El Gobierno de Francia intenta frenar la nueva crisis de C¨®rcega con una puerta abierta al di¨¢logo
El ministro franc¨¦s del Interior, Nicolas Sarkozy, prometi¨® ayer una firme respuesta policial a los terroristas corsos, cuid¨¢ndose de precisar que mantiene la mano tendida "a los que quieren el progreso de la isla". Enfrentado al desaf¨ªo planteado por el Frente de Liberaci¨®n Nacional de C¨®rcega (FLNC), Sarkozy asegur¨® que se pondr¨¢n "todos los medios necesarios para detener a los que colocan las bombas", pero "nosotros no cerramos la puerta al di¨¢logo", precis¨® el responsable de Interior.
Todav¨ªa no ha ocurrido nada irreparable. Tras la ruptura de la tregua, anunciada el s¨¢bado pasado, C¨®rcega sufri¨® dos atentados ese mismo d¨ªa, otros dos en Niza al d¨ªa siguiente y en la noche del domingo al lunes estallaron dos cargas explosivas en la isla, una en un edificio del aeropuerto de Bastia y la otra en una vivienda secundaria. No ha habido v¨ªctimas mortales, pero las dos bombas de Niza rozaron la tragedia y el saldo final, 16 heridos, puede considerarse un golpe de fortuna. El mensaje de Sarkozy, evidentemente dirigido a los pol¨ªticos nacionalistas, pretende que ¨¦stos impidan la escalada hacia las muertes.
La actitud de Sarkozy no es la de un oportunista ni la de un hombre asustado por la violencia. En v¨ªsperas del malhadado refer¨¦ndum del 6 de julio, el ministro del Interior concedi¨® unas declaraciones a Le Figaro en las que incluy¨® esta frase: "No hay un lugar en el mundo en el que los problemas de separatismo hayan sido resueltos ¨²nicamente por m¨¦todos policiales". No estaba destacada en titulares ni sumarios, pero all¨ª estaba. Sarkozy ha dado a entender otras veces que la violencia etarra tampoco ser¨¢ resuelta por v¨ªas exclusivamente policiales, lo cual no es ¨®bice para que las fuerzas a sus ¨®rdenes hayan realizado numerosas operaciones contra ETA.
En todo caso, el poderoso ministro franc¨¦s del Interior ya sabe que se enfrenta a un aut¨¦ntico problema terrorista. Una llamada efectuada en nombre del FLNC reivindic¨® ayer los dos atentados cometidos en Niza contra edificios del Gobierno, y la explosi¨®n que se produjo horas m¨¢s tarde, en C¨®rcega, en un edificio adyacente al aeropuerto de Bastia, tambi¨¦n p¨²blico. El grupo terrorista us¨® el canal habitual -una llamada a la corresponsal¨ªa de una televisi¨®n de informaci¨®n continua- para dejar muy claro que la ruptura de la tregua es un hecho.
Un lugar simb¨®lico
Sarkozy, por su parte, escogi¨® un lugar simb¨®lico para anunciar la pol¨ªtica simult¨¢nea de la firmeza y de la mano tendida: el cuartel del Raid, la unidad policial de ¨¦lite que detuvo a Yvan Colonna, el presunto asesino, en 1998, de un prefecto. El ministro hizo responsables a los "encapuchados" de la "deriva mafiosa", les trat¨® de "minor¨ªa de violentos e irresponsables", pero enumer¨® los contactos que mantiene en la isla, entre otros con la Universidad de C¨®rcega, dominada por los nacionalistas.
Frente a Sarkozy y a lo que representa el Estado franc¨¦s, el FLNC pretende demostrar que mantiene intacta su capacidad de hacer da?o. En 1999 se pararon los actos violentos, mientras la parte pol¨ªtica del nacionalismo -en concreto, sus diputados en la Asamblea corsa- participaba en las negociaciones con el Gobierno de Lionel Jospin para un nuevo estatuto de autonom¨ªa. El terrorismo de baja intensidad volvi¨® a medida que el proceso fue torpedeado por la derecha francesa -entonces en la oposici¨®n- y el propio ministro del Interior de la ¨¦poca, Jean-Pierre Chev¨¨nement, que dimiti¨® a causa de tales negociaciones. El FLNC declar¨® otra tregua en diciembre de 2002, coincidiendo con los mensajes de reforma pol¨ªtica de Sarkozy, hasta que la rompi¨® el s¨¢bado pasado.
En esos cuatro a?os de treguas se han registrado cientos de incidentes, en general circunscritos a los l¨ªmites de la isla. La detenci¨®n de Colonna y las duras condenas a otros ocho activistas, intercaladas con la victoria del no en el refer¨¦ndum, han provocado el salto cualitativo del FLNC a la parte continental de Francia.
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