Rogativas a los santos

Los actores vascos salieron en procesi¨®n haciendo rogativas para que no desaparezca su cine. Pero dado que ni los santos ni la ministra de Cultura est¨¢n por la labor, los c¨®micos s¨®lo consiguieron que lloviera, que es de lo que entienden los santos. Efectivamente, cay¨® ese d¨ªa bastante agua sobre el caldeado Festival de San Sebasti¨¢n, hasta entonces s¨®lo abundante en rayos y centellas contra el documental vasco de Julio Medem, en el que el autor insiste en la necesidad del di¨¢logo, mientras que parte de los que tendr¨ªan que hablar le responden queriendo silenciarle. Desde la mism¨ªsima ministra que comenta pel¨ªculas que no ha visto -"una irresponsable", seg¨²n el director-, hasta escritores otrora rojos que ahora se ganan el sueldo diciendo que San Sebasti¨¢n es el "festival de la ETA". Y se quedan tan ufanos, denunciando lo que ignoran y reclamando una censura que antes repudiaban. ?Ay, qu¨¦ tiempos!

A veces el cine acaba formando parte de la vida, y La pelota vasca de Medem se ha incrustado en el propio debate del que est¨¢ hablando, provocando reacciones tanto por lo que cuenta como por lo que omite. Acabar¨¢ convirti¨¦ndose, m¨¢s all¨¢ de la pel¨ªcula en s¨ª, en un testimonio de este tiempo de locura...

V¨ªctor Erice nos cont¨® que en torno al rodaje de El esp¨ªritu de la colmena, a la que se rend¨ªa homenaje en este mismo festival, se produjeron situaciones que hoy le parecen m¨¢s significativas que la pel¨ªcula misma. Modestia de autor, que los presentes aplaudieron. Mucho se le aplaudi¨® de hecho, especialmente cuando volvi¨® a llamar la atenci¨®n sobre la inmediata reuni¨®n europea de ministros (y de ministras) de Cultura, en torno a la conveniencia o no de la excepci¨®n cultural.

El 15 de octubre estos pol¨ªticos determinar¨¢n si se extingue o no el cine europeo, y con ello cualquier otra aportaci¨®n cinematogr¨¢fica que quiera seguir la brecha abierta de Julio Medem sobre los asesinatos y amenazas de ETA o la crisis pol¨ªtica vasca, la supervivencia del propio cine vasco que los actores reclamaron en su divertida procesi¨®n a los santos o, en definitiva, cualquier otro cine que no sea yanqui.

Erice, con los pies en el suelo, reclamaba protecci¨®n inteligente al cine, mientras otros entreten¨ªan a la ministra con preguntas sobre la pel¨ªcula de Julio Medem y su capacidad para prohibirla. Pod¨ªan haberlo hecho adem¨¢s sobre la de Joaqu¨ªn Oristrell, Los abajo firmantes, homenaje a la lucha de los actores espa?oles contra la guerra de Irak, y que en este festival se ha aplaudido a rabiar. O sobre la aparici¨®n de Sean Penn en el escenario, que, tal como el pasado a?o hizo su compatriota Jessica Lange, acabar¨ªa declar¨¢ndose en contra de la pol¨ªtica guerrera de su presidente. Cada cual habla de lo que sabe...

En fin, que el 15 de octubre est¨¢ a la vuelta de la esquina y que ese d¨ªa los pol¨ªticos europeos del cine decidir¨¢n si son capaces de entenderse oyendo. Ojal¨¢ que de aqu¨ª a entonces empiece a aparecer la inteligencia detr¨¢s de estos nubarrones. Todo, menos rogativas a un santo.