n de la Costa del Sol. Bay¨®n trata con ecuanimidad a Ram¨ªrez, le reconoce alguna (cierta) originalidad en los argumentos y alguna (cierta) elegancia en el lenguaje. No sale mal parado el pol¨ªtico malague?o porque habitualmente los dicterios de Bay¨®n son m¨¢s despectivos, sobre todo si el blanco de sus cr¨ªticas es Marisa Bustinduy o el alcalde Monteseir¨ªn. Pero claro, el elogio encuentra r¨¢pidamente contrapunto: Ram¨ªrez habr¨¢ sufrido un trastorno mental transitorio cuando reclamaba para los malague?os el derecho a decidir, no tiene explicaci¨®n que una persona inteligente pueda pensar semejante disparate.
Casi siempre leo las columnas de Bay¨®n, creo que representan muy bien la indignaci¨®n arbitrista de quien quisiera eliminar sumariamente los males de la pol¨ªtica. No estar¨ªa mal que adem¨¢s de visitar la web de la segunda modernizaci¨®n, leyera Bay¨®n la entrevista que Antonio Polito hace a Ralf Dahrendorf y reflexionara la respuesta que da a una de las preguntas del periodista el ilustre soci¨®logo y ex comisario europeo: una entidad pol¨ªtica en que las leyes se elaboran en secreto, en sesiones a puerta cerrada del Consejo de Ministros, es un insulto a la democracia. No hace falta invocar la autoridad intelectual de Dahrendorf para poner de manifiesto que las instituciones europeas se han forjado con un vicio de origen: el Tratado de 1957 dise?aba un proceso de toma de decisiones pero no contemplaba la democracia.
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