Alfil intangible
Estudio de O. Duras. Ceskoslovensky Schach, 1933.
En el a?o terrible de 1933, mientras Hitler ascend¨ªa al poder en Alemania, el gran jugador Oldrich Duras (1882-1957), retirado de la competici¨®n de torneos, dedicaba su tiempo a componer hermosos estudios, como el que aqu¨ª presentamos. Las blancas obtienen la victoria merced a la intensa acci¨®n de un alfil que navega soberano por todo el tablero y nunca puede ser capturado impunemente. Las primeras jugadas son bastante evidentes: 1 g7, Ad5 / 2 a7 y ahora las negras no pueden jugar 2... Rb7 por 3 Ae4, que clava el alfil defensor y gana; pero este detalle parece refutarse con la intermedia 2... Ae6 j., ya que luego de 3 Rg3, Rb7 las negras empatan. Es ahora cuando comienza la acci¨®n del alfil intangible: 3 Af5! y si 3... A - f5 j. / 4 Rg3 no se puede evitar la coronaci¨®n de uno de los peones. Las negras, empero, a¨²n tienen recursos: 3... f2 / 4 Rg2, Ad5 j. y ahora la posici¨®n vuelve a parecer tablas, ya que si 5 R - f2, Ac5 j. y 6... A - a7, y si 5 Rf1, Ac5! -no 5... Rb7 / 6 Ae4, etc¨¦tera- / 6 a8=D, Ac4 j. y las negras ganar¨ªan. Sin embargo, entra otra vez en acci¨®n el alfil m¨¢gico: 5 Ae4! y otra vez pierde 5... A - e4 j. / 6 R - f2, Ac5 j. / 7 Re2, etc¨¦tera. Todav¨ªa existe la posibilidad de 5... Ac4, que amenaza coronar, y si 6 R - f2, Ac5 j. y tablas; pero despu¨¦s de 6 Ad3!! las negras est¨¢n perdidas; es claro que si 6... A - d3 / 7 R - f2 y uno de los peones corona, y ahora tampoco es suficiente 6... Ad5 j. / 7 Rf1! y el recurso salvador 7... Ac5 fracasa esta vez porque no existe el jaque en c4. Hay que jugar 7... Rb7 y por medio de una ¨²ltima inmolaci¨®n el alfil intangible clava a su hom¨®nimo adversario y obliga a rendirse.
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