Vivir con los huesos de otro
El banco de material ¨®seo de Alicante recibe una media de 230 donaciones al a?o, casi todas de personas vivas
El Banco de Huesos de Alicante recibe una media anual de 230 donaciones y la mayor¨ªa procede de personas vivas. Este centro, ubicado de Sant Joan d'Alacant abastece material ¨®seo y tendones para la recuperaci¨®n de miembros de pacientes, especialmente ni?os y personas mayores, seg¨²n explica su director y responsable, el doctor Francisco Qu¨ªlez. La relevancia del trabajo que se realiza en el banco estriba en la posibilidad de "poder sustituir un miembro por otro y no tener que amputar: ¨¦sta es la importancia sustancial", explica Qu¨ªlez, quien asegura que la creaci¨®n de este banco de huesos "evit¨® la comercializaci¨®n de material humano ilegal procedente de campos de concentraci¨®n del tercer mundo y de sitios poco recomendables".
La reserva evita el tr¨¢fico de huesos desde pa¨ªses del Tercer Mundo
El tr¨¢fico de ¨®rganos -los huesos llegaban a alcanzar precios astron¨®micos- ha sido una realidad, seg¨²n Qu¨ªlez. "Nuestra misi¨®n es recoger todas las piezas de donantes vivos o de cad¨¢veres que podamos y as¨ª tenemos un archivo para que cuando un receptor lo necesite se le pueda suministrar", explica. El donante en vida no decide prescindir de ninguno de sus huesos de manera altruista. Se trata de intervenciones a personas que suponen la p¨¦rdida de una o varias piezas. Lo m¨¢s com¨²n, seg¨²n explica Qu¨ªlez, es la recuperaci¨®n de la cabeza del f¨¦mur en las fracturas de cadera. En el caso de donaciones de cad¨¢veres el aprovechamiento es mayor, puesto que se obtienen piezas completas para trasplantes, y se act¨²a como en el resto de casos de donaciones de ¨®rganos.
Los huesos del banco se pueden reutilizar de dos maneras. "Una forma de aprovechar estos huesos es como estructura de carga, es decir, cuando en una operaci¨®n un trozo de hueso se ha estropeado se sustituye por otro del que dispongamos en el centro". De esta manera el paciente no pierde el miembro, que sirve para mantener la estructura del cuerpo. La utilidad pr¨¢ctica de esta t¨¦cnica permite regenerar huesos afectados por tumores. Muchos ni?os afectados por tumores pueden convertirse en receptores de huesos ajenos, sin que su operaci¨®n le suponga p¨¦rdida de movilidad. La otra forma de uso de los huesos recuperados de personas vivas es su trituraci¨®n hasta configurar una masa que sirve para "rellenar huecos y sujetar pr¨®tesis". Esta materia, que act¨²a como el cemento, es vital para soportar las adiciones de material sint¨¦tico en determinadas operaciones. Los huecos que no se pueden cubrir para anclar el hueso natural con la pr¨®tesis son cubiertos con este material vivo.
La situaci¨®n del Banco de Huesos se ha estabilizado en un tope m¨¢ximo de 230 donaciones anuales, aunque la demanda de este tipo de materia es superior. "No ofrecemos m¨¢s este tipo de trasplante por que no hay m¨¢s donaciones, puesto que toda la materia tendr¨ªa un destino final a la vista del incremento de las intervenciones quir¨²rgicas", apunt¨® Qu¨ªlez.
Las condiciones para los donantes de hueso son b¨¢sicamente las mismas que las exigidas a los donantes de sangre. "Lo exigible es que el donante est¨¦ sano y que el material donado sea de calidad". No obstante, hay algunas condiciones extraordinarias. Una persona tratada con corticoides no puede donar huesos, puesto que esa sustancia desmineraliza la materia ¨®sea.
El material ¨®seo, sometido a temperaturas inferiores a los 80 grados bajo cero no tiene periodo de caducidad. "Al principio se estimaba que un ¨®rgano sometido a estas temperaturas podr¨ªa mantenerse unos 10 a?os, pero ahora se considera que su conservaci¨®n es indefinida", asegur¨® el especialista.
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