"No estoy obligada a ganar medalla cada vez que me tiro a la piscina"

Ni una l¨¢grima, ni un mal gesto, ni siquiera una mueca de decepci¨®n. Nina Jivanevskaia acababa de perder la primera ocasi¨®n de colgarse una medalla en estos campeonatos, pero nada en el comportamiento de la espaldista espa?ola hac¨ªa pensar en un fracaso. Se tom¨® su tiempo para salir del agua, atendi¨® cordialmente a las c¨¢maras de televisi¨®n que la aguardaban a pie de piscina y, a diferencia de otros d¨ªas, le cedi¨® los b¨¢rtulos a su marido para analizar inmediatamente despu¨¦s su cuarto puesto con los periodistas. "Esperaba hacer mejor marca", reconoci¨® con una sonrisa en los labios, "pero en deporte siempre puede pasar de todo; mantengo mis esperanzas en los 50 metros (espalda)".

Le costaba a la espa?ola de origen ruso encontrar explicaci¨®n a su derrota, pero nada en su actuaci¨®n dejaba entrever signos de decepci¨®n. Era como si se esperara un resultado as¨ª, como si sus aspiraciones no estuvieran realmente en los 100 metros. Y, sin embargo, seg¨²n hab¨ªa reconocido ella misma d¨ªas antes del inicio de los Mundiales, en esta ocasi¨®n, y pese a ser los 50 metros su prueba fetiche, se hab¨ªa preparado con m¨¢s empe?o para los 100. La favorec¨ªa, adem¨¢s, la ausencia inesperada de la m¨¢xima favorita, la estadounidense Natalie Coughlin, y el haber entrado en la final con el segundo mejor tiempo de todas las nadadoras. "He intentado nadar como ayer, pero me he encontrado m¨¢s cansada", apunt¨®. "Para hacer el primer parcial en el mismo tiempo, he necesitado de un esfuerzo mayor", prosigui¨®. Ah¨ª estuvo, seg¨²n el seleccionador espa?ol, la clave de la prueba.

"En mi opini¨®n", se?al¨® Carles Subirana, "ha salido demasiado r¨¢pido". "Pero ten¨ªa que arriesgar porque el objetivo era ganar, no s¨®lo subir al podio", abund¨® visiblemente contrariado. Para Subirana el cuarto puesto s¨ª supon¨ªa una cierta decepci¨®n: tras la actuaci¨®n de la v¨ªspera, se hab¨ªa imaginado a Jivanevskaia en el escal¨®n de los privilegiados.

La hispano-rusa, en cambio, insist¨ªa en que hab¨ªa fallado en el segundo parcial, en que nadar directamente la final, sin haberlo hecho tambi¨¦n por la ma?ana, modifica el panorama. "Las sensaciones son diferentes y supongo que eso, junto a la presi¨®n a la que yo misma me he sometido, me ha influido tambi¨¦n", argument¨®.

Pero, en cuestiones de presi¨®n, Jivanevskaia tambi¨¦n demostr¨® ser una experta. Con la experiencia de ayer y su mira puesta ya en los 50 metros espalda, donde parte entre las favoritas, la hispano-rusa advirti¨®: "No siento como una obligaci¨®n sacar medalla cada vez que me tiro a la piscina". Hoy debuta en su prueba y todas las esperanzas de medalla, las suyas y las de la delegaci¨®n espa?ola, est¨¢n puestas ah¨ª.