El debate electoral en California se convierte en 'reality show'

La recta final de la campa?a electoral en California atrapa la atenci¨®n de millones de personas que, a pesar del desconcierto por las decisiones de los tribunales sobre la convocatoria, definitivamente confirmada del pr¨®ximo 7 de octubre, siguen con pasi¨®n el espect¨¢culo que ofrecen los principales candidatos.

Lo que el mi¨¦rcoles por la noche (madrugada en Espa?a) iba a ser un ordenado debate con las preguntas preparadas de antemano se convirti¨® en un reality show pol¨ªtico entre el actor Arnold Schwarzenegger y la comentarista de televisi¨®n Arianna Huffington. El moderador tuvo que aclarar en broma a la audiencia que no se trataba de un programa de humor y reconoci¨® estar en ocasiones mareado por la algarab¨ªa.

Adem¨¢s de Schwarzenegger -uno de los dos candidatos republicanos-, en el estudio estaban el otro gran favorito, el dem¨®crata Cruz Bustamante, el republicano conservador Tom McClintock, el ecologista Peter Camejo y la independiente Arianna Huffington.

El actor fue el centro de la atenci¨®n, por su ¨ªndice de conocimiento popular, que le permite un lugar destacado en los sondeos, y porque su punto d¨¦bil est¨¢ en los detalles pol¨ªticos y econ¨®micos. Y Schwarzenegger no sali¨® malparado: se defendi¨® correctamente, actu¨® como se esperaba y coloc¨® las frases donde deb¨ªa.

Arianna Huffington, que tiene s¨®lo un 3% en las encuestas, se lanz¨® a por ¨¦l a tumba abierta: le acus¨® de hipocres¨ªa pol¨ªtica; ¨¦l le ech¨® en cara que aprovechara descaradamente ciertas ventajas fiscales para no pagar casi impuestos; ella lo neg¨®, muy enfadada, y le acus¨® de hacer pel¨ªculas violentas; ¨¦l le recomend¨® tomar caf¨¦ descafeinado; y tras una de las muchas interrupciones, Arianna le dijo a Arnold: "As¨ª es como tratas a las mujeres, ya lo sabemos".

Un papel en 'Terminator 4'

Arnie no perdi¨® la sonrisa, pero s¨ª quiz¨¢ los papeles, porque dijo: "Acabo de darme cuenta de que tengo un papel estupendo para ti en Terminator 4". La audiencia celebr¨® el chiste, que la propia Huffington, seg¨²n dijo despu¨¦s del debate, entendi¨® como una referencia a la escena de Terminator 3 en la que el personaje de Schwarzenegger tira por el retrete una cabeza de una mujer robot. "Es una clara se?al de lo que piensa de las mujeres", lament¨®.

Las interrupciones no dejaron casi espacio para conocer sus propuestas de soluci¨®n de los graves problemas que tiene California, aunque durante la hora y media de debate, televisado en directo por varias cadenas nacionales, se habl¨® de impuestos, de empleo, de crisis econ¨®mica, de inmigrantes ilegales y de seguro m¨¦dico.

Bustamante tuvo que defenderse de las acusaciones de haber cobrado dinero de los casinos indios; Camejo pidi¨® m¨¢s impuestos sobre los ricos y McClintok, que no critic¨® a su compa?ero de partido, se comprometi¨® a no tocar los impuestos.

La primera iron¨ªa es que quiz¨¢ toda la campa?a no sirva para nada; la segunda es que los republicanos pueden robarse votos y dar la victoria al adversario. Los californianos deben decidir el 7 de octubre si quieren que siga o no el gobernador Gray Davis, reelegido hace menos de un a?o; en caso negativo, deben seleccionar a uno de los 135 candidatos. Si Davis sobrevive -y es una opci¨®n que est¨¢ recuperando terreno-, no habr¨¢ nuevo gobernador. Si no, puede ocurrir que la divisi¨®n del voto republicano entre Schwarzenegger y McClintock d¨¦ la victoria a Bustamante.