Los m¨¦dicos de urgencias afirman que el calor ha causado 100 muertos en Francia

Desde el Reino Unido a Portugal, una gran parte de Europa se cuece a fuego lento. Desde el comienzo de agosto, son muchos los pa¨ªses europeos que afrontan las temperaturas caniculares m¨¢s altas de toda su historia. En Francia, el n¨²mero de fallecidos por la ola de calor supera ya el centenar. Muerto tomando el sol, limpiando cristales, descargando mercanc¨ªas, ocup¨¢ndose del jard¨ªn, corriendo o paseando en bicicleta. Pero la mayor¨ªa de las muertes no van ligadas a imprudencias deportivas o laborales como las citadas, sino a la edad. La primera empresa de pompas f¨²nebres de Francia asegura que "la semana pasada hubo un 25% m¨¢s de fallecimientos que la misma de agosto del a?o 2002".

Para el doctor Pelloux, al frente de los m¨¦dicos de urgencias, "en Par¨ªs, 50 personas mayores han perecido a causa de la can¨ªcula; en Burdeos son 20 las v¨ªctimas". El doctor Gabisnski, jefe de los servicios de urgencias en la ciudad del Garona, confirma que "el calor ha acelerado muertes que se habr¨ªan producido dentro de semanas o meses". El ministro de Sanidad, Jean Fran?ois Mattei, admite un problema que el colapso de los tanatorios hace imposible ocultar: "?La muerte no espera! El Estado no abandonar¨¢ a los ciudadanos ante la muerte. Ser¨ªa inadmisible".

Si las personas sufren los efectos del calor y las m¨¢s fr¨¢giles pueden incluso no resistirlos, los animales sucumben a ellos por decenas, a miles, a millones. "600.000 pollos, 300.000 gallinas, 150.000 pavos, 60.000 cerdos se han asfixiado a causa de la temperatura", dice Jo?l Limouzin, presidente de la federaci¨®n de avicultores.

Los conductores de una compa?¨ªa local de autobuses de Besancon (oeste de Francia) ir¨¢n a la huelga hoy para reclamar que se les permita trabajar con pantalones cortos, gafas de sol y aire acondicionado.

Ducha y no ba?o

La impotencia de los poderes p¨²blicos ante un sol inclemente la ha ejemplificado mejor que nadie la ministra de Medio Ambiente, Roselyne Bachelot, que aconsej¨® a los franceses "que conduzcan m¨¢s despacio, apaguen todas las l¨¢mparas cuando no sean imprescindibles y prefieran la ducha al ba?o".

A diferencia de lo que sucede en Francia, en Alemania no se ha llevado un registro central sobre el impacto sanitario de la ola de calor, por lo que el mismo Ministerio de Sanidad es incapaz de dar una cifra de fallecimientos por causa de las altas temperaturas. Diversos servicios de emergencia, sin embargo, han registrado un incremento de al menos un 20% en las llamadas atendidas, muchas de ellas de personas enfermas y mayores que sufren doblemente los efectos de calor.

En especial los pacientes con problemas cardiovasculares y de circulaci¨®n se encuentran en una situaci¨®n de riesgo. Las autoridades alemanas, adem¨¢s, vienen advirtiendo de los peligros que entra?an los excepcionalmente altos niveles de ozono.

Tambi¨¦n es dif¨ªcil cuantificar el impacto en las cosechas. El instituto ZMP, especializado en el seguimiento de la evoluci¨®n de los precios y mercados agr¨ªcolas, afirma que la producci¨®n de verduras, frutas y cereales se ha visto afectada no s¨®lo por el calor, sino tambi¨¦n por la continuada sequ¨ªa, pero al mismo tiempo resalta que no cabe esperar un alza de los precios. Las altas temperaturas, en todo caso, tambi¨¦n est¨¢n afectando a la ganader¨ªa, donde est¨¢ disminuyendo la producci¨®n de carne y de leche.

El nivel de agua de los r¨ªos, por otra parte, se acerca a m¨ªnimos hist¨®ricos un a?o despu¨¦s de que fuertes lluvias veraniegas anegaran amplias zonas de Alemania del Este. El nivel medio del Rin, por ejemplo, se situ¨® ayer en 90 cent¨ªmetros, ya muy cerca de los 75 cent¨ªmetros registrados en 1991. M¨¢s de una tonelada de peces han muerto en los ¨²ltimos d¨ªas en el sector oriental del r¨ªo Rin a causa del calor.

En Italia no ser¨¢ f¨¢cil olvidar el verano de 2003. La ola de calor est¨¢ teniendo consecuencias especialmente graves en las ciudades del Norte. Mil¨¢n, Tur¨ªn, Trento y Bolzano han alcanzado los 40? cent¨ªgrados, una temperatura temible que se ve agravada por la humedad habitual en estas metr¨®polis. La atm¨®sfera irrespirable se ha cobrado la vida de seis personas en Mil¨¢n y otras tres en Tur¨ªn, la mayor¨ªa ancianos, consumidos por el golpe de calor. Los n¨²meros de emergencia de la asistencia sanitaria registran un tercio m¨¢s de llamadas que en el verano precedente, mientras los servicios de urgencias de los hospitales no dan abasto para atender a las personas que llegan con s¨ªntomas de malestar. La noche del lunes al martes, en Mil¨¢n se registraron 1.200 llamadas al servicio de ambulancias.

La ola de calor en los pa¨ªses del Benelux est¨¢ afectando sobre todo a Holanda, donde las autoridades han decretado alerta roja. En Luxemburgo se ha hecho un llamamiento a los ciudadanos para recurrir menos al autom¨®vil. En B¨¦lgica, por el contrario, no se han tomado por ahora medidas pese a que el nivel de control de ozono ha rebasado el l¨ªmite normal.

Entretanto, el primer ministro franc¨¦s, Jean-Pierre Raffarin, cuyo pa¨ªs est¨¢ siendo uno de los m¨¢s azotados por la actual climatolog¨ªa, dijo que ir¨¢ antes de fin de mes a Bruselas para solicitar ayuda del nuevo fondo de solidaridad europea por cat¨¢strofes a fin de paliar los efectos de los incendios.