El agua y la lealtad

Seg¨²n el Diccionario de la Real Academia Espa?ola de la Lengua, la lealtad es "legalidad, verdad, realidad". Es decir, ser leales significa no hacer trampas, no mentir ni ocultar la verdad, por supuesto cumplir las normas concebidas para garantizar la convivencia pac¨ªfica... Lamentablemente, para el PP todo vale para acusar al PSOE de deslealtad -o de desfachatez o de antipatriotismo...-. La celebraci¨®n en Valencia de unas jornadas sobre el agua, organizadas por el PSPV, han servido como pretexto, de nuevo, para ese tipo de ataques con los que el PP intenta ocultar a la ciudadan¨ªa -en un acto, ese s¨ª, desleal- su incapacidad para resolver de verdad, con rapidez y con eficacia, los problemas del agua en la Comunidad Valenciana.

?Estar¨¢ pensando quiz¨¢s el Gobierno del Partido Popular en un trasvase "de peaje"?

Si se impulsaran en serio las t¨¦cnicas de ahorro y eficiencia el agua resultante ser¨ªa notablemente superior en cuant¨ªa

Los valencianos se merecen saber la verdad sobre el pretendido dogma: "O el trasvase del Ebro o la ruina y el desierto". En las citadas jornadas hubo ocasi¨®n de o¨ªr a expertos y a responsables pol¨ªticos, pero tambi¨¦n a los agricultores. Jos¨¦ Ram¨®n Urb¨¢n, de la Uni¨® de Llauradors, expuso con rigor cu¨¢les son, hoy d¨ªa, los problemas reales de los agricultores valencianos, en particular los de las peque?as y medianas explotaciones agrarias. Seg¨²n Urb¨¢n, los problemas m¨¢s graves no tienen que ver con el agua, sino con la propia condici¨®n de agricultor: la insuficiente protecci¨®n social del r¨¦gimen especial agrario, la ca¨ªda de las rentas agrarias -mientras se desboca el precio de los alimentos...-. En cuanto al uso del agua en los regad¨ªos valencianos, Urb¨¢n reconoci¨® que queda mucho por hacer en cuanto a su eficiencia, y se?al¨® la urgencia de aprovechar aguas depuradas cuya reutilizaci¨®n en los regad¨ªos deber¨ªa ser concedida por las Confederaciones Hidrogr¨¢ficas a las comunidades de regantes. Se refiri¨® expresamente a la oportunidad, para todo el Levante, de desarrollar mucho m¨¢s las t¨¦cnicas de desalaci¨®n de agua de mar, utilizando energ¨ªas renovables como ya se hace en Canarias -evitando, con ello, el consumo de combustibles contaminantes-. Urb¨¢n alert¨® tambi¨¦n sobre la especulaci¨®n inmobiliaria que genera demandas crecientes de agua y que presiona para conseguir la recalificaci¨®n de suelos actualmente destinados a la agricultura. El representante de los agricultores exig¨ªa, en suma, menos demagogia y m¨¢s sensatez y m¨¢s rigor a la hora de hablar de agua.

En las jornadas se habl¨® tambi¨¦n del consumo de agua en las ciudades y de las incre¨ªbles predicciones que "justifican" el trasvase del Ebro, bas¨¢ndose, por ejemplo, en calcular que el consumo actual de agua en Valencia capital en 2010 ser¨¢ el doble del actual; el PHN recoge id¨¦ntica previsi¨®n en el caso de Benidorm... sin aclarar si ello va asociado a una ulterior disminuci¨®n de los metros cuadrados de espacio disponible por habitante, y por tanto, a una degradaci¨®n irresponsable de la calidad de la oferta tur¨ªstica.

Por supuesto, en las jornadas qued¨® patente el caos de las Confederaciones Hidrogr¨¢ficas del J¨²car y del Segura que, por una parte, siguen otorgando concesiones para ampliar regad¨ªos en acu¨ªferos sobreexplotados en los que todav¨ªa no se ha establecido legalmente la ordenaci¨®n de usos correspondientes a dicha sobreexplotaci¨®n -se citaron casos concretos en Villena y en Utiel, por cierto para regad¨ªos por inundaci¨®n-; y, por otra, no llevan a cabo los estudios necesarios para conocer con rigor la situaci¨®n de las aguas subterr¨¢neas -por ejemplo, de los acu¨ªferos de Castell¨®n- "por falta de presupuestos". Desde luego, no se debe responsabilizar ¨²nicamente a los funcionarios del desastre actual de las Confederaciones Hidrogr¨¢ficas: la mayor¨ªa de ellos son profesionales frustrados por el deterioro de estos organismos -resultado de la absoluta desidia del Ministerio de Medio Ambiente- que no se atreven a denunciar p¨²blicamente lo que est¨¢ pasando por miedo a represalias.

