Los Tigres del Norte acercan a Espa?a los 'narcocorridos' de 'La reina del sur'
La banda que revolucion¨® la m¨²sica popular mexicana inicia hoy en Pamplona su gira
M¨¢s de 500 canciones, 130 discos de platino en Estados Unidos, 30 ¨¢lbumes y otros 30 a?os en los escenarios. La banda mexicana Los Tigres del Norte regresan a Espa?a para presentar su ¨²ltimo disco, La reina del sur, inspirado en la novela del escritor Arturo P¨¦rez-Reverte del mismo nombre. Orgullosos de que se les considere los portadores del sentir del pueblo mexicano, la banda que ha popularizado el llamado narcocorrido comienza hoy su segunda gira por Espa?a, una gira que incluye ocho actuaciones y que comienza esta noche en Pamplona.
Son atentos, parlanchines, y confiesan estar "encantados de visitar Espa?a", un lugar donde, dicen, se sienten "muy a gusto". Adem¨¢s de actuar en Pamplona, en el festival Pirineos Sur, Barcelona, Valencia, Madrid, M¨¢laga, Cartagena y Santiago de Compostela, la banda que ha revolucionado la m¨²sica popular mexicana est¨¢ en Espa?a para saldar una deuda: conocer personalmente a Arturo P¨¦rez-Reverte.
El escritor y acad¨¦mico espa?ol ha confesado p¨²blicamente que el narcocorrido titulado Contrabando y traici¨®n fue el "click" que le impuls¨® a escribir La reina del sur. El grupo le devolvi¨® el favor titulando as¨ª su disco y escribiendo una canci¨®n inspirada en el libro de Reverte, que relata la tr¨¢gica historia de la contrabandista Teresa Mendoza.
"Todav¨ªa no hemos tenido oportunidad de conocer a Arturo", confiesa Jorge, uno de los cuatro hermanos Hern¨¢ndez que, junto con su primo ?scar, forman la banda. "Hemos aprovechado esta visita para concertar una cita".
El grupo mexicano lleva 30 a?os cantando a la inmigraci¨®n, a la situaci¨®n de los hispanos en EE UU, a los espaldas mojadas. Sus letras lo mismo denuncian la corrupci¨®n de los Gobiernos que retratan la vida de un padre que vive en la miseria o de un narcotraficante de la frontera. Para Jorge, el hecho de que el grupo lleve 30 a?os afincado en California no supone un problema al denunciar los males de su pa¨ªs de origen. "Vamos y venimos constantemente", asegura, "Adem¨¢s, las historias que contamos en nuestras canciones son las del pueblo en general, les pueden pasar igual a un mexicano, a un colombiano o hasta a un europeo".
Sus letras comprometidas ya les han costado alg¨²n disgusto. No con el presidente Fox, con quien, aseguran, "no hemos tenido ning¨²n problema", aunque se lamentan de que no haya podido hacer todo lo que prometi¨®. Los problemas han surgido con la censura. En cuatro Estados mexicanos algunas de sus canciones han sido vetadas. "Nos duele", confiesa Jorge, "nos parece un error. Los problemas no se solucionan negando su existencia".
Tampoco les preocupa el hecho de que sus letras, en las que a veces se resalta el coraje de delincuentes, se puedan malinterpretar. "La gente joven no es tonta y entiende nuestras canciones. Contamos historias que ya pasaron, y las contamos como ocurrieron, no hacemos h¨¦roes, simplemente retratamos a la gente tal y como era. Luego la gente lo entiende como quiera".
Controvertida o no, lo cierto es que el ¨¦xito de su m¨²sica les ha procurado un privilegio in¨¦dito en EE UU. El grupo cuenta con su propio "d¨ªa nacional". El 17 de junio, decenas de emisoras estadounidenses retransmiten sin cesar canciones de Los Tigres del Norte. "Es algo muy bonito", comenta con orgullo Hern¨¢n.
Pese a tanto ¨¦xito, hay quien dice que en Los Tigres se est¨¢n ablandando. El propio Reverte comentaba hace unos meses que la banda se estaba "amariconando" un poco. "?De verdad dijo eso?", dice Jorge con sorpresa, "Tal vez sea por cosas de la producci¨®n. No s¨¦, tendremos que preguntarle cuando lo veamos", a?ade con una sonrisa.
Babelia
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