Tres soldados brit¨¢nicos mueren tiroteados en una emboscada guerrillera en Basora
Tropas de EE UU matan a cinco iraqu¨ªes de origen turco tras una pelea ¨¦tnica con kurdos
Las operaciones contra las fuerzas de ocupaci¨®n en Irak contin¨²an y nadie est¨¢ a salvo. Otros tres soldados brit¨¢nicos murieron ayer tras ser atacados en Basora, al sur del pa¨ªs, donde esas fuerzas se encontraban hasta ahora relativamente seguras. Un cuarto militar se encuentra herido. El enfrentamiento se produjo poco antes de que se conociera que desde el pasado mi¨¦rcoles todo el personal de la Embajada del Reino Unido en Irak ha sido evacuado del recinto diplom¨¢tico ante una "amenaza seria" de ataque terrorista.
El ataque de Basora se produjo a las ocho y media de la ma?ana (dos horas menos en la Espa?a peninsular), cuando el todoterreno de los brit¨¢nicos sal¨ªa de patrulla. Al parecer, una camioneta roja de caja descubierta, sigui¨® al veh¨ªculo desde su base hasta el centro de la ciudad. De acuerdo con los relatos de testigos presenciales, citados por la BBC, varios hombres que iban montados en la camioneta empezaron a disparar. Los soldados respondieron con sus armas hasta que una explosi¨®n, probablemente de una granada, acab¨® con sus vidas.
Con estas tres v¨ªctimas, se eleva a 48 el n¨²mero de soldados brit¨¢nicos muertos desde el inicio de la guerra, 11 tras el cese de las hostilidades principales. Un portavoz militar brit¨¢nico, el capit¨¢n Hisham Halawi, calific¨® el ataque de Basora de "operaci¨®n guerrillera". Sea como fuere, el incidente ha despertado el temor a que se trate del inicio de una campa?a m¨¢s organizada por la resistencia iraqu¨ª en el sur de Irak. Los observadores coinciden en que Londres va a tener que replantearse su actitud en la zona.
Hasta ahora, los soldados brit¨¢nicos se hab¨ªan encontrado relativamente seguros, a pesar de algunos incidentes aislados. De hecho, incluso realizaban algunas patrullas a pie sin chaleco antibalas y se mezclaban con la poblaci¨®n local en un intento de distanciarse de la actitud estadounidense. El ataque m¨¢s grave que hab¨ªan sufrido hasta ahora se remonta al pasado 24 de junio cuando seis miembros de la polic¨ªa militar fueron emboscados en las proximidades de Amara, en un registro de armas.
Las cosas se complican para el Reino Unido despu¨¦s de que el mi¨¦rcoles su embajada en Irak recibiera una "amenaza cre¨ªble". Apenas hab¨ªan pasado 24 horas desde el atentado contra la sede de la ONU en Bagdad y los responsables no quisieron asumir ning¨²n riesgo. De inmediato, diplom¨¢ticos, guardias de seguridad y personal contratado, fueron evacuados. Abandonaron la legaci¨®n para trasladarse a la sede de la Autoridad Provisional de la Coalici¨®n, donde trabajan desde entonces protegidos por el imponente cord¨®n de seguridad norteamericano.
El administrador estadounidense para Irak, Paul Bremer, anunci¨® ayer que la coalici¨®n ha fijado finales de septiembre como fecha l¨ªmite para restablecer el abastecimiento de electricidad a los niveles anteriores a la guerra. Los constantes apagones son continuamente mencionados por la poblaci¨®n como una de las principales causas de malestar, detr¨¢s de la inseguridad.
A pesar de su despliegue, el Ej¨¦rcito de Estados Unidos no consigue restaurar el orden. Ayer, sus soldados mataron a dos turcomanos al intentar poner fin a un enfrentamiento entre varios miembros de esa minor¨ªa ¨¦tnica y varios kurdos en la localidad de Tuz Jarmato, cerca de Kirkuk, seg¨²n inform¨® la comandante Josslyn Aberle, portavoz de la 4? Divisi¨®n de Infanter¨ªa, desplegada en esa zona del norte de Irak. "Se enfrentaban por un santuario reconstruido por los turcomanos y que estuvo prohibido en tiempos de Sadam y hab¨ªa sido destruido", explic¨® Aberle, "y cuando apareci¨® la patrulla estaban pele¨¢ndose; algunos turcomanos abrieron fuego, as¨ª que respondimos". Al parecer cinco turcomanos y tres kurdos han muerto por esa disputa, que pone de relieve la rivalidad pol¨ªtica de ambas minor¨ªas, que hab¨ªan sido discriminadas por el r¨¦gimen de Sadam.
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