Los ecologistas denuncian el uso de veneno en montes p¨²blicos de Ayora

Ecologistas en Acci¨®n denunci¨® ayer que un sector "minoritario pero importante" de cazadores est¨¢ utilizando veneno en montes propiedad de la Generalitat Valenciana en Ayora. La alarma salt¨® despu¨¦s de que diez perros de caza resultaran intoxicados en el coto de caza menor de El Corralejo. La asociaci¨®n advirti¨® tambi¨¦n de la existencia, en la misma zona, de cebaderos en los que se ha empleado gas¨®leo para atraer a los jabal¨ªes.

El veneno tiene, en teor¨ªa, un fin selectivo; matar alima?as. As¨ª se conoce en el mundo cineg¨¦tico a zorros, gatos monteses, jinetas, gardu?as, tejones, y cualquier otro depredador que compita con las balas de los cazadores. Introducido en cebos de carne, el producto t¨®xico no afecta, en principio, a los animales herb¨ªvoros que son cazados legalmente, como los conejos o las perdices.

El resultado, sin embargo, es indiscriminado. Como denuncia Carlos Feuerriegel, miembro de Ecologistas en Acci¨®n, "en la agon¨ªa de una muerte especialmente cruel", los animales envenenados beben constantemente intentando aplacar su sed, lo que a menudo provoca la contaminaci¨®n de las aguas. Una vez muertos, sus cuerpos extienden la "cadena de muerte" al ser consumidos por otras especies que resultan a su vez intoxicadas.

En opini¨®n de los ecologistas, esta pr¨¢ctica es "la mayor amenaza para la fauna silvestre" de la Comunidad Valenciana al crear "un entorno degradado en el que s¨®lo sobreviven las especies legalmente cazables".

En el coto de El Corralejo, situado en una zona poblada por pinos y sabinas cerca de Ayora, se han encontrado tambi¨¦n nueve cebadores ilegales en los que se ha utilizado gas¨®leo para atraer a los jabal¨ªes con el fin de cazarlos. Permitidos en principio, los cebadores est¨¢n prohibidos cuando el reclamo se rellena con un producto atrayente como el gas¨®leo, que los jabal¨ªes huelen a kil¨®metros de distancia y en el que se revuelcan para desparasitarse.

Junto a la presi¨®n que este m¨¦todo de caza supone para la poblaci¨®n de jabal¨ªes, Feurriegel destaca que el carburante tarda "d¨¦cadas en degradarse", contaminando gravemente el terreno en el cual se deposita.

Los ecologistas reclaman a la consejer¨ªa de Territorio y Vivienda que "abra una investigaci¨®n profunda de los hechos denunciados y deje de ser reh¨¦n de las presiones de un reducido grupo de valencianos organizados en torno a la caza". La misma diligencia piden de la Federaci¨®n Valenciana de Caza, gestora del coto en el que se han detectado las pr¨¢cticas ilegales.