Una superviviente del 'asesino del naipe' reconoce a Gal¨¢n

Anahid Castillo, la ecuatoriana que result¨® ilesa al ser tiroteada en Tres Cantos el pasado 7 de marzo, identific¨® ayer a Alfredo Gal¨¢n Sotillo como el supuesto asesino del naipe, aunque con algunas dudas. Gal¨¢n, homicida confeso, se entreg¨® el pasado julio en la comisar¨ªa de Puertollano (Ciudad Real). Tras esta prueba, la juez de Instrucci¨®n n¨²mero 10 de Madrid, Mar¨ªa Antonia Torres, dict¨® auto de procesamiento de Gal¨¢n como autor de seis homicidios consumados y otros tres en grado de tentativa. Eso exculpa inicialmente a otro joven detenido en Alcal¨¢ de Henares.

La rueda de reconocimiento se realiz¨® junto a los calabozos de la plaza de Castilla. En ella participaron Alfredo Gal¨¢n y otros cinco hombres con caracter¨ªsticas f¨ªsicas similar al asesino confeso. Este proceso judicial dur¨® unos diez minutos, seg¨²n fuentes del caso. La testigo protegida pudo ver a los seis hombres de cerca, ya que avanzaron de sus posiciones iniciales y se aproximaron a la mampara de separaci¨®n.

Anahid Castillo se?al¨® al hombre situado en tercera posici¨®n, que correspond¨ªa a la de Alfredo Gal¨¢n, aunque no lo hizo con contundencia, sino que expres¨® ciertas dudas. El intento de asesinato contra Anahid y su novio, Eduardo S. S., de 27 a?os, se produjo el pasado viernes 7 de marzo en la avenida de Vi?uelas, en Tres Cantos, cuando la pareja regresaba de tomar unas copas con unos amigos. El supuesto asesino dispar¨® primero a Eduardo en la cara, lo que le produjo una herida de car¨¢cter grave, y cuando fue a tirotear a su compa?era sentimental, se le encasquill¨® el arma (una pistola TT-33 de la marca Tokarev y calibre 7,62). Antes de huir, arroj¨® un naipe del dos de copas con una marca de rotulador en el env¨¦s. La Guardia Civil elabor¨® un retrato robot del asesino gracias a la descripci¨®n que facilit¨® Anahid Castillo.

Detenido exculpado

La titular del Juzgado n¨²mero 10 ha exculpado inicialmente a F. J. A. T., de 26 a?os, que fue detenido el pasado 22 de mayo (cuatro d¨ªas antes de las elecciones). Los agentes de Homicidios de la Jefatura Superior de Polic¨ªa de Madrid mantuvieron durante meses una estrech¨ªsima vigilancia sobre este sospechoso, a pesar de que exist¨ªan dudas razonables sobre su implicaci¨®n en los asesinatos en serie.

Algunos mandos policiales forzaron su detenci¨®n antes de los comicios auton¨®micos y municipales. El registro de su domicilio, el del gimnasio donde se entrena y del bar que regentan sus padres en el centro de Alcal¨¢ de Henares no dieron los frutos esperados: los agentes no hallaron nada sospechoso, ni siquiera indicios. El acusado declar¨® que el d¨ªa del doble asesinato de Alcal¨¢, ocurrido el 5 de febrero, ¨¦l se encontraba en el local familiar.

La juez Mar¨ªa Antonia Torres dict¨® un auto de procesamiento contra Alfredo Gal¨¢n Sotillo por seis delitos de homicidio, otros tres en grado de tentativa y por tenencia il¨ªcita de armas. Ahora, las partes personadas en el proceso deben remitir sus respectivos escritos de acusaci¨®n y defensa al juzgado que instruye la causa.

Alfredo Gal¨¢n perpetr¨® su primer homicidio el 24 de enero, cuando mat¨® de un tiro en la cabeza al portero de la finca, Juan Francisco Ledesma, de 50 a?os, en el n¨²mero 89 de la calle de Alonso Cano (Chamber¨ª). Despu¨¦s le sigui¨® el asesinato del limpiador del aeropuerto de Barajas, Juan Carlos Mart¨ªn Estacio, de 28 a?os, en la plaza del Mar (Barajas). El criminal le asest¨® un balazo en la cabeza, cuando sal¨ªa de trabajar el pasado 5 de febrero.

Ese mismo d¨ªa fueron asesinados en el bar Rojas de Alcal¨¢ de Henares. Murieron el hijo de la due?a del local, Mikel Jim¨¦nez S¨¢nchez, de 18 a?os, y una vecina de la zona, Juana Ucl¨¦s L¨®pez, de 57. Tambi¨¦n result¨® herida grave la propietaria, Teresa S¨¢nchez Garc¨ªa. El criminal no volvi¨® a actuar hasta un mes m¨¢s tarde en Tres Cantos, donde result¨® herido Eduardo S. S., de 27 a?os.

Arganda del Rey

El ¨²ltimo que se le atribuye fue el 18 de marzo en un camino de Arganda del Rey, donde mat¨® de cuatro disparos al matrimonio George y Doina Magda, ambos de 40 a?os. Esta vez firm¨® su crimen con dos cartas: el tres y el cuatro de copas.

El abogado Marcos Garc¨ªa Montes, que representa a Eduardo S. S. en la causa, coment¨® que resulta "normal" que una testigo protegida "tenga dudas a la hora de identificar a su presunto agresor", sobre todo, tras el ataque que sufri¨® y en el que pudo salvar la vida. "Estamos hablando de una persona que no ha presenciado un simple atraco, sino que ha sido tiroteada", a?adi¨®. Otro letrado personado en la causa, Jos¨¦ Mar¨ªa Garz¨®n, indic¨® que existen numerosas pruebas para inculpar a Gal¨¢n.