Danza Invisible renueva su sonido con un toque de iron¨ªa

El veterano cuarteto malague?o Danza Invisible pone en circulaci¨®n su duod¨¦cimo ¨¢lbum de estudio, Pura danza, donde Javier Ojeda (voz), Antonio Gil (guitarra), Manuel Rubio (guitarra y teclados) y Chris Navas (bajo) muestran su manera de entender el pop de calidad y con gran tir¨®n comercial. Para Javier Ojeda, el solista, Pura danza "es un ¨¢lbum muy fresquito. No parece para nada el disco de una banda que lleva veinte a?os en la carrera".

"No es que llevar tanto tiempo se convierta en un obst¨¢culo", contin¨²a Javier Ojeda, "sino que simplemente hay que tener cuidado para no repetirse. Eso aparte de que nosotros somos muy nerviosos. No hacemos como Los Ramones, que todos sus discos eran iguales. Escuchamos mucha m¨²sica distinta y eso se refleja en nuestros discos". Esta vez, han contado con colaboradores para resolver las letras de las canciones, como Jos¨¦ Mar¨ªa Granados en Las reglas del juego o Miguel Mar¨ªn (Migueli) en Encadenao.

Pura danza tiene en sus surcos un resabio de m¨²sica espa?ola, flamenco y tonadilla realmente nuevo en la producci¨®n de los autores de Sabor de amor. Javier Ojeda explica: "Con la edad nos vamos desprejuiciando, qu¨¦ quieres que te diga. Nos gusta el flamenco y nunca lo hab¨ªamos explorado, entre otras cosas, porque, aunque seamos andaluces, no lo sentimos como nuestras ra¨ªces musicales. Nosotros provenimos de The Cure, Simple Minds, los primeros U2... Sin embargo, con el tiempo, nos hemos ido encontrando lo suficientemente seguros para no hacer un pastiche".

Con ecos de merengue, salsa y rumba, el ¨¢lbum no defraudar¨¢ a los seguidores de siempre, que reconocer¨¢n el estilo del grupo en el single Dame m¨¢s, pero tambi¨¦n se nota el influjo del Gato P¨¦rez en la ir¨®nica Dame de beber.

Tambi¨¦n, en un disco enteramente dedicado al amor, sobresalen piezas rom¨¢nticas del calibre de Am¨¢ndote. Para Chris Navas, bajista del grupo, la g¨¦nesis del disco ha sido especial: "Tras la gira de Efectos personales, con menos conciertos y en la que nos hab¨ªamos venido un poco abajo viendo c¨®mo est¨¢ el mercado, nos tuvimos que poner las pilas". Al respecto, el grupo encuentra culpables y los se?ala: "La mierda de Operaci¨®n Triunfo lo que est¨¢ consiguiendo es que cada vez queden menos grupos. Todo est¨¢ mucho m¨¢s prefabricado. No hay sitio para todo lo que no sea el solista de turno, guaperas y latino, pero cl¨®nico".