Loca carrera hacia el Oscar
A los acad¨¦micos del cine espa?ol les est¨¢n lloviendo estos d¨ªas multitud de v¨ªdeos, y hasta deuved¨¦s. No dan abasto. Muchos de ellos quiz¨¢s no hayan ido al cine durante el a?o, y ahora tienen que visionar deprisa y corriendo toda la producci¨®n espa?ola y emitir su voto sobre la pel¨ªcula que se va a proponer como candidata al Oscar de Hollywood. Nada menos. Y ni tan siquiera les dan tiempo para verlas. Suena el tel¨¦fono. Tal o cual productor, amigo para estas ocasiones, les llama pidi¨¦ndoles el voto para su pel¨ªcula. O un director. O un motorista, como hubo en tiempos. Y muchos acad¨¦micos, mientras tanto, tienen que verlas todas. A matacaballo.
Antes, mucho antes, quienes hac¨ªan pel¨ªculas conoc¨ªan sus limitaciones. A Mariano Ozores, por ejemplo, no le atacaban estas ambiciones y, desde luego, no pretend¨ªa concurrir a los festivales de cine. Lo suyo, bueno o malo, era cine "comercial", de mucho ¨¦xito por cierto, mientras los festivales se especializaban entonces en pel¨ªculas de culto, arriesgadas en las formas, renovadoras... o algo as¨ª de meritorio.
Ahora, a lo que se ve, cualquier pel¨ªcula se considera merecedora de todas las distinciones, festivales, goyas y oscars. Un eventual ¨¦xito de taquilla les hace creer que ya valen para todo. Y no digamos un fracaso, que hasta puede dar cierto post¨ªn. Mal parece que los acad¨¦micos no est¨¦n al d¨ªa y que tengan que recurrir a estos visionados de urgencia, pero no es mejor el que productores y directores acaben por confundir los t¨¦rminos de lo que han hecho y les obliguen a verlo, con la pretensi¨®n de que lo suyo sea merecedor de distinciones internacionales. Tenemos el pa¨ªs m¨¢s que mareado. Hasta en el cine.
?Cu¨¢nto m¨¢s sencillo ser¨ªa ir en su momento a ver las pel¨ªculas espa?olas, y de camino algunas extranjeras, en la pantalla grande para la que se hicieron, y votar luego con criterios profesionales y sin atender al tel¨¦fono!... Con tanta prisa y tanta presi¨®n es f¨¢cil llegar al desatino. ?Cu¨¢ntas veces los Goya han reca¨ªdo masivamente sobre una pel¨ªcula mientras a Hollywood han enviado otra? Desconcierta el criterio. ?Lo que es bueno para casa es malo para afuera? ?Y viceversa tambi¨¦n? ?Y cu¨¢ntas veces el enemiguismo ha sido el responsable del veredicto, como el pasado a?o al parecer ocurri¨® con la pel¨ªcula de Almod¨®var Hable con ella?
Cabe sospechar que en todas partes ocurra m¨¢s o menos igual, pero lo disimulan mejor, por lo menos visto desde lejos. Los franceses, de momento ya han seleccionado su candidata al Oscar, Bon voyage, la ¨²ltima pel¨ªcula de Jean Paul Rappeneau, que ya compitiera a?os atr¨¢s con Cyrano de Bergerac. El filme cuenta en el reparto con dos pesos pesados, Isabelle Adjani y G¨¦rard Depardieu, estrellas indiscutibles en su propio pa¨ªs y bien conocidos en Hollywood.
Patatas de la libertad
Aunque en Estados Unidos, la verdad, conocen poco m¨¢s que lo suyo propio. No somos los ¨²nicos mareados. "Estados Unidos es un pa¨ªs est¨²pido; es como un cachorro tonto y agresivo que tiene grandes dientes con los que te puede morder y herir", ha declarado el actor Johnny Depp, ri¨¦ndose de paso de la banalidad de que las patatas fritas (patatas francesas, french fries) se llamen ahora freedom fries (patatas de la libertad). Depp no tuvo pelos en la lengua. Pero la prudencia de sus agentes le ha aconsejado rectificar por posibles represalias. "Mis palabras fueron sacadas de contexto", precis¨® el actor, lo que la revista Stern ha desmentido. "Estados Unidos es un pa¨ªs muy joven y todav¨ªa estamos creciendo como naci¨®n. Amo a mi pa¨ªs y tengo muchas esperanzas en ¨¦l".
?Como para saber qu¨¦ pel¨ªculas les gustan y qu¨¦ espa?ola preferir¨ªan para el Oscar!

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.