Un pacto con los ciudadanos para realizar los derechos de todos

Andaluc¨ªa se suma a la iniciativa europea de celebrar hoy el D¨ªa de la Justicia Civil, que se enmarca en la obligaci¨®n de los poderes p¨²blicos de remover los obst¨¢culos que se opongan a la realizaci¨®n individual y efectiva de los derechos reconocidos en los ordenamientos jur¨ªdicos. Ratificamos p¨²blicamente, desde el Gobierno andaluz, los compromisos que contrajimos hace seis a?os, cuando se puso en activo la competencia estatutaria sobre la Justicia. Esta decisi¨®n tuvo dos puntos de referencia claramente pol¨ªticos: el m¨¢ximo desarrollo del autogobierno recogido en el Estatuto de Autonom¨ªa, y la obligaci¨®n constitucional de facilitar la tutela judicial a todos los andaluces en pie de igualdad, mediante un servicio p¨²blico digno y de calidad.

La administraci¨®n del sistema judicial es complicada y tiene tantas facetas, que basta que una cara de ese poliedro se desluzca para que la imagen que proyecte pierda en definici¨®n, en claridad, y haga disminuir enteros en la opini¨®n p¨²blica. Una sentencia incomprensible, un problema de criminalidad, un retraso injustificado, una aver¨ªa inform¨¢tica, siendo cuestiones tan dispares, pueden dar al traste de igual forma con el prestigio labrado durante meses por cientos de sentencias acertadas, el acortamiento del tiempo de los litigios o la eficaz gesti¨®n informatizada de los juzgados. Pero, m¨¢s all¨¢ de estas dificultades, es ya una evidencia que los andaluces hoy est¨¢n mejor atendidos por una Justicia que se presta con mayor cercan¨ªa, de forma eficiente y cada vez m¨¢s comprensible. Por eso nos sumamos con satisfacci¨®n al D¨ªa de la Justicia, abriendo las puertas de esos palacios de justicia de Andaluc¨ªa, que van siendo ya ciudades y casas de la justicia.

Celebramos este d¨ªa en un escenario que presenta no pocas dificultades. Hace algo m¨¢s de dos a?os, las Comunidades Aut¨®nomas suscribimos con el Ministerio de Justicia un acuerdo, que m¨¢s adelante se incluy¨® en el Pacto de Estado para la Reforma de la Justicia, en el que todos manifestamos, o al menos as¨ª lo cre¨ªmos entonces, la voluntad de mejorar un sistema que nos estaba alejando de los est¨¢ndares europeos en lo que se refiere a la credibilidad, tiempos de respuesta, seguridad y previsibilidad de la justicia, afectando a los derechos de los ciudadanos, y a la marcha adecuada de las instituciones y, especialmente, de los mercados y de la econom¨ªa.

El Pacto de Estado no fue un acuerdo provocado por los buenos sentimientos de las administraciones, sino por las obligaciones que ¨¦stas deb¨ªan cumplir. Nosotros pusimos el ¨¦nfasis en dos direcciones: mejorar el acceso de los ciudadanos a la justicia, y dotar al sistema judicial de medios humanos, t¨¦cnicos e infraestructurales para desarrollar correctamente sus tareas.

As¨ª, la asistencia jur¨ªdica gratuita tiene hoy una calidad y extensi¨®n que nos permiten hablar de igualdad de todos los andaluces, incluyendo en ellos a los que llegan a nuestra tierra buscando una vida menos terrible, al reclamar la acci¨®n de la Justicia. Por su parte, el Plan de Infraestructuras Judiciales, con 10 obras terminadas y 25 en marcha (con realizaciones tan notorias como los nuevos Juzgados de Almer¨ªa o de Baeza), el incremento de 1.000 efectivos, la incorporaci¨®n de nuevas tecnolog¨ªas que nos sit¨²an a la cabeza de Espa?a y en una posici¨®n hom¨®loga a la de muchos pa¨ªses europeos, hablan a las claras de que nuestros compromisos no fueron una m¨²sica oportunista, sino que tienen una letra que consiste en multiplicar la inversi¨®n y hacer el gasto eficiente, duplicar las cifras presupuestarias y llevar adelante un extraordinario esfuerzo t¨¦cnico y organizativo, para rentabilizar socialmente estos gastos.

Mientras tanto, la administraci¨®n del Estado no s¨®lo ha incumplido sus compromisos econ¨®micos y organizativos, sino que est¨¢ haciendo todo lo posible por entorpecer nuestro trabajo. El parcheo de leyes sustantivas y procedimentales, la desafortunada tramitaci¨®n de la Ley Org¨¢nica, el trasfondo centralista opuesto al esp¨ªritu y a la letra de la Constituci¨®n, las posturas del Gobierno apoyadas s¨®lo en su mayor¨ªa parlamentaria y de ning¨²n modo en la racionalidad o la forma de legislar a golpe de titular de prensa, est¨¢n privando a nuestro pa¨ªs de un marco jur¨ªdico l¨®gico y estable, premisa necesaria para el buen funcionamiento de la justicia.

En este D¨ªa Europeo de la Justicia, y en los que vendr¨¢n despu¨¦s, seguiremos trabajando, junto con todos los que intervienen en el sistema judicial, para poner a disposici¨®n de los andaluces un servicio p¨²blico moderno, eficaz, atento a sus necesidades. En realidad, ese es el pacto que m¨¢s nos interesa y obliga: el que tenemos con los ciudadanos para la realizaci¨®n de los derechos de todos.

Carmen Hermos¨ªn Bono es consejera de Justicia y Administraci¨®n P¨²blica de la Junta de Andaluc¨ªa