El obispo que renunci¨®

Hace un a?o, la revista valenciana Sa¨®, vinculada al cristianismo progresista, present¨®, en un homenaje a Rafael Sanus, un libro dedicado a este obispo em¨¦rito. Su lac¨®nico t¨ªtulo, Un home lliure (Un hombre libre), define a un personaje que en noviembre de 2000 conmocion¨® a la Iglesia valenciana al solicitar al Papa su renuncia, que le fue aceptada, como obispo auxiliar de Valencia un lustro antes de la edad habitual de jubilaci¨®n de los prelados, 75 a?os. Las discrepancias con el arzobispo, Agust¨ªn Garc¨ªa Gasco, de posiciones muy conservadoras, desencadenaron la crisis. Habl¨® entonces de "cansancio moral" por su marginaci¨®n, y de falta del "m¨¢s m¨ªnimo sentido de la colegialidad" en la archidi¨®cesis. En represalia, fue expulsado del Colegio del Corpus Christi, donde vivi¨® 24 a?os, y le fue prohibido confirmar.

Nacido en Alcoi en 1931, Sanus nunca ha sido un radical. De talante humanista, disposici¨®n al di¨¢logo y buena formaci¨®n intelectual, fue profesor de la Facultad de Teolog¨ªa y rector del colegio del Corpus Christi de Valencia. Nombrado obispo auxiliar en febrero de 1989 a propuesta del anterior arzobispo, Miguel Roca Cabanilles, mantuvo una relaci¨®n estrecha con los problemas del clero, de los sacerdotes y p¨¢rrocos, muy olvidados por una jerarqu¨ªa m¨¢s atenta al contacto con el poder pol¨ªtico que a sus bases.

Hombre de Iglesia, como lo fue el tambi¨¦n valenciano cardenal Vicente Enrique y Taranc¨®n, en cuyo espejo se miran ¨¦l y una buena parte de cat¨®licos con indisimulada melancol¨ªa, Sanus no se ha dejado silenciar y suele repetir que la Iglesia no acaba de tomar conciencia de que est¨¢ en una sociedad democr¨¢tica y pluralista.