Para sintetizar, de las diferentes intervenciones de las jornadas se derivaba lo que los socialistas venimos defendiendo desde que se aprob¨® el PHN del Gobierno del PP: si se impulsaran en serio las t¨¦cnicas de ahorro y eficiencia en todos los usos del agua, la modernizaci¨®n de regad¨ªos, la reutilizaci¨®n de aguas depuradas, el uso sostenible de acu¨ªferos no sobreexplotados, la reducci¨®n de la contaminaci¨®n de las aguas superficiales y subterr¨¢neas, y la desalaci¨®n, el agua resultante ser¨ªa notablemente superior en cuant¨ªa (y en calidad) a los 315 hm3 previstos del trasvase del Ebro hacia la cuenca del J¨²car: ?Ojo! por supuesto much¨ªsimo m¨¢s que los escasos 100 hm3 que, en realidad, llegar¨ªan a la Comunidad Valenciana, ya que, como se record¨® en las jornadas, el resto del agua trasvasada hacia el J¨²car ir¨¢ hacia Castilla-La Mancha...

Todo lo anterior est¨¢ perfectamente documentado, y por lo tanto su difusi¨®n deber¨ªa contribuir a que los valencianos conozcan con mayor rigor determinadas soluciones, viables y r¨¢pidas, para reducir las carencias del agua en su territorio. Desde luego, ninguna soluci¨®n -tampoco el trasvase del Ebro- resultar¨¢ suficiente si se siguen creando expectativas sin l¨ªmite de consumo adicional de agua, en particular en el sector inmobiliario.

Pero en las jornadas tambi¨¦n se asumieron compromisos pol¨ªticos. Como miembro de la Ejecutiva Federal del PSOE, manifest¨¦ la firme voluntad de Rodr¨ªguez Zapatero -en el caso de un resultado electoral favorable al PSOE en marzo de 2004- de acelerar todas aquellas actuaciones, incluidas en el Anexo del PHN del PP, que permitan resolver con rapidez problemas de agua en la Comunidad Valenciana, en la Comunidad de Murcia y en Almer¨ªa. Por supuesto, reiter¨¦ el compromiso de Rodr¨ªguez Zapatero de abordar la pol¨ªtica del agua en toda Espa?a desde el consenso, la racionalidad y el respeto a la legalidad -en la l¨ªnea ya emprendida por Joan Ignasi Pl¨¢ al frente del PSPV-, superando la actual situaci¨®n de confrontaci¨®n, de demagogia y de desprecio hacia las normas espa?olas y europeas.

Parece ser -a la vista de comentarios recogidos en los medios de comunicaci¨®n- que a los dirigentes del PP les parece una "cuesti¨®n menor", un "exceso de celo burocr¨¢tico" o un "alegato europeista" mis afirmaciones en relaci¨®n con el imprescindible cumplimiento de la normativa europea, m¨¢xime si se est¨¢n reclamando fondos a la Uni¨®n Europea. Claro que quiz¨¢s esos comentarios -bien poco leales hacia las instituciones europeas- tengan que ver con el anuncio de Aznar, de Zaplana y de Camps de que el trasvase del Ebro se har¨¢ "con financiaci¨®n europea o sin ella", despu¨¦s de haber afirmado, durante dos a?os, que la financiaci¨®n europea para el trasvase estaba "asegurada" -otro intento desleal de ocultar que, hasta ahora, ni siquiera se ha producido la solicitud formal de dichos fondos por parte de Espa?a-. ?Estar¨¢ pensando quiz¨¢s el Gobierno del Partido Popular en un trasvase "de peaje"? En ese caso, ser¨ªa urgent¨ªsimo conocer, de una vez, a qui¨¦n se le va a asignar el agua trasvasada y a qu¨¦ precio.

Pero, sin duda, lo que m¨¢s escandaliz¨® a los dirigentes del PP fue mi comentario sobre el baj¨ªsimo porcentaje de regad¨ªos eficientes: en el conjunto de Espa?a tan s¨®lo un 10%; en el caso de la Comunidad Valenciana, no lo cuantifiqu¨¦ -a pesar de que tambi¨¦n se ha pretendido enga?ar en este sentido sobre mis declaraciones-, pero seg¨²n el Plan Nacional de Regad¨ªos se pueden ahorrar 340 hm3 en la agricultura valenciana, cifra superior incluso a los 315 hm3 prometidos para la cuenca del J¨²car. Y, por supuesto, se destac¨® mi afirmaci¨®n contraria al t¨®pico de "el agua de los r¨ªos se pierde en el mar", basada en el actual conocimiento de que gracias al agua dulce existe vida en el mar y en los deltas. Por lo visto, los miles de puestos de trabajo ligados a la actividad pesquera, y la disponibilidad de alimentos que de ella se derivan, no le merecen ninguna atenci¨®n a quienes ridiculizan lo del agua y los peces. Sin duda, hay mucho desconocimiento en esta materia y bastante mala fe: en California est¨¢n demoliendo presas y sustituy¨¦ndolas por otras tecnolog¨ªas de obtenci¨®n de agua -sobre todo, desaladoras- tras comprobar la pr¨¢ctica desaparici¨®n de salmones, y con ella la destrucci¨®n de una industria agroalimentaria pr¨®spera.

Las jornadas han sido una ocasi¨®n para hablar con libertad de una cuesti¨®n convertida por el PP en un aut¨¦ntico tab¨². Ser¨¢ necesario un esfuerzo mucho m¨¢s generalizado de difusi¨®n de los conocimientos actuales para que los valencianos o los murcianos dejen de ser simples receptores del mensaje oficial, sin apenas capacidad de opinar, so pena de ser tachados, como m¨ªnimo, de desleales.

Cristina Narbona Ruiz es Secretaria Federal de Medio Ambiente y Ordenaci¨®n del Territorio del PSOE